Leo que Cuatro ha sacado una especia de enciclopedia para chavales llamada "La Hormigopedia". La cuestión, como siempre, sacar el máximo rendimiento posible de Trancas y Barrancas, que han sido un éxito, y que como cuenta muchas veces Pablo Motos, han sido tras los videojuegos lo más regalado las navidades pasadas.
Pero Trancas y Barrancas, además, no iban a ser tales. De hecho, aunque estuvieron mucho tiempo investigando en cómo hacerles los muñecos, las personalidades de ambos, etcétera, en un principio no iba a haber hormigas en el plató del hormiguero. Al final el nombre del programa forzó que fueran hormigas, pero muy al final.
¿Por qué se llama "El Hormiguero"? Porque la hormiga era la mascota del programa "No Somos Nadie" en M80. No somos nadie, todos somos nada más que hormiguitas ante el poder, totalmente insignificantes. Ésa era la filosofía. Trancas y Barrancas son Juan y Damián, o Ajenjo y Cigarro. Y, como siempre, el tópico, "eran mejores en la radio que en la tele". No quiero decir que en la tele sean malos (de hecho son lo mejor del programa, para mi gusto) sino que en la radio eran lo más de lo más.
Si eran buenos, que procuraba despertarme justo después de las noticias de la primera hora de programa, porque era el momento de escuchar las "posturas sexuales realmente innovadoras". Empezaron siendo fieles a "posturas sexuales", pero fue derivando en reales chorradas que eran, casi diría yo, de las cosas más imaginativas del programa. Es difícil decir que era lo más, porque había muchas secciones que estaban a la altura. En este radiochip sexual, una sección mini de posturas sexuales. De hacer las posturas sexuales a la hormigopedia... Por cierto, lo mejor era la sección del kiosko, que como la han mantenido finalmente en la tele, poco más hay que decir. Pero yo creo que un día rescataré algún comentario de "Hablemos de Loros"...
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