...con Alsina

Así anuncian a Carlos Alsina. Como "ey, tío, el Alsina". La verdad es que como radiofonista (qué ganas tenía de usar esta palabra) es bueno. Tiene un punto irónico, es divertido, incisivo... tan incisivo... tan tan tan incisivo... que llega incluso (a veces) a la chulería.

Si me dijeran que definiese a este hombre con tres palabras diría: periodista, chulo y directo. O sea, lo tiene todo para el éxito. Además se nota muchísimo que le gusta la radio. Y por lo tanto no es extraño que "La Brújula", ha pasado de ser un programa menor (menos de 300.000 oyentes) a tener más de medio millón.

Tras su paso por al ABC y Cambio 16 (o sea, no viene del sector progre precisamente) se incorporó a Onda Cero, la que podríamos llamar "su casa". Ahí se puso, bastante joven, a presentar el informativo "Al día", antes de que empezara Del Olmo. Y en 1993 ¡toma! pedazo de ascenso profesional: subdirector de "Hora Cero" en Antena 3. Luego colaboró en Radio Voz y fue de los primeros que colaboró en fundar Intereconomía. Como se puede observar, sigue sin tener un pasado megaprogre que digamos... Sin embargo, este hombre no es precisamente conservador en su estilo de hacer radio, incluso es partidario de eliminar los boletines horarios...

Y volvió a "su casa". Lo hizo en época Telefónica, en la época final del aznarismo, para presentar el informativo de mediodía. Creo recordar (y de esto no estoy totalmente seguro) que superaba a la COPE en su época... Además, era director de informativos. Un currante. De hecho, hubo cambio de cromos en la emisora y le encomendaron hacerse cargo de "La Brújula". Y no sólo eso al volver Julia Otero a la radio, comenzaba su programa con casi media hora de "charla" con Alsina. Así que el hombre debía echar más horas que un reloj.

Mucho se debía saber de la valía de este hombre, y en marzo de 2008 los de Punto Radio (la mayoría exondaceros) lo intentan fichar medio "de extrangis". Y de repente cundió el pánico en Onda Cero. Contraoferta millonaria justo al día siguiente y se queda "en casa". A puntito (nunca mejor dicho) de irse a la competencia, ahora tiene uno de los mejores contratos de la emisora... (una pasta gansa).

Y de vuelta a su casa, cuando intervenía en el programa de Julia, ella tiraba más a la izquierda, Alsina... no. Y estaba eso muy bien, porque esto llevaba a la pareja a tener grandes diálogos e intercambios amistosos (a veces muy amistosos) de informaciones y opiniones. Pero yo creo que había veces que se contenían mucho... Julia ha sido la estrella de las tardes y Alsina tiene un ego grande. Y un día, la tensión explota, como se puede escuchar en este tenso radiochip. ¡Qué tensión!

Y esta temporada ya no está con Julia: han dicho que "Alsina tenía demasiado trabajo" y que merecía comer mejor... Yo creo que pacíficamente han pensado "bueno, ha sido mucho tiempo y no necesitamos trabajar más de la cuenta ni enfadarnos más". Y cada uno a lo suyo, tan amigos.

Este año Alsina ha sido el encargado de presentar la programación de la cadena. No lo hizo nada nada mal, pero va tan de chulo que se podría cortar un pelín... Seguramente crecerá en audiencia este año de nuevo, aprovechando que César Vidal no está (en primera línea), me juego dinero a que supera los seiscientos mil. Será muy interesante ver qué pasa.