miércoles, 28 de febrero de 2018

Daniel Gavela, director general de la SER (de nuevo)

Daniel Gavela regresa a la SER como nuevo director general en lugar de Vicente Jiménez (que le mandan a llevar los contenidos de PRISA en América). 

Para quien no lo sepa, Gavela ya estuvo en este cargo desde 1994 hasta 2006. Es decir... Que de nuevo, para quien no lo sepa, Gavela estuvo al frente de la SER que para muchos es «la SER». O sea... ya me entendéis... «la SER»... La bestia parda, la emisora que volvió a ser líder para siempre, la de la programación que nos sabemos de memoria aún hoy, la que desde las segundas posiciones (incluso terceras también), porque en aquel momento no lideraban nada de nada (aunque a día de hoy cueste creerlo), y se fue encaramando en el EGM hasta convertirse en la líder 24 horas del día los 7 días de la semana. La emisora que, gracias también a la situación en la que le dejaron el resto de radios, y sí, gracias al apoyo del grupo, y de una decena de cosas más quizá, terminó haciendo un récord de audiencia, más cerca de los 6 millones de oyentes que de los 5. La radio del «si algo pasa», la «número 1 en deportes»... La que me enganchó a la radio de tal manera que siempre uno piensa que nada se le parecerá jamás, aunque seamos conscientes de que el baúl de Karina está ahí. 

¿Sabéis qué? Desde pocos meses después de empezar el blog pensé en hacer una entrada sobre Gavela. Han ido pasando los años... y mira, nunca pensé que al final sería porque le volverían a poner al frente de la SER. 

Él llegó procedente de ser director de Comunicación de PRISA cuando Antena 3 Radio dejó de hacer competencia a la propia SER dentro de ella. Recordad que hubo 2 años en los que la SER competía también con una Antena 3 Radio dependiente de ella y que estaba perdiendo audiencia a chorros. Llegó sin tener ni idea de radio. Según recuerdo escuchar a alguien (no sé si a él mismo), los primeros meses se dedicó básicamente a escuchar la radio. ¿No os parece alucinante? Es lo más sensato y menos esperable de nadie que llegue a un sitio de tal importancia. Estuvieron unos meses 3 personas analizando qué hacía la SER y la competencia. 

Y después de esto, él fue el que hizo que volvieran las tertulias a la SER. Porque desde mediados de los años 80 hasta la llegada de Gavela en la SER no hubo tertulias. El propio J. L. Cebrián estaba muy en contra de ellas, de hecho. Llegó a decir que las tertulias estaban compuestas de göbbelianos, deformadores de opinión, ignorantes... Y Gavela decidió que no se podía competir (e intentar ganar) sin tertulias. Y nacieron por ejemplo tertulias históricas, como la del «Hora 25», con Mendo, Aguilar, Carnicero... No se podía hacer radio sin análisis, y eso lo decidió Gavela. Fue el que decidió también que Gemma se hiciera cargo de las tardes tras la fuga de Sardá, fue el que configuró (sí, junto con Delkáder) la SER que acribillaba a las demás. 

Por cierto, ya que hablamos de Gemma... Vamos a escuchar la voz de Daniel Gavela. Resulta que era el productor ejecutivo del programa de televisión «Ochentéame», que se llevó un Ondas. Y en el «Hoy por Hoy» de Gemma le entrevistaron. 



Y añado una cosa secundaria, pero que en mi historial de oyente de radio también queda: Fue el que fichó a Pablo Motos para las mañanas de M80. Y fue el que se lo arrebató a la radio cuando lo terminó absorbiendo para Cuatro. 

Me enganché a la radio escuchando esa SER. ¿Hubiera sido tan oyente de la radio si no hubiera existido aquella SER cuando era pequeño? Pues supongo que sí. ¿Hubiera sido tan oyente de la SER si no hubiera existido precisamente aquella SER? Pues seguramente no. No sé si efectivamente también en este caso las segundas partes no serán buenas, pero lo cierto es que, por las razones que sean, yo, como tantísimos otros, fuimos de los que nos enganchamos a la SER como banda sonora de nuestra vida a casi todas las horas. La radio está hecha por los que hablan por la radio, los que escriben guiones, los que montan todo... Pero lógico es que hablemos de vez en cuando de las personas que están detrás y que convirtieron una emisora que no lideraba nada en una cadena que lideraba todo. El diseño también es importante.

Dos cosas más:

La primera, que el nuevo director de musicales va a ser Vicent Argudo en sustitución de Eva Cebrián. La verdad es que no ha meneado mucho Eva Cebrián las audiencias de su negociado hacia arriba... Habrá que ver qué cambios hacen en las cadenas musicales si es que los hacen, más allá de que nos fijemos todos maléficamente en si continuará o no en Los 40 el programa de su hermano (Los 40 BlackJack). Somos así de curiosos.

Y lo segundo es que hoy, como es 28 de febrero, estaba pensada una entrada sobre la radio en Andalucía... Pues nada, otro día. 

martes, 27 de febrero de 2018

silencio

Ayer un amigo del blog, Palaciego, me pasó una página de internet, del sindicato USO, en el que denunciaban que a finales de 2016 la actual dirección de RNE desmanteló la red terrestre y de satélite que había estado usando RTVE hasta ese momento. 

Todo esto venía a cuento porque resulta que el pasado 14 de febrero la señal de RNE en Madrid se quedó en silencio durante más de media hora, y casi hora y media a nivel nacional, hasta pasadas las 12 h. de la mañana. 

En la carta, al final (que ilustraban con esta imagen), ponían: 

«La prueba de esa incompetencia es que el corte de distribución de señales no afectó a los programas de TVE que fluyen por la misma red junto a los de radio. ¿Por qué falla para la radio y no para le tele? Y por qué con el actual sistema no existe una vía alternativa para la distribución de los programas nacionales y territoriales.
El actual diseño de ingeniería ha dejado a los dispositivos vigilantes de señal de los transmisores (UCA's que distinguen entre dos señales) sin posibilidad de seleccionar una emisión alternativa que evite que se vaya 'a silencio'.
En USO exigimos que se revise y corrija este deficiente modelo de distribución y transporte de señales. [...]»


El rato que no se escuchó por la radio sí se pudo escuchar por internet, por ejemplo. Ya sabéis... me refiero a que la radio no se pudo oír por el aparato de radio. El radiochip de hoy es toda la hora de radio de «Las Mañanas de RNE» que no se pudo escuchar por ningún receptor de España. Radiochip silencioso: 


Pero que más me llamaba la atención de lo que publicaron en USO era esta frase:

«Una caída así debería haber generado un gran revuelo. Otro síntoma más de la salud de la CRTVE como Servicio Público y del celo de sus directivos.»

Esto es lo que me ha llamado la atención verdaderamente. Cuando se va la emisión de una radio... ¿Qué hacemos? No es algo que haya pasado en RNE una vez y jamás en la historia haya pasado en ninguna otra radio. No es una cosa del todo extraña que estas cosas ocurran, por mucho que jamás deberían ocurrir. 

De hecho, justo hace un año, justo justo hace un año, el 27 de febrero de 2017, publiqué una entrada que se llamaba: «Y si no se oye, ¿qué?». En muchos sitios de España el día anterior la SER se había «ido a negro» en pleno Carrusel Deportivo. En el verano de 2015 dediqué otra entrada a una noche en que Onda Cero puso cosas para rellenar porque no podía sonar otra cosa. Y cuando hay una tormenta a veces se va la emisión, o cuando tienen que cortar la luz en la calle o el edificio de la radio... El otro día pasó eso en Tarragona, por ejemplo. 

Supongo que el hecho de que no nos hayamos enterado muchos de que RNE dejara de emitir durante tanto rato se debe a que el perfil de audiencia de la cadena no es muy tuitero, pero la verdad es que sí me llama la atención un poco. 

