lunes, 30 de mayo de 2011

el vate

Es inútil preguntar a los del programa de Julia Otero por si tienen alguna grabación antigua. Yo una vez lo intenté, pero la respuesta que me dieron fue la misma que han dado siempre a todo el que preguntaba en antena; seca y contundente: "no tenemos absolutamente ninguna grabación del programa".

Triste, ¿eh? Yo alguna guardo, en plan "gran reserva", aunque sabéis que cualquier audio es bien recibido. Pues total, que me contaba el otro día una amiga que en el programa de Julia (en la época antigua) había un hombre que "hacía como poesía". Rápidamente le dije: "hombre, sí, el vate". A lo que me respondió: "pero ¿se llamaba así?" Y le contesté que no, que "vate" era el apodo, y que debía significar algo tipo "poeta". He mirado en los internetes, y por lo visto tiene dos significados: el primero, adivino; el segundo, poeta. Y, si nos referimos al programa de Julia Otero, "el vate" es Alfonso Levy.

Poco conozco de Levy -amén de que es poeta y filólogo, y andará a eso, a sus poesías-, pero leyendo esta entrevista, te puedes hacer un poco la idea de su pensar. Pero lo que interesa hoy es que escuches su voz y cómo eran aquellas intervenciones...

Levy intervenía con algunos otros (¡qué elenco! Lourdes Lancho, Pablo Motos, Rafael Martínez-Simancas, José Oleza, y otros...) en una cosa que con el tiempo se ha visto que es irrepetible: "la tremolina". Espero poder subir algún trozo de "tremolina", aunque si tenéis alguno alguna entera grabada, ya sabéis... mandarla como sea. No es cuestión de hablar en profunidad de esa hora de oro, pero la cuestión es que la presencia de Levy a veces era divertida, ingenua, sacante de quicio, adecuada, o inadecuada, sorprendente, y en ocasiones, calmante. Os lo juro, había días que "el vate" intervenía en mitad del monólogo de Pablo Motos, y se notaba a veces que Pablo incluso necesitaba que se callase Levy para poder seguir su discurso, y hasta se le notaba sacado de quicio. A veces, no sé si por lo que decía o por cómo hablaba, parecía que metía incomodidad... pero es que a veces lo que decía, o sus palabras, te aislaban del mundo en plan "joder, lo que está diciendo este tío..." y te dabas cuenta de que de reír habías pasado en cuestión de segundos a dejar la mirada perdida cual pez, pensando en lo que decía.

En esta nueva etapa de Julia, del vate nada se supo... así que para que pudiérais escuchar su voz y cómo era su tono, he tenido que recurrir al "plan B": pillar una grabación de otro programa donde hubiera intervenido como colaborador. Y ya no he oído hacer mucha más radio... El programa es el que tenía Jordi González en RAC1 a principio de década: "Diagonal". Tenía una especie de debates al estilo gabinete juliaoteril, en donde hablaban de los temas más variopintos. En este caso el tema, obviamente, tenía que estar relacionado con el romanticismo. He aquí el radiochip diagonal, en el que intervienen, además de Alfonso Levy, el Padre Apeles y Valérie Tasso.


Pues hala, un radiochip medio pastelón.

8 comentarios:

  1. Muchas gracias! hacia tiempo que me preguntaba como se llamaba EL VATE!!! :D

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  2. Qué bueno era el antiguo programa de Julia Otero. Como lo echo de menos...

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  3. Recuerdo cuando el vate dijo: Las mejores cualidades que tenemos las perdemos si no se las entregamos a alguien.

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  4. Yo tengo cintas de casset con fragmentos de "la Tremolina", con algunas de esas perlas poéticas que nos regalaba Alfonso Levy cuando se abría el programa. Hacía tiempo que no me acordaba de ello, pero significó mucho para mí en aquel tiempo, así que buscaré las cintas (cuando vuelva a la casa de mi niñez, ya no vivo ahí) e intentaré recuperar algunas de esas frases. ¡Gracias!

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  5. David Gallego Llevo años pidiendole a Padman que cuelgue una tremolina entera y se hace derrogar. Pasale tus cintas.

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    1. LO SÉ. Mea culpa.

      Entera no tengo, pero tengo algún trozo. Creía que podía colgar alguna entera... `pero no (aún).

      Que conste que no me olvido.

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  6. Ayer conocí al "El Vate" en persona. Estaba en el barrio Gótico de Barcelona y le pregunté a un señor si conocía la calle palma de Sant Just. Empezó a hablar y su voz me resultó tan familiar y agradable que tuve que preguntarle.
    Lejos de decir desde un primer momento quién era, se mostró muy humilde y cercano, y me reconoció que no tenía ni móvil ni correo electrónico. Después de insistir me contó que había sido colaborador de Julia Otero. Era el!! Qué fuerte

    Estuvimos hablando de libros, medicina y curiosidades en la calle durante un rato maravilloso, durante el cual el ruido de la cuidad fue silenciado por su melódica voz.
    Se despidió con una frase de María Zambrano que se me quedó grabada:
    "El azar no es más que un exceso de sentido".
    Fue un encuentro increíble, precioso.

    Me encantaría volver a escuchar la tremolina, si alguien la puede difundir.
    Besos

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