Hoy toca una historieta. El 5 de julio de 2010 salió el EGM y me pilló currando todo el día sin un minuto libre. Publiqué la entrada de lo del EGM pasadas las 22 h. Puse nada más empezar: «Pues aquí está el segundo EGM de 2010... un poco tarde actualizo el blog, porque he elegido mal día para que me saquen la navaja en el tren... ya dije que Moncada i Reixac era chungo, en su día...» No era coña, no. 15 años y pico después, os cuento...
Resulta que ese día terminé todo el curro a todo meter y pensé en llegar pronto a casa (aunque ya por la tarde), mirarme lo del EGM... Así que me imprimí dos hojas con algunos datos para cotillearlos, que hacía nada que habían echado a Paco González y era interesante ver si eso tendría algún efecto o no en los números, que total, todo normal. Mientras estaba echando un vistazo veo que sube un tío que se va a sentar justo delante de mí... Y ese sexto sentido que a veces tenemos me dijo que ese tío me iba a intentar robar. Con toda la tranquilidad, como si no pasara nada, como si tal cosa, metí los papeles en la mochila y me dispuse a cambiarme de sitio. El tío, diciendo eso tan típico de: «que no te voy a hacer nada», navajilla, dame las cosas, bla, bla, bla... El tío me metió un puño en la cara (pero dio en hueso) y me piré sin darle nada, poco a poco, de vagón en vagón... hasta llegar al primero.
Le dije al conductor lo que pasaba, llamaron a los de seguridad, le dejaron huir, porque aquello fue tremendo: me dejaban delante y ellos a la velocidad de abuela nonagenaria (yo diría que estaban pasando mil) hacían como si fueran hacia él. El tío, obviamente, se piró con viento fresco. Yo flipé. Me dijeron que había que llamar a la policía... y llegaron. Antes de decirme nada, le pidieron no sé qué a un negro que había al lado de la vía. Yo les interrumpí diciendo que les habían llamado de mi parte, que el negro ni pinchaba ni cortaba en esta historia. En fin... Les costó un rato hacerme caso.
Después de contar la historia, me dijeron que fuera a denunciar, ya si eso, ya cuando llegara a Barcelona, en donde más cerca me pillara. Pues allá llegué cerca de la plaza de las Glorias. El EGM... ya escribiría en otro momento. A lo que voy a contar mi historia, esperando que me escucharan como si fueran Patricia Gaztañaga, me dijeron los policías que tenían mucho lío, que eso era muy común y... que si no había parte de lesiones, que nada. Y yo les dije: «Ah, llegar con un ojo morado no sirve entonces». Aquello... pues... la verdad... Llegó un momento en que pensé que si alguna vez veía al tío ya lo tenía identificado, y el tío seguía robando... pues oye, si ellos no tenían interés, pues yo pasaba de perder el tiempo viendo lo que les importaba. Genial: ese año habría una denuncia menos, supongo.
No es el único caso de robo que viví en Barcelona, por cierto. Ya no es cuestión de los que viví en primera persona, sino los que vi con mis ojos y a gente cercana (amigos, compañeros de piso...). Por eso, cuando se habla de la inseguridad y todo eso... pues... a ver, eso era 2010. La verdad es que cuando dejé de vivir en Barcelona el robo pasó de ser algo no diré que de todos los días (que obviamente no), pero sí de vez en cuando verlo y vivirlo, a ser algo que... la verdad... no he vuelto a ver robar ni me han robado jamás desde que me fui allá por 2012.
Obviamente, cuando luego hablaban de estos temas en la televisión, en la radio... Y cuando se decía que se exageraba y todo eso, pues en mi cabeza yo decía eso de: «¿Pero en qué urbanización exclusiva vive esta gente y cuándo pilla esta gente el transporte público?» Y ponía cara de desprecio.
Lo curioso de todo esto es que, cuando contaba este tipo de cosas, había gente que me miraba con mala cara y me decían eso de: «Estás contribuyendo a crear un relato que...» O sea, contar las cosas que te han pasado y has visto con tus propios ojos, o quejarse simplemente, es algo que no debes hacer, que está objetivamente mal, porque no conviene al discurso que dice que no hay inseguridad y que es un invento. Pues chico... yo cuento lo que me ha ocurrido y ya con esa información que cada uno piense lo que quiera.