Y efectivamente, aunque en explican la causa de por qué RNE no se escuchaba y TVE emitía con normalidad, y aunque ya digo que no es raro de morir que una emisora o una cadena se quede callada de vez en cuando por motivos diversos, sí es cierto y da que pensar que en la tele... Es rarísimo que cualquier cadena se quede sin emisión. No recuerdo en los últimos años que absolutamente ninguna tele se quedara en negro... Que igual ha ocurrido y no tengo noticia. Ya contaréis vosotros si alguna vez la tele se os ha ido del todo (me refiero a TVE, Telecinco, Antena 3 o alguna de éstas, no Tele Villabajo con sus Pastores) o si los cortes en las emisoras de radio os parecen relativamente normales o no. 

Al final, lo que menos me produjo curiosidad de esta especie de denuncia fue precisamente lo que denunciaban. 

lunes, 26 de febrero de 2018

publicidad en «El Terrat»

Entre mis cintas encontré una grabación de «El Terrat» de Ràdio Barcelona del año 2001. Una frikez total, porque creo que la grabé a través del ordenador, ya que por aquel entonces, eso de poder escuchar la radio de Barcelona por el ordenador era casi rompedor.

Estaba por poner un trocito de aquella grabación de «El Terrat» en su segunda vida (ya que durante un tiempo lo dejaron), pero mira... me pareció muy interesante precisamente la desconexión. Podéis pinchar en el radiochip desconectivo, y lo vamos comentando: 



- Las «campanitas». Desde principios de esta temporada, en la SER suenan una especie de «campanitas tuneadas» para cada programa. Y la primera vez que las escuché me recordaron precisamente a estas «campanitas» que sonaban hace mil en la SER de Cataluña. Porque, como he comentado en alguna ocasión, la SER en Cataluña siempre ha tenido sintonías y soniquetes distintos de los del resto. ¿Por qué? Pues a saber por qué. 

- Audi A4. En la ronda del General Mitre. [Por donde la casa de Pujol.] Vale... Ya sé que esto no tiene mucho comentario radiofónico, que es una publicidad de un concesionario. ¡O sí! Porque resulta que una de las radios más importantes de Argentina se llama Radio Mitre, que fue inaugurada en Buenos Aires en 1925 (con el nombre de «LOZ Broadcasting») pero que desde 1928 fue asignada a la empresa de un tal Emilio Mitre, hijo de... ¡Lo has acertado! El General Mitre. 

- «El Terrat». Como si fuera un anuncio de zumos, tan de moda por la época. Y jugaban precisamente con el «catañol», que es lo que se hablaba en ese programa. 

- «Hora 14 Catalunya». Presentaba Xavier Vidal, y remarcaban que era el informativo más escuchado de Cataluña. Eran otros tiempos, ¿eh? Y es curiosísimo volver a escuchar esa locución final que tenían todos los anuncios de la SER en Cataluña: Esa locución antigua —¿quién era?— que decía nombre de locutor y programa en plan... 1924. «La primera radio».

- Concierto de Victor Manuel y Ana Belén en Barcelona, en el Sant Jordi. Y que las localidades se vendían por Caixa Catalunya. Más tarde Catalunya Caixa, y ahora BBVA. 

- «La Graderia 1ª Edició». Después del «Hora 14» hacían los deportes en FM, con Xavier Saisó. Y de nuevo, la locución final en plan vintage.

- «La Contraportada», que era el programa de los Especialistas Secundarios, que hacían de 15:30 a 16 h. y que duró unos cuantos años. Tantos, que años más tarde aún pillé la emisión de su programa día tras día mientras me los ponía de tapadillo en el laboratorio. En esta ocasión, en vez de hacer como anuncios de zumos, hacían como de anuncios de compresas del momento. 

- «La Ventana». Que ojo, que se hacía desde Barcelona y lo remarcaban. En plan: «Es para toda España, pero se hace desde aquí también». Y qué bonita suena la sintonía de toda la vida, ¿eh?

Y hasta aquí. Luego venía el indicativo de Ràdio Barcelona... Pero eso me lo guardo para otra entrada, que quedaría muy largo. Qué distinta sonaba la SER ahí, ¿verdad? Y sigue sonando distinta. 

domingo, 25 de febrero de 2018

«nadie lo vio venir»

Me estoy refiriendo a la famosa burbuja inmobiliaria. Y obviamente, eso de que nadie lo vio venir es una trola como una casa, porque obviamente se llevaba hablando de eso años y años. 

Hace 10 años, a estas alturas, estábamos en campaña electoral. Yo por aquel entonces estaba viviendo en Italia, y me informé de todo por la radio... Bueno, por los podcast que me bajaba con la conexión a internet de la universidad, que yo estaba en una casa menos comunicada que la de Gran Hermano. 

Por aquel entonces estaba rodeado de monotema inmobiliario: La gente se agolpaba en el sistema público de venta de vivienda del Gobierno de Aragón, mis vecinos estaban felices porque a los dos les había «tocado un piso» (es decir, concedido el derecho a comprar una de las casas que había de protección oficial a unos 25 millones de pelas, aproximadamente), y obviamente, con el dinero que ganaban, era posible pagar la hipoteca, pero comer piedras. Con este panorama, eso de que «nadie lo vio venir» es difícil de creer tiempo después. 

No hace falta entrevistar a exministros en «Salvados» para que nos confirmen lo que ya sabemos. Es tan fácil como buscar en la propia radio:

Si pinchas aquí, encontrarás una columna de Haro Tecglen hablando de la burbuja inmobiliaria en octubre de 2003. Describía la situación que veíamos todos a nuestro alrededor poco tiempo después. Quizá exagerado por entonces... Pero estaba el PP en el gobierno, y esto era un tema que se tocaba mucho en la SER. 

Si pinchas aquí, en este radiochip burbujo, encontrarás una pieza de Ángeles Afuera, también hace 15 años, en la que hablaba de la burbuja inmobiliaria. Se preguntaban si había o no burbuja, y ponían un trocito de la opinión de Rodrigo Rato. 

aquí queda constancia de que por mucho que se dijo que nadie lo vio venir... En 2003 era un tema del que se hablaba en la radio, que existía... Bendita fonoteca. 

sábado, 24 de febrero de 2018

Forges

Desde bien crío me llamaban la atención esas viñetas tan molonas. Qué raro dibujaba... Qué molonas las expresiones... Cuando uno es un crío creo que se fija sobre todo en ese tipo de cosas. Luego, con el tiempo, uno va viendo más cosas. 

Qué sorpresa cuando escuché su voz por primera vez. Era un colaborador de Sardá, y yo me quedé flipando en plan: «oh, este hombre también sale por la radio». Era una especie de señor mayor ídolo para mí. Qué curioso ese señor que decía cosas en la radio, dibujaba de una manera especial, tenía un lenguaje propio... Me dijo una vez mi padre que Forges era parte también de «lo del Luis del Olmo» (el debate sobre el estado de la nación), y años más tarde también descubrí que colaboraba en otro programa del que yo era fan, el de Pepa Fernández. 

Da la casualidad de que el último libro que regalé fue la «Historia de Aquí» de Forges. Qué genial. Y en la radio también lo era. De habla tranquila, sencilla, empleaba palabros que se sacaba de la manga... El radiochip de hoy es de RNE, pero no del programa de Pepa, ni de sus colaboraciones en la SER o con Luis del Olmo. 

Es una entrevista a Forges en el programa «Historias de Papel» de RNE en Andalucía. Hablaron de historia, de «La Edad Forgesporánea»... Radiochip de Forges: 



Y aquí va una sección de Juan Carlos Ortega junto con Forges, obviamente en el programa de Pepa Fernández, cuyo logo, como veis, quizá os suene la autoría sin necesidad de firma. No podía ser que no pasaran por el blog. Otro radiochip de Forges,


Juan Carlos Ortega compartió año de Ondas con Nieves Concostrina. Todo muy de RNE como veis. Y de la SER. Estuvieron hablando del libro de la Concos en el programa de Toni Garrido, que venía ilustrado precisamente por Forges. Como veis, todos comparten RNE y SER. Qué redondo todo.



