pitos a todo trapo

Pasaba antes muchísimo en la COPE, cuando cambiaron los pitos; que estaban hablando tan ricamente y, de repente, cuando ponían las nuevas señales horarias, hasta recuerdo a Joseba Larrañaga interrumpir una conversación diciendo algo así como «que viene la nave espacial». Y luego continuaban. Que sí, que vale, que lo de los pitos no se nota... pero si vienen con musiquita y se dejan en primer plano... hay que replantearse la cosa. 

Pasaron un par de días y bajaron el volumen de los pitos. Aquello no tenía demasiado sentido. Es guay que las horarias suenen con la sintonía de la emisora y todo eso, que queda como muy bonito... pero no siempre es demasiado funcional. No siéndolo, estaría bien que estuvieran atentos a cuando va a sonar la cosa, porque a veces molesta. 

Esto sucedió el día de Nochebuena: un amigo estaba escuchando la radio, en pleno programa especial de «La Cena de los Idiotés» tocaba el cambio de hora y... atención al pequeño detalle. Radiochip de la interrupción que me pasó @DiexistaFM:

Claro, ahí te pierdes lo que decía Aimar... así que dos opciones: o hay a esa hora un técnico aunque sea Nochebuena, que bien tendrá que estar alguien (o no, yo qué sé), o se dejan de cosas bonitas y pasan a algo funcional: que vuelvan a sonar los pitos normales, que no molestas y estamos acostumbradísimos. Algo que no fastidie justo el discurso de los que están hablando, que es lo verdaderamente importante. Sé que hilo fino, pero supongo que serían pocos los que estarían oyendo la radio a esa hora, y supongo que una noche así lo que más se espera es compañía... No notar que ni en la radio hay nadie. Yo creo que esos días a esas horas se necesita un programa de tipo los de José Luis Velasco, que uno pueda escuchar yendo o viniendo a la cena y que la gente que está sola pueda sentir que hay alguien al otro lado. Por cierto... que no sé qué hizo el resto, pero me temo que también hubo lata en todos los lados.