Que Juan Carlos Ortega es un genio de la radio... Eso está fuera de cualquier duda. Que tenga un Ondas no es un premio a su trabajo sino que además es una honra para los propios premios. Es de esas veces en que los premios hacen justicia.
Juan Carlos Ortega empleó (o amortizó) una de sus voces en darle vida continua a Marco Antonio Aguirre, es decir, Marcoan. Hace nada ha empleado otra de sus voces en poner el broche a Pura Rodríguez para cerrar el «Hora 25». Os voy a decir una cosa... Pura 50 - 0 Ramoneda. Los finales de Ortega disfrazando su voz de Pura Rodríguez superan con mucho para mi gusto a la carcundia anterior.
¡Pero vamos al tema que nos ocupa! El radiochip de hoy me lo envió mi amigo Quique, que mientras yo estaba por ahí, él por lo visto estaba con la SER puesta. Me dijo que lo oyera porque le había gustado especialmente. Lo puse. ¿Qué me encontré?
LA MAYOR CRÍTICA POLÍTICA AL OYENTE TÓPICO DE LA SER JAMÁS HECHA.
Y HECHA DESDE LA PROPIA SER.
Con «oyente tópico» me refiero a ese oyente típico que todos tenemos en la cabeza. Sí, a ese oyente que se corresponde con lo que dicen las estadísticas: de izquierdas, sí. Y como les gusta mostrar a sus conductores, claro: comprometido, progresistas, feministas... O sea, si pensáis en Francino, pues igual que Francino. Y esto no está ni bien ni mal. Ni siquiera es una caricatura del oyente de la SER porque casi de cualquier oyente de la SER se dice todas esas cosas: Feminista, comprometido, solidario, de izquierdas, progresista... Vamos, que no hace falta que lo diga yo, porque todos lo sabemos. Todos tenemos en nuestra cabeza una caricatura del oyente de la SER y una caricatura del oyente de la COPE. Esto es así.
Pero es que el radiochip de hoy es de lo mejor que he escuchado. Es una crítica hecha desde la SER, y por eso mismo es genial. Una caricatura que es divertida, que es inteligente, que es mordaz, que hace pensar, que saca los colores y que además no te intenta convencer de nada, ni siquiera es hiriente... Pero hace pensar al oyente y hace cuestionarse sus propias convicciones. Radiochip de la familia Garcés:
Y el valor de todo esto es que esté hecho desde la propia SER. El valor es que esto pueda ser emitido. Y el valor está en que sea tan entretenido. ¿Qué más se puede pedir? Si esto lo hubiera hecho Quequé, hubiera hablado de la obsesión por molar de la izquierda cuqui y todo eso. Está muy bien buscado eso de «la obsesión por molar». Si me pusiera serio —que un día me puse— yo hablaría de «moralismo y vagancia». El radiochip de hoy, el de Juan Carlos Ortega, habría que escucharlo con el de la entrada del radiochip de Francino.
Hacer este tipo de críticas desde fuera de la SER es casi típico, y si se hace desde las cadenas rivales no las tomaríamos en consideración, porque para eso son las emisoras de la competencia y son críticas. Pero la gracia es el hecho de que Ortega se atreva a decir este tipo de cosas. Lo verdaderamente noticioso es que oigamos a Pura Rodríguez, que un día se salga del guión Marcoan o que Ortega se vista de la familia Garcés para hacer crítica a buena parte de los propios oyentes. ¡Por cierto! En este texto de hoy he omitido la palabra España para no herir sensibilidades.
La mayor aportación de lo que llaman «radio visual» no sería ver a Ortega haciendo este programa, sino poder ver la cara de los Bardem escuchándolo. Hay que ser muy valiente para criticar al poder, los partidos, los poderes económicos y las organizaciones. Pero también hay que ser muy valiente para criticar a los propios oyentes, que son a los que se deben. Mejor dicho: no tanto para criticarles sino para despertar su espíritu crítico.
Hacer este tipo de críticas desde fuera de la SER es casi típico, y si se hace desde las cadenas rivales no las tomaríamos en consideración, porque para eso son las emisoras de la competencia y son críticas. Pero la gracia es el hecho de que Ortega se atreva a decir este tipo de cosas. Lo verdaderamente noticioso es que oigamos a Pura Rodríguez, que un día se salga del guión Marcoan o que Ortega se vista de la familia Garcés para hacer crítica a buena parte de los propios oyentes. ¡Por cierto! En este texto de hoy he omitido la palabra España para no herir sensibilidades.
La mayor aportación de lo que llaman «radio visual» no sería ver a Ortega haciendo este programa, sino poder ver la cara de los Bardem escuchándolo. Hay que ser muy valiente para criticar al poder, los partidos, los poderes económicos y las organizaciones. Pero también hay que ser muy valiente para criticar a los propios oyentes, que son a los que se deben. Mejor dicho: no tanto para criticarles sino para despertar su espíritu crítico.
No solo el personaje de Pura Rodríguez tiene columna, Marco Antonio tiene columna todas las mañanas antes de la desconexión de las 07:50.