Cómo no iba a ser un ídolo para mi, que soy friki de la radio, de los tebeos, historietas y dibujantes en general, y de la historia. ¿Cómo no podía pasar por el blog? ¡Grande Forges! Pero no os olvidéis de él. 

viernes, 23 de febrero de 2018

la otra noche de los transistores (y 2)

A ver... que quizá no hubiera sido una «noche de los transistores» no quiere decir que no nos pique la curiosidad de saber qué ocurrió para que Onda Cero hablase de aquel programa como de algo histórico. 

García no hizo esa noche un programa de deportes. Abrió su programa junto con Javier Algarra (que intentaba meter baza cuando García paraba de hablar) y dedicó su programa básicamente a la crisis de Iberia. El comienzo del programa fue así, como escucharéis en este radiochip ibérico: 


Es buenísimo ver cómo parece que García se imitaba a sí mismo. La cosa empezaba con las dimisiones de los pilotos de Iberia, y consideraban que eso de que estaba en peligro la seguridad del personal era trola total. Que si eso era un cierre patronal, que si la decisión de Iberia atentaba contra el derecho de huelga, que si el Ministerio decía que esta decisión no estaba justificada... El PSOE exigía que Aznar saliera a dar explicaciones. 



Hablaban después con gente afectada, leían lo que Iberia decía, las notas de todas las partes... Hombre, si hay algo en lo que coincide el histórico 23-F con esta retransmisión es que es gracioso escuchar cosas de este tipo con el soniquete de García.



Daban consejos desde la propia Iberia. Era divertidísimo escuchar cómo llamaban a las líneas que ponían a disposición de la gente, y comprobar que las líneas estaban colapsadas. En el programa de García ponían en antena el sonido de que esta línea comunicaba. Y por fin le pillaron el teléfono... Ya había pasado media hora de programa. Ojito a la conversación de García con la señora Margarita, que quién le iba a decir a esa señora que esa misma noche iba a salir en antena para toda España. Otro radiochip ibérico: 



Y nada, que desde el SEPLA se decía que la seguridad estaba totalmente garantizada, y desde Iberia, que no. Otro radiochip ibérico: 



Pasaban los minutos y aquello era casi un Carrusel Aeropuertos. Hay que decir que García contribuía a crear ese clima deportivo. Y aunque los aeropuertos no tuvieran actividad de madrugada, aunque no pasara nada, ahí estaban los corresponsales. ¡Minuto y resultado en este otro radiochip ibérico!



¡Antención que en los paneles aparece como retrasado! ¡Ojo, que hay más radiochips ibéricos medio carruseleros! 


Qué genial escuchar cómo García usaba la clásica técnica del periodista deportivo de hacer como que pregunta algo gritando una evidencia. De verdad, es graciosísimo. Aquí lo veréis en este radiochip ibérico, que ya van unos cuantos: 


Y luego ya llamaban a Pedro J. para que opinara. Decía que le imaginaba ahí en mitad del periódico controlando todo. Molaba ver cómo Pedro J. se desdice de dónde le venía la fuente que le decía que... Bueno... Escuchad este otro radiochip ibérico. Van 7. Y la noche continuaba. 



Otro momento garciesco totalmente es cuando reúne en antena a las partes que están en conflicto. Ojo, porque aquí tenemos el momento clave de la noche. Ojo a este rato de radio en el que todo cambia. García en estado puro, yendo al grano y casi presionando a las partes para que se pusieran de acuerdo, y por supuesto, en antena. Espectáculo a la vez que servicio social, señora. 



Es buenísimo, porque fue una cosa que más o menos se encauzó en la antena de Onda Cero. Es genial, porque vais a escuchar hasta cómo García personaliza en sí mismo la situación, cómo él actuó en el pasado y cómo tienen que actuar ellos... No tiene precio este otro radiochip ibérico. 



Bueno... que la noche terminaba, y tras más de 200 minutos de programa, despedían. Daba paso a Cebrián de la manera más garciesca imaginable. Buenísimo. Genial. Divertido, intenso... Un espectáculo. No, no fue una noche de los transistores, porque sólo ha existido un 23-F, y se espera que así sea para siempre. Aunque no fuera ninguna noche de transistores, fue una noche intensa. Quizá ya no nos acordemos del hecho, pero sí merecía la pena rescatar aquel programa. 

jueves, 22 de febrero de 2018

la otra noche de los transistores (1)

Mañana es el 23-F y es el día en que siempre hablo en el blog de aspectos de aquella noche, ya que por algo se llama «la noche de los transistores». 

Nunca acierto a saber si le doy demasiada importancia a aquella noche por no haberla vivido, o si no le doy la suficiente importancia por exactamente lo mismo. Pero, obviamente, un golpe de estado sumado a que fuera la radio el medio por el cual la gente tuviera conciencia de lo que estaba pasando hace que esto siempre pase por el blog. 

Por eso seguramente, habiendo pasado más de 35 años de aquello, quizá no podamos decir que haya habido una segunda «noche de los transistores». Ha habido hechos que nos han tenido pendientes de la radio, de la tele... Pero siempre con acceso total a la información por todos los medios. 

La noche del 12 al 13 de julio de 2001 ocurrió una cosa de la que quizá no se acuerde casi nadie. Aduciendo razones de seguridad, Iberia decidió dejar todos los aviones más pegados a la tierra que un chicle en el suelo de la parada del autobús. De los pocos más de 200 pilotos de la compañía, casi 100 dimitieron a la vez. Iberia no volaba y mogollón de gente sin poder viajar a mitad de julio. Imaginaos. 

¿Cómo lo contaba la radio? Pues boletín de la SER, conexión con Ana Terradillos en este radiochip transistor: 


Un boletín que sólo con la noticia de Iberia duraba 6 minutos. Luego añadieron alguna otra noticia (había muerto Gila, que hubiera sido sin duda portada esa noche en cualquier informativo) y los deportes. Un boletín casi eterno, pero la radio está precisamente para eso cuando se le necesita. 

La mañana siguiente me desperté tarde. Muy tarde. Yo por aquel tiempo pensaba que no me subiría en un avión en la vida y aquello me interesaba poco o nada. Me acuerdo que puse el debate ése del mediodía de la Campos. Allí estaba ella diciendo que el programa de García aquella noche había sido brutal, que gracias a José María García por su mediación... ¿¿¿Cómo??? No entendía qué había pasado. Por lo visto aquella noche García en su programa había estado mediando para que se desconvocara esa huelga, o algo así. No me enteraba muy bien yo de aquello. 

Eso sí, en Onda Cero, que tenían a García de bajada completamente (aunque le iba mejor que a De la Morena en Onda Cero ahora) decidieron hacer una promoción de lo sucedido aquella noche como si hubiera sucedido yo qué sé qué. Lo llamaban «la otra noche de los transistores». Os lo juro. Por si queda alguna duda, aquí va esta promo de Onda Cero, que es otro radiochip transistor: 


«Como la noche del 23-F», «la otra noche de los transistores». ¿Para tanto fue eso? ¿Tan vibrante fue esa noche? Obviamente, apuesto a que el 100% de los que estáis leyendo esto sabéis que «la noche de los transistores» es la del 23 de febrero de 1981, pero esto de Iberia, García y todo eso... Igual el 10% os acordáis de aquello si tiro por lo alto. 

Aquella promo fue un poco exagerada, y oye... ¡para eso están las promos! Pero cuando son tan exageradas pueden terminar pareciendo ridículas. Ahora quizá nos pueda parecer más que aquel día.

