mayo del 68

Estuve valorando hacer una entrada sobre la radio y mayo de 1968. Pero... a ver... que la gente normal en aquel año estaba básicamente a su vida normal y corriente. Para cualquier español, mayo de 1968 se pareció mucho a julio de 1969 o abril de 1966. No nos flipemos. Y no era fácil encontrar nada de mayo de 1968... 

Por el blog han pasado algunas cosas sobre 1968: El consumo de radio de lunes a viernes y fines de semana. ¿Era muy distinto el consumo de radio hace 50 años? Sí. El consumo de radio no se concentraba tanto en las mañanas y las noches, sino que sus máximos estaban a mitad de mañana y a mitad de tarde. El consumo a lo largo del día era mucho más homogéneo. Ser estrella de la mañana no tenía mucho que envidiarle a ser estrella de tarde. 

Y también los Ondas de 1968... Joaquín Prat, Mario Beut, Encarna Sánchez (antes de su periplo, sí, cuando estuvo en Radio España)... Y unos cuantos más. 20 Ondas de radio se dieron. Pero... ¿El radiochip de hoy qué es?

Ayer moló mucho el tramo de «Hoy por Hoy» de Toni Garrido. Se disfrazaron (mentalmente) de locutores de 1968, y jugaron a trasladarse a hace 50 años para recrear algunos acontecimientos y alguna actualidad de aquel mayo de 1968. Se trasladaron a París imaginariamente, donde José Luis Sastre (su versión de 1968, don José Luis) hacía una crónica desde París. Conectaron con un recreado Gorka Landáburu, entrevistaron a Micky... De lo que no hablaron, curiosamente, es que en aquel 1968 se llevó un Ondas de radio el propio Micky, por un programa llamado «Windy Club»... 

¿Veis la programación de ayer... pero de Radio Barcelona, de la SER, en 1968? Rezo del rosario, ¿simpatía y odio antiguo?, consultorios de mujeres... Y a las 23 h., el «Windy Club» que os decía. ¡Que quede constancia! Tal día como ayer, pero hace 50 años, Micky tenía programa nocturno, antes de la consulta del doctor. ¡A que mola!

Conectaron con el Jordi Martí y Antón Meana en sus versiones de 1968, la actualidad de la Copa del Generalísimo... Y qué curioso comentar aquello de que si eso de retransmitir los partidos por la tele desnaturalizaba o no el fútbol. Jugaron a la ciencia. Ese invento del microondas... mmmm... Javier Gregory estuvo comentando el «invento», pusieron música de la época y algunos anuncios de la época. Qué guay la crónica de la señora o señorita María Guerra, la crónica desde el Paseo de Coches de la señorita Eva Cruz sobre la feria del libro: «100 años de Soledad» de Gª Márquez, que había salido el año anterior, pero se estaba leyendo en el momento. 

Si os queréis sumergir en 1968, estos radiochips mayeros: 

     

Jugaron a meterse en el 29 de mayo de 1968. Jugaron a meterse por entonces, con el disfraz puesto. No en plan teatro, sino en plan disfraz. No jugando a interpretar 1968, sino jugando a dibujarlo. No hicieron el esfuerzo de imitar del todo a 1968, porque quizá hubiera sido un programa completamente infumable. Mirad que estuve pensando en qué hubiera pasado si Toni (o sea, don Antonio) y compañía hubieran jugado a meterse en el papel, si hubieran puesto toda la publicidad como entonces, la música como sonaba entonces... Además de ser difícil, además de resultar algo coñazo, nos hubiera dado para encontrar mil defectos. Porque cuando leo cosas de la radio de la época y la comparo con las cosas de hoy... Hubiera sido un juego imposible. 

Fue una cosa simpática, y en medio de tanta cosa política, en medio de tanta actualidad... Eso de que se encuentre tiempo para hacer cosas originales, siempre está bien. Mola eso de hacer cosas que el oyente no espera. No es la única vez que en la radio se ha hecho algo parecido en los últimos tiempos, y la verdad es que se agradece. Al final, este juego de comparar nos hace pensar. Y eso está genial. 

Creo que una emisión real de 1968 no la escucharía en 2018 absolutamente nadie. Igual que un programa de tele de 1968 no pasaría del 1% en la tele de 2018. ¿No es bonito? Voy a ponerme Presuntos Implicados, que, por cierto, su cantante, Sole Giménez, es la Mª Dolores Pradera de nuestra generación. ¡He dicho!