ResponderEliminarLa obsesión por molar se prolonga en cosas como la crítica más ácida posible a los que representa que son los tuyos. Es un signo de molar "aun mas" y de aumentar el "guayismo". Ortega sabe que conseguirá molar todavía más si aparece como el "enfant terrible" que escandaliza a unos pocos de los suyos (los más puristas) a costa de ser visto como heroe y superguay por todo el resto de su claca. El eterno bucle. Egolandia.
ResponderEliminarObsesión o no, es gracioso. Que es lo que importa.
EliminarLos oyentes de la SER le pusieron a caldo, en 'la ventana', cuando Francino le llamó para que explicara porque no le gustaba la portada de 'el jueves' donde llamaban gilipollas a los votantes del PP.
EliminarPrecisamente:
Eliminar''Yo me decía, no lo hagas [defender a los del PP] porque te van a llamar de todo. Por quedar como alguien tolerante y guay no lo hacía. Hasta que un día digo... mira basta, ya está. Si me tienen que insultar que me insulten''.
Dicho lo cual, Ortega es como todo el mundo. Cuando se trata de homeopatía, también la pone a parir. Aquí todos tenemos nuestros límites. Ortega es poco sectario, pero también lo es un poco, como todo el mundo. Yo también, por cierto: me parece que los que tomáis medicinas normales os equivocáis. Y los que piensan que yo soy gilipollas por pensar así, en realidad los gilipollas son ellos.
https://cadenaser.com/programa/2016/07/04/la_ventana/1467643171_482499.html
Y dicho lo cual, no creo que Francino vaya de guay para nada. Es así. Es que su forma de ser es guay. Por cierto, bastante más tolerante con la homeopatía que Ortega, hablando de tolerancia y de respeto a las ideas ajenas.
EliminarSí, yo odiaba a Francino, pero con el tiempo fue cayéndome bien, y terminó de ganarme cuando defendió la homeopatía (a costa de que le pusieran a parir los de siempre).
Es magnífico y muy currado. Además de los tacos a destiempo, me gusta lo de "es tan hermoso" a cascoporro. Es muy de Letizia, taaaan comprometida
ResponderEliminarTu no oyes mucho a Ortega ¿verdad?
EliminarOrtega es un aburrimiento en si.
ResponderEliminarEl programa de los viernes un coñazo, aunque ha estado desde que empezó bien la temporada, con entrevistas
(a José Mota,por ejemplo) hasta este fin de semana pasado que volvió a sus mierdas de historias repetitivas, aburridas y cansinas.
Y la publicidad que hace de la propia emisora no es que sea mala,es lo siguiente.
Afortunadamente, quiero creer que es así, tu opinión es muy minoritaria. Juan Carlos Ortega es de los mejores humoristas de hoy en día, con su ironía y surrealismo. Pocos alcanzan su nivel. Es magnífico.
EliminarEste comentario ha sido eliminado por el autor.
EliminarComo se suele decir, para gustos...los colores.
EliminarEste verano que empezó con las entrevistas y a "televisualizar" sus entrevistas en youtube, los oyentes fijos en los comentarios dejamos claro que queríamos un programa como los que hacía anteriormente, y afortunadamente parece que nos ha hecho caso.
No os ha hecho caso, porque no os lee.
EliminarOrtega, en varias entrevistas, ha explicado que no le gustan las redes de internet, que no lee lo que dicen de él, que tiene un amigo que lleva su tuiter y ya.
Y hace bien.
De lo de televisualizar sus entrevistas, él dice que no es muy partidario, así que no sabemos si es sugerencia/imposición (en su caso dudo que sea impuesto) o simple experimento. O una trola de las suyas.
Eliminares un puto crack.... y las promos de Ortega son de lo mejor de la radio. Nunca una desconexión de publicidad había sido tan celebrada... seguro que lo peta entre lo millenials jejeje
ResponderEliminarEn algún momento, por la propia cadena, puede llegar a sonar repetitivo pero eso no quiere decir que no sea un genio. Los Beatles no dejaban de ser unos genios, porque oyeras y oyeras la puta misma canción una y otra vez.Ahí estas tú, para poner otra joya de los Beatles o irte a otra joya de Ortega. Let it be..✨
ResponderEliminarOído el radiochip, lo que más me flipa es que sea una parodia tan explícita de personajes reales, porque normalmente es más sutil.
ResponderEliminarMagnífico Ortega. Vaya semana para los oyentes de la Ser y lectores de ElPaís. Pedazo de reportaje de M Ansede sobre el museo de la caza.
ResponderEliminarPor cierto, que le han llovido críticas a Ansede, y parece que no solo en Twitter. La gente es cada vez más idiota o qué?
EliminarCríticas amplificadas por el Defensor del lector. Hay gente que lo quiere todo picadito.
EliminarYa digo, lo de Ortega y Ansede, de lo más divertido de la semana.
Será que el Defensor no tenía otro tema mejor, que suele pasar.
EliminarPor resumirlo: Ansede entrevista a un cazador al que le mola Franco. Y el Defensor del Lector dice, entre otras cosas, que debería haber señalado que defender a Franco a estas alturas es anacrónico.
EliminarAnsede se ha defendido en Twitter del Defensor; y Jabois, con toda lógica, le ha apoyado.
Sigue la semana de sustos para los oyentes de la ser. Esta vez El cine, entrevistan a un señor que dice que el cine taquillero americano es más progresista que el de autor europeo. Blanes atónita.
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