¿Cómo fue aquella noche? ¿Qué pasó en el programa de García? Pues mañana vemos (o escuchamos)... y juzgáis vosotros. 

miércoles, 21 de febrero de 2018

agenda de servicios útiles

En la SER, por mucho que pasen los años, sobreviven varias cosas siempre. Por ejemplo, hace unos años hablé de la «la sintonía superviviente», que venía de los tiempos de Antena 3 Radio: «Antena de la Bolsa». También sobrevive la sintonía clásica, la Sinfonía Azul, sobre todo para los momentos electorales y cosas de mucha pompa y boato. También aún sobrevive su versión carrillón para pasar a publicidad... Igual algunos sabéis el único momento de toda la programación en que aún suena. 

Y se me ocurre otra cosa que sigue sobreviviendo a los años y modificaciones: La «agenda de servicios útiles» de la ONCE dentro del «Hoy por Hoy». ¿No os habíais dado cuenta? 

Si pincháis aquí escucharéis a Iñaki dando paso a este espacio en 2005 (aunque me atrevería a decir que igual llevaba 10 años sonando esa entradilla). ¿No os dais cuenta de la voz? ¿No os dais cuenta del tipo de musiqueta que suena? Es noventera, diría yo. [Quizá se acuerde alguien de cuándo empezó esto de la «agenda de servicios útiles».]

Y el radiochip de hoy, claro, es esto mismo, pero en 2018. Aquí va el radiochip de servicios útiles: 



Saludos de la ONCE y buenos días. Estoy seguro de que estamos tan increíblemente hechos a esta sintonía y estamos tan acostumbrados a ella, que ni nos damos cuenta de que es una publicidad, ni de qué dice, ni nada. Eso sí, «es casa». Lustros, lustros y más lustros escuchando esto. Seguro que jamás hemos reparado en la de tiempo que llevamos escuchando este espacio. Igual que ha pasado con los cambios de logo. He hecho ahí una mezcla para que veáis que sí, han pasado los años y no os habíais dado cuenta... O sí. 

martes, 20 de febrero de 2018

la «Martallesa»

Así bautizó ayer Toni Garrido a la versión del himno de Marta Sánchez. Casi cada hora en cada radio hablaron en algún momento de la canción. Hasta hablaron de esto en Ràdio Flaixbac. En todas las teles, en todas las radios, en todos los informativos... Hasta Pedro Blanco en el «Hora 20» yo le sigo llamando así, ¿vale? dijo que no hablaría del tema, pero obviamente, diciendo esto, tocó el tema. 

Voy a volver a Toni Garrido de nuevo, que quizá sea lo más interesante de la entrada de hoy, pero antes os contaré cómo fui pergeñando esta entrada, que creo que es lo interesante de verdad. 

El tema de ayer fue éste. Alsina, por la mañana, habló del tema, como podréis comprobar escuchando su entrada de ayer a las 8 h. Radiochip martalleso: 


Obviamente, el tema no es el himno en sí, sino cómo ha surgido, quién lo apoya, quién no, qué se dice sobre él, qué connotaciones le ponen, cómo es que una cosa captada por un móvil y subida a la red se hace viral... Lo realmente interesante es el clima que hay como para que esto haya sido algo que ha llenado cada hora de cada radio (y teles) de ayer.

Y Alsina tuvo a Marta Sánchez en el programa. Creo que fue el primero. Otro radiochip martalleso:


Justo después de este radiochip, entraba en la COPE en directo con Herrera. Y él, encantado con el tema, le entrevistaba de manera muy favorable y ufana en este otro radiochip martalleso. Tendréis que ir al minuto 34 para ir al grano y no comeros la entrevista a Espe: 


Era curioso, porque Alfredo Menéndez tenía a Pablo Iglesias en el propio estudio, y aunque después entrevistó a Marta Sánchez (cómo no), lo interesante es lo que opinaba el líder de Podemos, en este otro radiochip martalleso (yendo al minuto 21):


¡Balones fuera! La cuestión es que yo me quedé pensando en si este tema, que era lo que todo el mundo compartía en las redes, de lo que estaban hablando todos... Este tema... ¿Hablarían de ello en la SER? 

Yo hice mi propia apuesta cuando iba en el autobús. ¿Hablarían con Marta Sánchez? ¿Esto sería un tema para dejar aparte o ningunear? Yo estaba jugando y apostando conmigo mismo. En plan: «Visto lo visto, y sabiendo lo que todos sabemos... igual es un tema que no les mola». Por otro aldo, pensé: «Pero a ver, loco, malpensado, cómo no van a tocar el tema si todo el mundo habla de esto, sea para bien o para mal». «Pues igual hablan del tema, pero con Marta ni de coña hablan». Y al final, pasadas las 10 h. de la mañana, pensé que igual Toni hacía un chascarrillo y ya está.

Cuál fue mi sorpresa (enorme, o no tanto) cuando descubrí que esa hora fue criticada por algunos en Twitter. Leí mensajes que decían que desde hacía 30 años habían estado escuchando el programa y que dejaban de ser oyentes, que si fue una entrevista babosa a Marta Sánchez  —¡si a mí me había parecido que había sido una conversación de lo más distante!—, que si qué decepción... La entrevista a Marta Sánchez fue la siguiente, en este otro radiochip martalleso: 



Con llamada al telefonillo incluida. Al final, el más imaginativo fue Toni, que se inventó lo de bautizarlo como «La Martallesa». De esa entrevista han sacado el titular «Jamás imaginé que se iba a liar esto». Pues es aplicable a Toni también. Era de esperar que hablar del himno en la SER, tal y como está la audiencia, era arriesgado. Estaba visto que tocar este tema iba a ser delicado. A veces pienso que la SER ha estado tan identificada con el PSOE que ha terminado adoleciendo de los mismos males políticos. Y lo mismo hablando de su antigua ya «podemización».

Porque lo gordo no fue sólo lo de «La Martallesa». Después de este tema tocaron lo de la lengua en las Baleares y los médicos. Madre mía. Se le ocurrió llamar a su madre, que vive allí. Toni es de Felanitx, o sea, de la isla de Mallorca. La cuestión es que en este último radiochip martalleso, si vais al minuto 21, escucharéis la pieza: 



Bueno, pues busqué reacciones de la gente en Twitter (siempre tan beligerantes) y flipé. No fue una inundación de comentarios negativos, pero los que hubo me sorprendieron mucho. Que si anticatalanismo de la SER —¡esa radio en la que todos los presentadores (como quien dice) eran catalanes!—, que si vaya decepción, que si entre lo de Marta Sánchez y lo del catalán en las Baleares, qué vergüenza lo de llamar a su madre en plan estadística, bla, bla, bla... Madre mía... De repente, Toni Garrido se convertía en la famosa caverna. En tiempo récord. 

¿Veis? Esto es lo verdaderamente interesante. Lo de Marta Sánchez es una chorrada que si os ponéis a mirar lo que dicen los himnos de otros países vais a fliparlo fuerte—, y en realidad no deja de ser una anécdota. Una cantante en un concierto hace una versión del himno de su país. Esto no es noticia en ningún lado, porque realmente, en nuestras vidas, tampoco es tan importante, siendo sinceros. 

Sin embargo, esto sí es noticia aquí. Todas las radios han hablado del tema a todas las horas. Llegaron a la cansinidad absoluta a lo largo del día. Podéis jugar a ir a ivoox y probar a buscar horas de radio de ayer. Y lo divertido es que antes de que se traten estos temas ya sabemos más o menos cuál será su tratamiento y además sabemos qué «peligros» tienen tratarlos en cada emisora. ¿Es valiente tratar estos temas a pesar de saber que parte de la audiencia te va a jurar odio eterno o, por el contrario, es temerario? ¿Sale a cuenta? Como decía antes, me da la sensación de que a la SER le pasa como al PSOE. De todas maneras, Twitter siempre es un lugar donde abunda la indignación. ¿Cómo se mide el malestar real de la audiencia que no se manifiesta y no le apetece moverse para opinar? Porque esos son la gran mayoría. 

