el orden mundial

A ver... Antes de irme de vacaciones escribí una entrada para el año que viene, para el día de Eurovisión. Pero la tengo que adelantar a hoy, y veréis por qué. 

Estos días hemos conocido algunas novedades para la temporada que viene: Que Jair Domínguez (de RAC1), Buenafuente y Gemma Nierga colaborarán en «El Suplement» de Catalunya Ràdio; que «el fiera» Jorge Sánchez será el que despierte al personal en M80 con «Wake Up», y que las de «Maldita Hemeroteca» —entre otros— estarán en el programa de Julia. Sin embargo, lo que me ha parecido más noticioso de todo esto es la incorporación a su programa de los de «El Orden Mundial». Esto es lo que menos habréis leído en la prensa, pero creo que es lo más relevante. 

La entrada que había escrito para el 12 de mayo del año que viene —previsión parda— servía para decir a los de la radio: «Eh, que hay gente que puede hacer algo guay en algún lado». Pero mira... les ha fichado Julia. Os pongo la entrada que iba a poner para dentro de meses y meses... tal y como estaba escrita, sin tocar una coma. Así que... allá va.

«es todo política»

Eso hemos escuchado mil veces del festival de Eurovisión. Y es cierto.

Es todo política. Bueno... casi todo. También hay música, obviamente, pero claro que se puede ver desde el punto de vista político. Su fundación tiene una vocación política, su continuación propagandística tiene una clara intención política, y los cantantes que llevan muchas veces tienen un trasfondo político. ¿Y qué decir de las votaciones? Pues también. 

Pero a pesar de todo esto, es un festival de la canción. Los países hacen política, los países muestran lo que quieren mostrar... Pero la gente vota canciones y ganan canciones. Sin el factor musical (que es determinante) no se puede jugar a la política. 

Somos muchísimos los que seguimos a "El Orden Mundial": hacen una página de internet, una cuenta de Twitter... y por supuesto, un programa de radio. Son gente muy joven (veinteañeros) que intentan explicar la política mundial (y todos sus factores y derivadas) de una forma sencilla, clara, con una vocación de objetividad, y sobre todo de frikismo. Porque lo más importante de esta cuenta es su profundo frikismo. El frikismo en este caso significa «especialización y entusiasmo en el objeto de estudio».

A través de «El Orden Mundial» uno se entera de mogollón de cosas. Y sí, quizá también está dirigido a un público pelín friki... Pero es que somos muchos. Y en Radio Internacional les dieron un hueco semanal para hacer radio. Una pena que estén desaprovechados en un sitio con tan poca repercusión.

Desde el punto de vista radiofónico (formal) no son nada del otro mundo, incluso casi son demasiado simples. No llevan un ritmo tremendo, no tienen voces de radio, no juegan con los cortes ni con las músicas como podrían hacerlo para que les quedara más lucido... No son "muy radiofónicos" (aún, hay que darles tiempo). Pero el contenido es buenísimo, y la factura no es mala. Estaría bien que estuvieran en algún sitio en donde les dijeran cómo hacerlo todo más atractivo. 

Uno de los programas trató de la política a través de Eurovisión, de cómo servía para publicitar el bienestar europeo frente al bloque comunista, de cómo los israelíes han querido hacer un "pink washing" de su imagen... Y también tratan del "lololó", aquella canción que todos conocemos y que pertenecía a la Eurovisión en su versión comunista. Todo esto lo escucharéis en este radiochip EOM:

No estaría mal que alguna cadena grande pillara el espíritu friki y con vocación completamente divulgativa de los de "El Orden Mundial" para hacer algo en algún programa. No sólo no estaría mal, sino que no sé a qué narices esperan.