en tránsito

Venga, tengo que hablar por fin de esto. Y aprovechando que Crudo ha vuelto a pasarse por la SER con Javier Ruiz... Llevo desde 2009 queriendo hablar del tema de hoy. Llevo tiempo «guardando el secreto», pero mira, creo que está ya prescrito. 

En el «A Vivir...» de Àngels Barceló había una sección que para mí era la joya de la corona; una sección que podríamos decir que era, sin duda, cojonuda. Sí, es que no se me ocurre otro adjetivo para definir aquella sección. No recuerdo a todos los personajes de la sección, pero sí, no sé si perfectamente, el punto de partida: Estaba Àngels en un aeropuerto antes de empezar el programa, y se encontró a algunas personas que estaban... «en tránsito». Creo recordar que contó que eran pasajeros que estaban en tránsito no tanto por estar en el aeropuerto, como por estar en tránsito en sus vidas. Y les dijo: vamos a contar vuestras historias en la radio. 

A mí me pareció muy raro, y supuse que todo formaba parte de una mentirijilla para hablar de las historias de algunas personas que eran muy curiosas. Eran unos personajes que pasaban semana tras semana por el programa. 

Las historias... No sé, me tenían enganchadísimo. Yo comentaba estas historias con mi prima, que estaba enganchadísima también, como si de una serie de la tele se tratara. Recuerdo un día, en un congreso de química, que estábamos hablando una jefa y yo sobre... no recuerdo... y salió el tema de «el tránsito». Eran historias tan locas y tenían tales vidas que nuestra pregunta era si esas historias eran reales o se las inventaban los invitados. Tertulia al canto sobre eso. 

Años más tarde, cuando fui a ver el «Hora 25» especial desde Berlín, al final del programa, me acerqué a Àngels. Y no me pude aguantar: le pregunté si aquella sección de «en tránsito» era con personajes reales, o qué pasaba ahí. Rió, le hizo gracia, dijo que siempre le hacían la misma pregunta... Y me confesó que, como decía la sintonía de la sección: «Teatro, lo tuyo es puro teatro...» ¡La canción de La Lupe! 

Le dije a Àngels que si podía escribir esto, que tenía un blog y que... Bueno... Me dijo que mejor que no, que era guay mantener la leyenda y el misterio. Quizá esta leyenda en época de Twitter (y no a mediados de la década pasada) no hubiera podido ser llevada tan en secreto. ¿De dónde salían las historias?

De la mente de Javier Gallego (Crudo) principalmente. Creo que también contaba con Celia Montalbán y no sé si con Txemi Kintana, y creo que cuando se fue Crudo y Celia a M80, el que tomó el testigo fue un guionista histórico del programa: Antonio Nuño. Igual alguno de ellos puede explicar mejor que yo cómo se parió todo esto. 

Este espacio era una increíble genialidad. Ahora, en tiempos en que tanto se habla de la innovación en la radio, ahora que se lleva tanto el reivindicar el radioteatro... En aquellos años la SER, en el «A Vivir...» de Àngels, de la mente de Crudo y compañía salía un radioteatro sin enterarnos muchos. ¡Claro que no podía ser posible todo aquello! ¡Era puro teatro! Pero sin posturear con lo que se estaba haciendo. Colándonos la trola. Y bien a gusto. 

Para escuchar un episodio, de 2005, tenéis que pinchar aquí, en este radiochip tránsito. 

Vale, quizá no sea el mejor ejemplo que podía encontrar de esta sección. Ya no recuerdo bien las historias, pero sí los nombres de los personajes históricos: Moisés, Teresa... Igual es mejor este otro de 2006, sobre mobbing. 

Han pasado ya casi 10 años de aquella especie de confesión de que todo era teatro. Creo que ha prescrito el tenerlo en secreto. Ahora estoy seguro de que mucha gente no sabe ni de qué sección hablo, pero muchos otros estarán recordando aquella sección, estoy seguro, y recordarán algunas de esas historias. Era radio, era ficción, era teatro. Era una genialidad. La cruda realidad. 

Creo que sería guay que alguien de aquella época nos dijese quiénes eran aquellos actores, quiénes hacían aquellas interpretaciones de aquella gente que, supuestamente, estaban en tránsito.