La opinión de ayer de Francino sí me parecía más canónica para la SER de estos últimos años. Digamos que quizá está más en la línea que yo presuponía... Otro radiochip martalleso: 



Pues bucead en la programación de ayer... y no falla: Marta Sánchez en todos los sitios a todas horas. Era imposible no hablar de esto al día siguiente. Y ojo... esta entrada del blog sustituye a la que tenía prevista para hoy, que al final era algo relacionado con lo de hoy. Pero lo dejamos para mañana. 

lunes, 19 de febrero de 2018

a pesar del gobierno

Hay colaboradores y comentaristas de la radio que pasan menos desapercibidos que otros. Hay gente gris y hay gente que, por lo que sea, llaman la atención. Uno de los que llama la atención es Carlos Rodríguez Braun, sin duda. 

Y es la cuarta vez que pasa por el blog: Pasó cuando comenté esas adivinanzas musicales que hacía con Herrera cuando estaba en Onda Cero, cuando comenté la sección de canciones económicas en «La Brújula» y también por las frases tan celebradas que tiene cada mañana en el programa de Alsina. Hay veces que en la vida real te dan ganas de comentar cosas del tipo "cuidado....", "¡será por dinero!" y cosas así. 

Lo que más define a Rodríguez Braun (además de su acento, claro) es su saludo. Siempre son buenos días, buenas tardes... y «a pesar del gobierno». Os cuento una anecdotilla, en plan Chenoa: 

Un amigo y yo siempre nos quedábamos con la copla de «a pesar del gobierno», y claro, en tiempos de ZP podíamos pensar que cada saludo era un ataque a Zapatero o al gobierno socialista. Claro, no nos parábamos a pensar en lo liberal, liberal del personaje y por tanto, no nos coscábamos de que no era tanto un chascarrillo frente a un gobierno socialista, sino a cualquier «gobierno malvado, que mete sus narices en la economía». Por eso pensamos que, cuando ganó el PP en plan arrasador, dejaría de decir eso de «a pesar del gobierno». Pero no. Lo seguía diciendo. 

Un día le entrevistó Alsina en «Más de Uno». Rodríguez Braun se confesó muy oyente de radio desde crío, muy fan de Les Luthiers... Y al final del minuto 2 escucharéis la explicación. Radiochip a pesar del gobierno: 



O sea, que todo surgió en el «Hoy por Hoy» de Iñaki. Resulta que una vez le respondió con la frase a Iñaki, le gustó, y se quedó para siempre. Así pues, efectivamente, es una frase que no tenía tanto que ver con un gobierno actual o no... sino que viene de hace... buf...

Y esto nos lo tendremos que creer... O no. Quizá necesitéis una prueba para creeros que esta frase nace en tiempos de Iñaki... y quizá necesitéis esa prueba para que, a pesar de que os lo estoy contando, creeros que efectivamente Rodríguez Braun formase parte del «Hoy por Hoy». Aquí va el otro radiochip a pesar del gobierno:



¿Veis? Pues así es. Quizá en aquella época «a pesar del gobierno» sonase como lema anti-PP. Luego, sonaría a lema anti-PSOE, y así podríamos jugar con todos. Al final no es «este gobierno» sino «el gobierno» en plan liberal irredento. Curiosidades de la vida. 

domingo, 18 de febrero de 2018

en febrero de 2017...

Febrero del año pasado tuvo en el blog mucho contenido en plan histórico. La mirada a los Ondas de 1967 nos llevaba a nombres como Juan de Toro, Sautier Casaseca, Paco Ortiz... Pero hubo que recordar a Juan Tribuna en su muerte, o Juan Soto Viñolo, que era el que escribía los guiones del consultorio de Elena Francis, que es el consultorio más famoso de la historia de la radio. Pero no fue el primero, porque antes estuvo, por ejemplo, el de Montserrat Fortuny. Lo de los espacios patrocinados parece que es una modernidad de los tiempos que corren pero es más antiguo que comer con los dedos. 

El año pasado, para el día de la radio, Herrera reunió en su programa a Iñaki, Luis del Olmo y García. Todo muy bonito y de muy buen rollo, pero bien que García, en cuanto tuvo ocasión minutos después, se fue a Intereconomía a decir lo que realmente pensaba... Aquel mes Basté jugó a contar qué nombres conformaban la historia de su radio. En el blog jugamos a hacer listas de qué nombres conformaban nuestra radio. Aunque la verdad es que lo más radiofónico de aquel día de la radio fue lo sucedido en «El Partidazo». A ver... estaban hablando de radio. Pepe Domingo estaba hablando de las movidas de cuando se movieron de radio, algunas historias de radio que le habían sucedido... Y en mitad de la entrevista... ¡El directo! Justo en ese momento conectaban con la salida del hotel de Maradona... Lo sucedido lo podréis escuchar pinchando aquí, en este radiochip homenajístico

Y hablando de pasado, de personajes de radio y de historias, hubo que recordar a Pérez de Arteaga, y en la parte más lúdica (si es que se puede decir así), recordamos a Ángel Cristo cuando le entrevistaron en un programa de corazón de la SER

Yendo a lo más moderno, hablamos en el día de los enamorados de cuando los locutores de un programa son pareja y terminan mostrándolo. El protagonista masculino de ese radiochip era Xavi Martínez, que aquel mes también fue noticia por lo de la elección de Manel Navarro para Eurovisión. Otra persona que estaba ahí, en el jurado, era Cárdenas, que aunque se salvó de aquella polémica, tuvo que hacer un añadido en su programa al día siguiente que quedó de lo más «corta, pega y colorea». De todas maneras, hablamos de eso de la calidad de sonido... Algo que no sé si está sobrevalorado viendo lo que hace la gente. Y hablando de cosas sobrevaloradas... ¿Hablamos de los seguidores en Twitter? 

sábado, 17 de febrero de 2018

sonido de pecera

El radiochip de hoy es un típico error que sucede en la radio de vez en cuando. Sí, claro, de esos errores que no deberían suceder, por supuesto, pero ocurren.

Fue en el boletín de las 16 h. de Onda Cero del día de la radio. Mucho homenaje a la radio, mucho homenaje a los profesionales... pero el mundo del gazapo radiofónico, como Shiva, se abrió paso. No podía faltar a la cita. 

Es un gazapo más, sin importancia, pero lo que le hace aparecer en el blog es que nos permite escuchar el «sonido de la pecera». Pasaban a las noticias de los deportes de Óscar Conde y... no sonaba nada. Escuchad lo que sonó en este radiochip peceril (gracias a Carlos J. Glez., que además de mandarme el recorte, amplió el sonido peceril): 



«¿Se ha bajado?», «síguelo, Sergio», «no suena la mesa, no sé qué pasa»... Ese momento de tensión del otro lado de la pecera es lo que normalmente no se oye en el mundo del gazapo. Sin embargo, la gracia de este momento, es que se escucha qué ocurría al otro lado. 

Obviamente, estos momentos se terminan resolviendo con publicidad, que como siempre digo, es Onda Cero y que no falte publicidad... Kilos de publicidad. Toneladas de publicidad. ¡Venga ese Ramiro!

viernes, 16 de febrero de 2018

el «tuiterismo» de 2018

El año pasado dediqué una entrada a ir contando los seguidores que tenía cada radio en Twitter. Estaba claro que un año más tarde iba a mirar si había habido algún cambio. 

En aquella entrada vimos, en resumen, que: 

- Lo normal es que una radio tenga aproximadamente un cuarto de su audiencia como seguidores de Twitter. La excepción era la COPE, que era aproximadamente un 10%.
- Que las radios musicales jovenzanas suelen a seguir en Twitter aquello que escuchan, con lo que ese porcentaje se acercaría al 50%. Si es una emisora no jovenzana, justo lo contrario. 
- Que hay algunas radios que le echan un morro que se mueren, y que lo de la compra de seguidores es alarmante. Había una en particular que se quería parecer a las grandes y que sus datos eran escandalosos. No colaba. Seguro que si preguntamos, jamás reconocerían que han comprado nada, pero... a ver... 