Sí, siempre me ha sabido fatal que contar estas cosas (que al final es algo que a uno le ha pasado), le sepa mal al personal (amigos, conocidos...) porque eso no coincide con lo que a ellos les gustaría que fuera la realidad. Qué le voy a hacer. Cinco días después tuve una boda y yo allí... con el ojo moradísimo. Un cuadro.
¿¿Y qué tiene que ver esto con algo de radio?? Pues resulta que algo parecido a lo que me sucedió a mí (pero sin hostia ni navaja ni nada, un robo de salir corriendo sin más, parecido a un tirón) le sucedió a Laura Rosel (ahora colaborando en RAC1) el otro día no en el cercanías, sino en «los catalanes» de camino a Sabadell. [La RENFE siempre es como la ruta pobre, y la de los FFCC la ruta pija donde teóricamente pasan menos cosas]. ¿Y qué pasó? Pues que lo contó en la radio.
Lo podéis escuchar en este radiochip que fue emitido el miércoles de la semana pasada en el programa de Jordi Basté.
Sí, estas historias personales son anecdóticas. Pero claro, cuando le pasa a alguien de la radio... Pues se usan 10 minutos en la radio en horario de máxima audiencia para explicar que hay gente que roba, que eso existe, y que si vas a la policía pasan un poquito de tu vida. Fíjate tú.
Es gracioso que todos los días ocurran este tipo de cosas y que en esas tertulias hablen de este tipo de cosas como si únicamente fueran cosas inventadas que utilizan los grupos políticos para enfrentarse. Pero cuando les ocurre a los de la radio, al final queda explicado a la audiencia. Es decir, te das cuenta de que este tipo de cosas rara vez les sucede, porque están flipando en colores, tanto como para tratar un hecho súper anecdótico (robos en Barcelona en el tiempo que viví allá no eran nada raro, con lo que esto es una cosa más), como si fuera una cosa como para tratar en la radio, como si fuera algo que los oyentes iban a flipar fuerte. Además, contarlo pasa de ser un instrumento político a ser simplemente algo que ha ocurrido.
Así que en las redes se ha vuelto a lo de siempre... [Ya le pasó a Basté el año pasado]. La gente le ha reprochado en las tertulias hay gente que niega todo el tema de los robos y que cuando son los objetos del robo... pues que entonces, qué. Pero al final... estas cosas también pasan por la radio. Pero a veces para que pasen por la radio... les tienen que pasar a ellos, claro. Como a los políticos.
Por curiosidad, de dónde era el atracador? No sería de Jovenlandia, no? Y Abellán habló en su directo de Twitch sobre la inseguridad de Barcelona recuperando un video de un dominicano denunciando que le habían atracado allí. Yo hace años que no voy por la Ciudad Condal, pero está muy extendido lo de la inseguridad por allí… https://vm.tiktok.com/ZNdGFfXhp/
ResponderEliminarDon Rozada, que sea jovenlandés o no es secundario. En los 80 también te atracaban por la calle los yonkis. El tema es que haya pobres y yonkis, que son los que generan inseguridad. Pero también, es que de verdad, mira que le gusta a la gente ser pobre y yonki. Si fueran ricos no habría esos problemas.
EliminarDon Pacman ha contado lo de que acusaron falsamente a un negro y él le defendió para no quedar como racista, pero no nos engaña. Sabemos que quiere colarnos ideología xenófoba disfrazada de demanda de seguridad. La deriva ideológica.
La deriva ideológica de don Pacman, un capítulo más. A muchos comentaristas, entre ellos yo, nos parece mal que ud. cuente esto, porque contribuye a crear un relato de inseguridad que no coincide con las cifras reales. Anécdotas no, por favor (como diría Analía Plaza). Y además ha estado ud. callándoselo durante 15 años, y lo saca ahora que gobierna Pedro Sanxe, cuando eso ocurrió con Rajoy en el poder. Ay el plumero...
ResponderEliminarEl problema es que son uds. pobres y van en transporte público. Moraleja: no sean pobres.
Bueno, he dicho que en 2010 gobernaba Rajoy porque se lo he leído a la ministra de las pulseras, Ana Redondo, que dice que en la crisis de 2008 el que hizo recortes fue el PP. En Wikipedia pone que gobernaba Zapatero, pero seguro que es mentira.
EliminarLuego está el curioso caso de la Comunidad de Madrid de Schrodinger, que es a la vez supersegura y superinsegura.
Eliminarhttps://nitter.net/remerikos/status/1959286379151597648#m