Desde hace tiempo que tenía pensado hablar de los podcast de las radios... que cuál iba mejor, que tal, que cuál... y no es el momento. Pero sí tenía ganas de hablar de la revolución radiofónica que supone el que te puedas bajar un programa o volvértelo a escuchar... Bueno, a mí me viene perfecto. Es más, alguna vez, por ejemplo, antes de dormir me escucho un gabinete de Julia (como así eran hace 20 años) cuando, por ejemplo, a la hora del gabinete no puedo poner la radio.
Sí, lo del podcast es flipante. Pedazo de avance. Cuando alguien te dice por la mañana "joder, lo que ha dicho el Herrera..." o "joder, lo que ha dicho Federico...", rápidamente puedes ver si eso que cuentan es verdad escuchando el podcast. ¿No es genial?
Así que voy a poner un radiochip que es muy curioso, y bastante molón. Bueno, dos. Cuando está el podcast, puedes recopilar cosas que antes sólo se podían hacer poniendo dos casettes grabando en dos emisoras al mismo tiempo. Me voy explicando...
El otro día se dieron los Ondas. Uno de los premiados ha sido, como todos sabéis, Juan Ramón Lucas, que empezó en la SER y ahora está en RNE (no sabemos por cuánto tiempo). Y, como siempre, en la hora que va después de dar los Ondas, Gemma Nierga e invitados conectan con los premiados. ¿Qué ocurre? Pues que nada más saberse la noticia, Toni Garrido (curiosamente, otro ex-SER) estaba llamando en directo a Lucas felicitando por el premio. Así que se dio la casualidad de que Lucas, premio a su carrera radiofónica tanto en la SER como en RNE, estuvo interviniendo en ambas emisoras... ¡a la vez! Y gracias al podcast, podemos hacer el juego de escuchar qué se oyó en una emisora y en la otra. ¿Lo escuchamos? Pues radiochip tónico y radiochip gemmo:
Bueno, el de Gemma es realmente toda la primera hora del otro día... que al final la he dejado entera, por si os queréis entretener más. ¿Veis? El podcast, además de permitirnos escuchar aquello que no escuchamos, permite que si ocurren cosas como éstas, podamos "escuchar al mismo tiempo" cuando dos emisoras coinciden, que es en ocasiones contadas, y de ahí que este momento de radio sea tan curioso.
Qué moderno, eso del podcast.
El placer del podcast es cuando no hay los anuncios y la musica (cuando es programa en cual se habla). Yo me levanto tarde porque no trabajo por el momento y a las 11 escucho las rubricas que me interesan del programa matinal de Virgin Radio y después un programa de Europe 1 que habla de la TV y de la radio y por la noche me duermo con el programa de humor de la tarde de Europe 1 (2:30 que se convierten en 90 minutos de programa !!!) !
ResponderEliminarEs tanta la revolución que incluso hay empresas dedicadas si no a la edición de estos, almenos cuentan con personal que se dedica a ello dividiendo en secciones horas del programa.
ResponderEliminarlo descubrí en Catalunya Ràdio cuando entrevistaron a un chico con discapacidad visual y que trabaja en una de estas.
Por otro lado, los anunciantes sólo han expresado intenciones pero con la descarga de los podcasts creen tener una vía más para colocar sus productos.
En general internet está siendo una vía donde aún queda mucho por explorar: podcasts o programas en exclusiva a través de la red son muchos ejemplos. De este último tema me gustaría conocer tu opinión en otra entrada.
Hace tiempo que he descubierto la programación de Caracol Radio y efectivamente, es un placer escucharlo a las 8 mientras vas en bus.
Yo vivo en el extranjero, para mi los podcast son la mejor manera de seguir la radio. Son muy cómodos, puedes oirlos en el avión, en el metro, en el tren, en el gimnasio...
ResponderEliminarHay otros podcast muy interesantes que son los hechos por aficionados.