Vamos a ver los datos del año pasado (datos de 2016), y en la parte derecha, los de 2018 y el porcentaje referido a la audiencia en su último EGM:


Todas las radios han ganado seguidores. Poca gente se pone a hacer «un follow» a una radio así porque sí. La gente se apunta, pero no se desapunta. Quizá contar seguidores en Twitter servía para mirar la tendencia aproximada de crecimiento antes más que ahora. A día de hoy, el cambio en los porcentajes viene relacionada más con el cambio en el EGM (las típicas fluctuaciones o las ganancias o pérdidas en el último año o 2) que con una ganancia real de seguidores. Ya no hay grandes ganancias de tuiteros. Ya no tiene sentido insistir tanto en que la gente se haga de las cuentas de Twitter de las cadenas. En ocasiones, son los programas concretos los que tienen mayor repercusión que algunas de las cadenas. 

En realidad no hay tanto cambio con respecto a 2017 que nos sorprenda. Sí, las catalanas por motivos obvios han subido, también Máxima FM, cuya audiencia se ha ido a chorros... Un coñazo. No hay nada importante que se pueda comentar. Bueno... Si nos fijamos, Radio 4G, con ese porrón de seguidores acérrimos que tiene (guiño, guiño), ha pasado de 128.036 a 128.295 seguidores. Miradme a la cara. Os lo acabo de decir todo. [Ojo: ahora mismo son 127.949. Alguien se ha tomado la molestia de darle al botón de dejar de seguir.]

El radiochip de hoy es una sección que tenía Juan del Val en el despertador de Melodía FM. Se llamaba «el amargao de Twitter». Comentaban cosas sucedidas en Twitter... Resquemores comentados vía radio. Y oye... era original. Esto, a más velocidad, hubiera chutado mejor, que es a la velocidad que leemos todo en Twitter.



En realidad, Twitter es una manera genial para las radios para publicitarse gratis, ganar oyentes interneteros, intentar que se viralicen algunas piezas... Pero en la vida real, la gente está mucho menos mirando Twitter de lo que pensamos. Somos máquinas de pasar de los mensajes sobre cosas que consideramos que no nos importan antes de leerlas. 

jueves, 15 de febrero de 2018

el pacto de RAC1

El lunes por la tarde Basté invitó a su programa a Pepa Bueno, Carlos Herrera, Carlos Alsina y Mònica Terribas. Efectivamente, no estuvo Alfredo Menéndez, pero su ausencia es como una tradición ya. Es como Homer para el Sr. Burns

Estuvo bonito. No es que tuviera mucha chicha la cosa, ya que quizá no era una reunión para polemizar ni tratar ningún tema de actualidad, pero estuvo curioso. Quizá hubiera molado que hubieran hablado un poco más de la radio más allá de los recuerdos. Me hubiera gustado que hubieran hablado de qué programas de radio les gusta que no sea de sus cadenas. O de si escuchan la radio. O de si creen que los oyentes buscan opinión y no información, o de si las tertulias son así o asá. Quizá hacer un debate estando todos en la distancia era un poco difícil... 

Estuvo curioso, sí. Mirad que fue una cosa bastante ligera, pero la verdad es que mirando las redes flipé un poco. Como este rato de radio se dio en RAC1 (cuya audiencia es mayoritariamente votante independentista), hubo dos grupos tuiteros (y por tanto, casi por definición, beligerantes en sus causas) que destacaban que Herrera estuvo todo el rato hablando en catalán (en plan: «cómo una persona que sabe catalán nos odia tanto y dice esas barbaridades», que el día que descubran que Jiménez Losantos también, les dará un parraque), y los que destacaban la simple presencia de Herrera en RAC1 en plan «no puedo entender que den voz a este facha en esta emisora, que claramente es traidora a la causa». Por fortuna, todos sabemos que la vida en Twitter difiere bastante de la vida real. En general, creo que a todos nos hizo gracia la situación. 

Pudimos observar que a Alsina durante muchos años le perseguirá lo de «¿y la europea?», y que el tema de consenso entre los de las mañanas de radio es el de los biorritmos vitales. Estuvo curioso, eso sí, cuando hablaron de sus recuerdos radiofónicos de infancia. Y todo esto lo podréis escuchar en este radiochip racuniano: 



Pues eso, un rato de radio con los de la radio. Una foto radiofónica que quedará como un documento para la posteridad. Eso sí... Esta entrada se llama "el pacto de RAC1". ¿En qué consiste? En jugar a decirle a los jefes que empiecen más tarde. Bromeaban diciendo que bastaría acordarlo para que luego alguien se saltase el pacto. Pero... ¿Qué impacto tendría esto en cuanto a la audiencia acumulada? Pues resulta que esa hora, la primera, es la menos escuchada de todos los programas matinales... ¡Porque no nos levantamos todos tan prontísimo! La gráfica que veis abajo empieza a las 6 h. de la mañana y termina a las 6 h. del día siguiente. Cada rayita (o punto) es la hora siguiente. 


Vale, la primera hora de los programas matinales es tan importante como la de cualquier programa de tarde... Pero desde luego, el grueso de oyentes de la radio matinal empieza a escuchar la radio más tarde. ¡Y eso que en los últimos años la gente se despierta antes en España! Bueno... en realidad ya hablé de este tema hace años, cuando hablé de la posible «I+D matutina» que se podría hacer en la radio... Antiguamente los importantes de la radio empezaban después de los teloneros, y ahora los importantes son los que se despiertan antes que el panadero. Por no hablar de la famosa primera hora enlatada y editada de los despertadores de las musicales... Que eso es otro tema. 

A ver si el año que viene hacen algo parecido y además de hablar de la radio del pasado hablan de la radio de hoy en día. A ver qué opinan de lo que se hace ahora. De todas maneras, fue un rato de radio bien entretenido que tenía que pasar por el blog sí o sí. 

miércoles, 14 de febrero de 2018

a través de los Ondas (39): 1993

Parece la bandera de Azerbayán pero dada la vuelta. Pero no, son los Ondas de 1993. Continuando la tónica de esos años, una lista minimalista. E igual que en 1992... Ningún premio para la SER y ninguno para Antena 3 Radio, que era ya de ellos. Pero sí un premio para Cadena Dial. Igual que con Los 40 Principales, a cadana nueva de la casa... Premio que te va. 

Porque Cadena Dial tenía casi 2 años de vida solamente, pero igual era una manera de potenciar la marca. Siempre fue música en español, siempre con el favor de público femenino... «Romántica y Latina» se dijo muchos años. Han pasado casi 25 de este Ondas y sigue siendo... femenina, latina, romántica... y cuqui. El radiochip de hoy es de 2016, y es muy «de enamorados». Radiochip enamorado:


Otro premio fue para el programa «La Ley de la Calle», que es el programa que hizo en RNE Pérez-Reverte y que ya pasó por el blog. Y otro Ondas —el tercero— para Encarna Sánchez. Su último Ondas, porque poco tiempo más tarde murió.

En 1994, ya os adelanto, también premiaron a algún programa de tarde, y de paso volvió la SER a recibir un Ondas... Pasó a ser la nº1 en audiencia al final del año y ya se volvió a «autopremiar». 

martes, 13 de febrero de 2018

¿Qué pasa con «OT»?

Hoy es la gala «de regalo» de «OT», que en realidad sería «OT 9». Ha sido un éxito, sin duda. ¡Quién le iba a decir a los de La 1 que iba a hacer más de un 30% de audiencia sin recurrir a finales deportivas y cosas así! 

