vivencias radiofónicas (3): el día del agua (en "La Ventana")

Resulta que ayer se celebraba el día del agua, y yo y un amigo (el orden de los factores...) fuimos a ver "La Ventana", que se hacía en la planta 25 de la torre Agbar de Barcelona (que, por cierto, es el tercer edificio más grande de toda la ciudad). Ir no fue precisamente fácil... había que mandar un email, luego te confirmaban, tenías que dar tus datos, luego había que ir por la entrada enseñando el DNI... todo en plan "top security". No sé si íbamos a la torre Agbar o a un departamento de la CIA. De hecho, cuando entramos eso parecía más un aeropuerto que otra cosa. Cinturón fuera, moneditas fuera... y en su recipiente de plástico. Hombre, volar no, pero alto íbamos.

Nada más entrar estaba ahí Juan Carlos Ortega. Pero como me daba un corte tremendo hablar con él, pues nada, a seguir esperando. Luego pude hablar con él antes de que empezara el programa. Vuelvo al comienzo... En eso que entre Gemma con todo el equipo. Y luego, cuando habían entrado todos, pues ahí íbamos los pocos oyentes (unos... ¿30 ó 40?) que conseguimos entrada. Al subir, tuvimos la suerte de ponernos en primerísima fila. Tremendo. La verdad, muy guay... luz natural a tope... y el mini-estudio que habían montado para la ocasión ahí. ¿Sabéis qué? El suelo no es que tiemble... pero la verdad es que estuvimos todo el rato sintiendo bajo nosotros un leve hormigueo. Andando no te enteras... pero respanchingado durante 3 horas puedes dar cuenta de eso claramente. Lo comentamos.

Las tres primeras filas de la parte derecha estaban reservadas para los de Agbar. Todos con traje y corbata, todas vestidas con gran pijerío. Y, cuando comenzaba el programa, pasando. Todos los oyentes atentos, y los "agbarianos" pasando que no veáis. De hecho, Juan Carlos Ortega comenzó el programa ironizando sobre su presencia allí y su poca atención al programa... y ellos ni se enteraron. A su bola. Esto se puede escuchar al comienzo del programa... en el radiochip finestrero, primera parte:

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Antes de empezar, como la cosa iba de fútbol que ayer hubo liga, pues tridente con Jordi Martí y Carmen Colino, que estaba en Madrid. Gemma preguntaba antes de empezar el programa si alguien era del Madrid... y sí, alguno había. Gemma dijo que vio el partido, por cierto. Como es del Barça... Y nada, un invitado "pepero" en el programa (no por ser del PP, sino por estar en el programa de Pepa de RNE) como es Màrius Serra. A lo que iba del espacio de "El Tridente"...

Creo que "El Tridente" (la tertulia futbolística del programa) refleja perfectísimamente la evolución del fútbol español a través de los años. ¿Sabéis por qué? ¿Os lo imagináis? Me guardo esta idea para otro día, que lleva mucho curro desarrollarla... Por cierto, en la imagen, veis a la izquierda a Jordi Martí, luego Màrius, Gemma y Juan Carlos.

Tras tridentes y personajes de Ortega (reales personajes falsos en este caso, y no verdaderos aunque parezcan falsos), pues... nada, el tiempo de Florenci Rey, con dos invitados que son referencias meteorológicas. Y nada, preguntas del tiempo de siempre. Lo de toda la vida. Y esto lo digo al 50% entre "el clásico que nos gusta de siempre y que no puede faltar" y otro 50% como "se han acomodado un poco también" diría yo... Por cierto, y yendo al radiochip, me moló mucho la anécdota que explicaba Alfred Rodríguez Picó sobre su voz y Radio España.

Bueno, entretanto, en las pausas, Gemma se nos acerca un poco a todos para ver si nos está gustando el programa y todo eso. No se enrollaba mucho, pero majeta. Nada comparado con el nerviosismo que pasé yo que no era ni mayor de edad y fui a pedirle un autógrafo cuando vinieron a Zaragoza... claro, he crecido y ya no me impresiona lo mismo. Qué triste... ¿no? Y claro, también es sorprendente escuchar, entre el rumor de las pausas, la voz de Pedro Blanco dando los boletines... Por cierto, que también me hizo gracia poner cara a esa gente que llevo escuchando desde hace años y algunas que sólo conocía de su existencia... Pero esto, con el final de lo que ocurrió en el programa, para mañana, que por hoy está quedando muy largo.