Un programa es un éxito total si termina haciendo que su competencia (pongamos por ejemplo Telecinco) hable de sus concursantes. También es un éxito cuando la radio pone las canciones del programa en su fórmula. Por ejemplo, Cadena 100, MegaStar, Los 40, RAC1, Cadena Dial... En los tiempos antiguos, la radio era una especie de complemento plataforma alternativa satélite de este programa. En Cadena 100 de hecho tuvieron su propio programa. También es un éxito cuando hablan de la final del programa hasta en la tertulia de Alsina, o cuando los críticos de tele en la radio hablan básicamente de este programa cada martes. En tiempos, me acuerdo de que Joaquín Guzmán, de «La Gramola» de M80, criticaba un poquitín al programa... Y terminó narrando la participación de Soraya Arnelas (la de «OT 4») en Eurovisión años más tarde. 

Suele suceder que la radio comercial se vuelca con este tipo de programas (porque son una fábrica de dinero para los promotores y una fábrica de oyentes para las radios que hablan del programa) y que la radio más alternativa tiene más reticencias. Y lo mismo podemos decir de los artistas. Hay incluso cantantes salidos de programas de cantar que luego sin ningún complejo critican este tipo de programas. Ver para creer. 

El otro día, desde la propia Radio 3 (o sea, desde la radio de RTVE), Santi Alcanda se puso a criticar al programa. Inquietante cuando habló de la decepción que estaba teniendo con TVE con el programa. Que si era una falta de respeto... «Aparte lo que debe de haber detrás, que algún día se sabrá. [...] No voy a comentar más, para no perder el empleo.» De este radiochip me informó C., que estaba escuchando en directo, y lo puedes escuchar pinchando en el radiochip otero: 


Cuando aparece un monstruo como «OT» siempre aparecen detractores. Es matemático. Pero me parece que le damos demasiada trascendencia a esto. Y además demuestra que tenemos poca memoria. Programas de talentos musicales ha habido en la tele de toda la vida. ¡Toda la vida! Que si «El Salero», «Gente Joven»... ¡«Pasaporte a Dublín»! Que no era "talent" pero era un escaparate musical televisivo. Que a ver... que no es que sea yo de aquella época, pero la propia TVE ha repetido mil veces trozos (o sea, cachitos) de esos programas. Bueno... y el programa aquel de Bertín, y «La Voz»... Lo divertido es que sólo se critica a este tipo de programas cuando tienen mucho éxito. Dentro de ti hay una estrella. Si lo deseas, brillará. 

Pero... No olvidemos... Que resulta que aunque ahora la tele sea la que emite concursos musicales con los que dieciochoañeros saltan a la fama jovencísimos, la radio tuvo lo suyo. Antes estos programas iban por la radio. En concursos musicales de la radio nacieron Los Pecos, Raphael (que curiosamente estuvo en la final de «OT 9» de visita, y encima su hijo era jurado del programa), Ana Belén (o sea, Mª Pili Cuesta), un tal Mike Ríos que se presentó a un programa llamado «Cenicienta 60», de Radio Granada, y una tal Rocío Dúrcal. Nada... Cantantes sin importancia de este país. Todos fueron a la radio o a la tele para tener su pase a la fama. Meterse con «Operación Triunfo» es como gritar a los cuatro vientos que no se tiene memoria. La radio estuvo plagada de concursos musicales. ¡Pero si no había emisora local que no se jactara de tener un gran programa de maquetas! 

Los concursos musicales son, como los culebrones o algún otro género, tipos de programas que estuvieron en la radio de prestado. De hecho, el festival de Benidorm no era más que un concurso musical de la radio (concretamente, de la REM). Y oye... Julio Iglesias es un cantante que pasa por ahí, fíjate.

Este tipo de formatos han terminado en la tele, y la radio se ha apartado un poco de todo esto. La tele es más efectiva para este tipo de contenidos. Pero todos los fenómenos sociales terminan pasando por la radio. Por eso la radio sigue siendo lo que es... Porque sigue hablando de lo que la gente habla. 

lunes, 12 de febrero de 2018

la cadena perpetua

Es un debate actual... otra vez. En realidad, ahora el debate versa sobre la «prisión permanente revisable». Es el eufemismo para la cadena perpetua opcional, según los casos. Hace 20 años, después de algunos casos de terrorismo, se puso de nuevo este tema a debate. 

Así que he traído un debate de 1997. Os va a sorprender. Primero, porque es un debate apasionado entre sólo dos personas. Segundo, porque esas dos personas están dando sus opiniones de manera clara, clarísima, y sin medias tintas y sin ser políticamente correctas y no hablando de manera jeroglífica. Tercero, porque se escucha gente de fondo que está viendo el programa. 

El programa es «La Ventana» de la SER, que presentaba Javier Sardá. Los que debatían cada semana eran el Padre Apeles y Eduard Delgado. No os esperéis nada excesivamente histriónico ni loco. Las dos posiciones que vais a escuchar en el radiochip son casi canónicas de lo que se esperaría de estas dos personas en 1997. 

Escuchad este radiochip de la cadena perpetua: 


Ehm... A día de hoy, en pleno 2018, esto no sería así. Dos únicas personas que en debate semanal charlan sin gritos, pero sin parar de hablar ni un segundo, en tensión total durante media hora, haciendo un toma y daca en donde el moderador abre temas, hace chiste, deja hablar y no es un mero espectador. Además, la gente de fondo hace que notemos las reacciones de la audiencia, sin necesidad de Twitter, ni nada. ¡La verdadera reacción de la gente en tiempo real! Algo tan antiguo y tan sencillo como llevar gente... Algo tan sencillo como tener público. 

¡Y qué final! Al final, agradece a Apeles, y a Delgado también. Al final, en ese ambiente, es cuando Sardá espetaba: «¡Que somos rojillos!» Y la risa general. Porque a ver... así era. La posición de Apeles en la SER estaba claro que era la difícil, pero aún así, nadie nos quitaba el placer de escuchar este debate tan veloz. No aburría ni un segundo. Esto era «La Ventana» hace 21 años. 

domingo, 11 de febrero de 2018

García y De la Morena

Hoy es el día en que en el «Salvados» harán la comentada reunión entre García y De la Morena, si es que eso ha sido posible. Ya hace tiempo que todos sabemos que ya no son enemigos como antes. En 2014 nos enteramos de que se habían ido ya a comer juntos y todo. ¡Qué timo! Tantos años de enemistad, y luego, de tapadillo, se habían reconciliado. 

No es la primera vez que se ha intentado reunir a la pareja, pero el otro día, en la radio, Évole le pedía a De la Morena que tuviera a bien reunirse delante de las cámaras. La imagen radiofónica más esperada. Lo escuchamos el hace unos cuantos días en su programa. Radiochip de la gran reunión: 



Es genial la anécdota que cuenta el Follonero sobre aquella tarde en que entre tanto seguidor de De la Morena había uno que no... Salvador Sostres. Y la reacción de José Ramón... casi esperable. Évole hablaba de esa sensación de ser un equipo, de hacer zapping por la noche para ver qué decía el otro...

Durante muchos años, los oyentes de uno u otro éramos como de dos equipos de fútbol distintos. Dos equipos que no se podían ni ver. Quien era de De la Morena (yo entre ellos) no podía ver a García, y quien era de García, no podía con De la Morena. No sólo hablaban de los partidos de fútbol: Cada noche era un partido de fútbol, con sus fueras de juego, sus faltas, sus tarjetas amarillas... Con todo. Dos estilos de radio enfrentados, dos maneras de hacer periodismo, dos equipos que competían por hacerse con el liderazgo de la noche, y no siempre con las mejores artes.

Molaría que ambos (juntos o no) hablaran de todas esas cosas que dijeron y que nunca nos han contado. Porque... Vale, ellos han tirado pelillos a la mar, pero los oyentes de toda la vida, aunque solo sea por curiosidad malsana, queremos saber cosas. Durante muchas noches, todo el mundo se agolpaba para ver el programa cuando viajaba, se han cantado sintonías, se ha idolatrado a esa voz que noche tras noche era lo último que escuchabas justo antes de dormir...

No sé si lo he comentado alguna vez, pero me acuerdo que de chavalín, un día, al pillar el autobús, dije que por la noche oía a De la Morena. Un chaval dijo que también, y una amiga se puso casi enfadada diciendo algo así como: «¡Qué pasa! ¿Todos los chicos escucháis lo mismo?» Así era. La chavalería elegía a De la Morena. De ahí que De la Morena aún tire de eso del «vosotros que sois jóvenes» antes de contar batallitas. 

Las noches ya no son lo que fueron. Y ojo... En esto de las guerras nocturnas no sólo han estado García y De la Morena. Han intentado guerras (o las han batallado) Javier Ares, Abellán, Ángel Rodríguez... Me dejo nombres, seguro. Ahora la radio nocturna en cuanto a deportes tiene mucha menos audiencia. Decir que es porque ya no hay gente que pelea sería equivocarnos... Esta tendencia decreciente lleva años y años produciéndose de manera sostenida, y tendrá que ver con muchas otras cuestiones: Que ya no hay presidentes locos cada noche hablando mal de jugadores, ya no hay jugadores que concedan entrevistas que digan cosas, que ahora ya no hay tanta tensión informativa, ya que es muy difícil aguantar un invitado o arrebatárselo a nadie, están todas las teles todo el rato con los temas, no termina la jornada a la vez, bla, bla, bla, bla... Antiguamente te esperabas al final del programa para ver cuánto te tocaba en la quiniela cuando hacías una de 11, y ahora lo miras en internet. 

Y sobre todo, antes los programas de García y el de De la Morena eran como el «Sálvame» de los deportes, en el sentido de que las noticias del deporte ocurrían en el propio programa. Actualmente, los programas deportivos son más bien el «Qué Me Dices» de los deportes: programas en los que analizan en clave de humor cosas (imágenes, sonidos) que han ocurrido. Sólo espero que no terminen siendo el «Corazón, Corazón». 

De momento, esta noche no disfrutamos de un «Sálvame» sino de un «Salvados». No hay que perdérselo. ¿Qué vamos a comentar si no mañana? Y gracias a Dani por pasarme esa foto, que es un documentazo. 

sábado, 10 de febrero de 2018

a través de los Ondas (38): 1992

A ver... la SER en esta época estaba en horas bajas. No eran líderes de audiencia, estaban los de Antena 3 en todo lo alto, dándole duro al PSOE, justo había sido el año en que la SER se hizo con la emisora de Godó... Bueno... Un rollo patatero. 

1992 fue un año crucial en la radio. Quizá el más importante de la radio moderna. De 1991 a 1994 se conforma la radio contemporánea en España, y fue en 1992 la cúspide del «cocerse todo». ¿En qué se traduce todo esto? En unos premios Ondas más que raquíticos en donde no hay premiados ni de la SER ni de Antena 3 Radio. Ni de la COPE, que era la que se iba a llevar el «botín de estrellas». 

Unos Ondas en los que se premió un programa cultural, «El Ojo Crítico», que... Se sigue emitiendo y han recuperado su sintonía histórica. Otro Ondas fue para «Protagonistas», pero se centraron en lo que hacía Del Olmo de la lucha contra la droga. Incluso en 2017 estuvo Del Olmo hablando precisamente en Onda Cero de esto, y explicando que lo de Proyecto Hombre era de las cosas mejores que le había dado la radio. Radiochip del Ondas antidroga: 



Y después un ondas para Gozalo, que es alguien a que toda persona noventera ha escuchado horas y horas por absoluta necesidad. Y hablando de deporte... Se llevó un Ondas (bueno, una mención) la RTO, la "radio televisión olímpica" que era como un ente aparte que daba servicio para retransmitir los Juegos Olímpicos de Barcelona.

¿Algo más? Nada. Los Ondas de 1992... Da la sensación de que estos Ondas hablan más por su silencio que por los premios en sí. 

viernes, 9 de febrero de 2018

lo que dijo Arús

Ya han pasado algunos días del 25º aniversario de M80. Y ahora que ya casi hemos olvidado ese día, me apetece recuperar un momento de radio que me pareció especialmente interesante por varios motivos: embarazoso, simpático, evocador, y explicativo. 

En el «Wake Up», que es el actual programa de las mañanas de M80, estuvieron entrevistando a gente que estuvo en ese mismo horario en el pasado. Estuvo Guillermo Fesser... y Alfonso Arús. En realidad Arús estuvo también en Radio Minuto, que es formalmente «la mitad constituyente» de M80.


Me gustó este ratito que estuvieron con Arús. No sólo por el mero hecho de escuchar a Arús (que eso siempre es genial), y comprobar el ritmo que sigue teniendo cuando habla, su rapidez... Bla, bla, bla... Peloteos aparte, vamos a lo interesante. Jorge Sánchez, el presentador que muchos le conoceréis por haber estado en Los 40, e Inés Vila, le preguntaban primero por eso de que no madrugaba demasiado... Porque eso de empezar ahora a las 6 h. es un postureo. En realidad, como todos sabéis, el grueso de la audiencia empieza a levantar a las 7 h. 

Después, hablaron de la libertad que tenían para hacer el programa. Bromeaban con eso de que si hubiera intentado hacer el mismo programa ahora hubiera sido un «Arús con Leche sin Lactosa». Arús hablaba de la injerencia para diseñar estos programas. Arús decía que era cutre o sui generis... Cuando en realidad, como decía Jorge, querría decir libre. 

Arús habló de cómo innovaron muchísimo: sonidos, músicas movidas de fondo (esto no lo dijo él, pero lo añado yo), sacar cortes de la tele... Y lo más sonrojante (no para el programa en sí, sino para buena parte de la radio musical en general) fue cuando Jorge le preguntó por un consejo. Arús le dijo que mejor que no, porque seguro que le daría los consejos contrarios a los de sus jefes. Dijo que quizá a esas horas lo más conveniente quizá fuera tener una alternativa a las convencionales, y que para poner música ya estaba el resto del día. Vaya... qué poco moderno que es Arús. [Guiño, guiño, codazo, codazo, otro guiño, lengua fuera, y otro codazo y pisotón debajo de la mesa.]

Esto viene a cuento, porque vino Arús a ensalzar eso de los programas casi diríamos «de autor» que siempre ha tenido M80: Gomaespuma, Pablo Motos... Luego empezó a añadir nombres (¡ay, que se metía en un jardín!) pero fue un momento en el que vino a evidenciar lo que muchos pensamos: Que llegó un momento en que dejaron de hacer productos distintos y pasaron a hacer formatos en plan extranjeros y sin chicha. Obviamente, los programas de Arús, Gomaespuma o Pablo Motos eran una cosa, y los que vinieron después... otra. Incluso lo de Ponseti, que por mucha sección y palabra que tuviera, no dejaba de ser un producto precocinado. 

Podéis escuchar la entrevista en este radiochip güéicap: 



Celebrar los 25 años de M80, tal y como están, en horas bajas, era una misión casi imposible. Por un lado, quedaría muy triste y descafeinado no hacer nada por esta fecha. Hubiera sido para llorar casi.  Y para matar. Por otro lado, celebrar el aniversario recordando grandes momentos de la cadena no dejaba de ser un melancólico viaje al pasado en el que nos recordasen cada pocos minutos que la cadena brilló por las mañanas con muchos programas, que la gente añora a Ángel Álvarez, que por las noches sonaba una monedita y que cuando hacían el programa fuera petaban los auditorios de universitarios, que tenían locutores musicales de renombre, programas alternativos... 

Sí, irremediablemente, mirar al pasado de M80 es como cuando un señor que ha sufrido mucho y acaba de salir de una operación mira una foto de cuando era guapo y lozano. M80 es la emisora más moldeable, maleable, potencialmente atractiva y con mejor imagen de marca para volver a hacer algo chulo con ella. Es una pena total que una radio que era una joya (y que potencialmente lo sigue siendo) esté como está. Me encantaría que me hicieran volver a ser oyente habitual.