sábado, 16 de diciembre de 2017

los editorales electorales

Todos sabemos que Mònica Terribas imprime a su programa —vamos a decirlo así— un marcado sesgo independentista. La cosa es que está en una cadena pública y se supone que esto no debería ser así, y más en campaña electoral.  

Cuando uno denuncia esto, rápidamente empieza el juego del «y tú más». Qué puede decir el PP y sus medios de toda la vida (cabe recordar los medios públicos valencianos, madrileños, etc.) y qué decir de lo que se suele decir de otros medios «del PSOE», que cuando están en el poder rápidamente ponen el acento en que si «la TVE de ZP tal», que cual... [Por cierto, cómo está la tele del PP con lo de «OT», ¿eh?]

Así que tenemos muchas opciones: 

- Aceptarlo con resignación. Quien manda, se publicita. Rollo «esto siempre ha sido así, y el que ganó las últimas elecciones, se lleva el gato al agua». Así pues, lo de Catalunya Ràdio hay que aceptarlo como es, hay que aceptar que cada vez que cambia el gobierno cambie RNE... Lo de siempre. 

- Quejarnos en caso de que seamos votantes de los partidos contrarios. Esto es lo que se lleva en 2017. Bueno... esto es en lo que llevamos desde que ha habido gobiernos de dos colores al menos. Si el PP dice que Catalunya Ràdio está manipuladísima, desde el medio catalán dice cosas del tipo «pues anda que TVE», y barra libre para ser todo lo descaradamente independentista que se quiera. Y barra libre para que desde los medios regionales controlados del PP traten el tema catalán como si fuera un tema local de un pueblo de Zamora —por poner—.

- Quejarnos en caso de que seamos votantes de partidos contrarios y posturear poniendo de ejemplo la BBC, como si viéramos sus informativos antes de cenar, y como si en la radio del coche la gente fuera con la 4 de la BBC. Me parto. Con esto, no sólo nos quejamos, sino que nos autoadjudicamos un tinte de objetividad que sólo es comparable al perfume de rosas. 

Os esperábais que ahora fuera otro punto que iba del rollo "intentar cambiarlo para que esto no ocurra". No lo voy a poner. Porque... A ver... No seamos tan autoflageladores de decir que nadie lo intenta o lo ha intentado, y no seamos tan cenizos de decir que no ha habido épocas mejores que otras. Porque ha habido (y hay) medios públicos con los que todos los partidos políticos están más o menos a gusto. Hay medios públicos, programas y espacios que, como diría Laporta, «¡ojo! ¡Que no estamos tan mal!» 

Lo que no mola (sobre todo en época electoral) es el descaro. Como todos sabemos, la Junta Electoral Central ha dado la razón al PP cuando han denunciado que algunos editoriales de la Terribas en Catalunya Ràdio reflejaban "un tono partidista y electoralista abiertamente favorable a aquellas formaciones políticas que sostienen que existe una represión injusta sobre el gobierno legítimo de Cataluña“. Concretamente, estos dos radiochips electorales centrales:

     

Siempre que hay elecciones (bueno, en los últimos tiempos), en Catalunya Ràdio siempre se quejan —y no sólo ellos— de que ese encorsetamiento a la hora de entrevistar a candidatos o a la hora de cubrir noticias debería ser un poco más... digamos... laxo. Porque igual el 3 de diciembre ha dicho una cosa muy noticiosa el del PSC, y a lo mejor la de ERC no ha dicho nada reseñable ese día, y al día siguiente al revés... Total, que efectivamente, es imposible no darles la razón. Pero claro... Si ya hemos aceptado estoicamente que Catalunya Ràdio es un «medio indepe», razón de más para que se les obligue a jugar a los cronómetros, por si las moscas. Un poco rollo «cuando os portéis bien, la Junta Electoral os dejará hacer lo que queráis». Y esto vale para Cataluña, Galicia, Madrid, Andalucía, Canarias, y cualquier otro sitio. 

Por otro lado... ¿Es inteligente hacer esto? Por un lado, se señala por enésima vez que Catalunya Ràdio es partidista. Por otro lado, casi diría que son ganas de hacer ruido, porque una vez aceptamos que es un medio independentista (por muy público y teóricamente lo objetivo que queramos), y dado que su audiencia es casi exclusivamente independentista, el impacto que estos editoriales tienen en la opinión pública es... poco. Es decir, por muy partidista que estos editoriales sean, difícil es que un no independentista cambie de opinión, porque seguro que están escuchando otras cadenas.

Así pues, el panorama es el que es. Ya se puede quejar el PP de los editoriales de la Terribas, que por mucha razón que tengan, poco van a mover el voto. Lo que realmente «movería el cotarro» es que Herrera se pusiera crítico con la Arrimadas o que de repente, en un arranque, la Terribas alabara a Iceta. Esto sí que cambiaría el panorama y agitaría el voto.

Para que no quede mucha duda de este tema, y para que no digan eso de: «vale, los editoriales duran 2 minutos ó 3, y luego las entrevistas son de lo más cordiales», aquí os dejo la entrevista de ayer mismo a Arrimadas. Ojo al momento en que le contesta la de Ciudadanos que «soy una mujer autónoma que toma sus propias decisiones». Ojo a la hostilidad. Quizá sea cosa mía... o no. Otro radiochip electoral central:


Y después de todo esto, lo que sí podemos juzgar y valorar es el grado de «metimiento de mano» que los medios públicos tienen. Por ejemplo, la RNE de ahora se parece más a la RNE de ZP (espacios con menos política y menos escorados) que a la RNE que hicieron a finales de los años 90 en época aznarista (ejemplo: ver la programación de 1996), que eso era canelita fina, fina, filipina. Pero esto depende mucho de los ojos del que juzga. En este caso, de los oídos. Podemos discutir de los matices, pero desde luego, hay casos en los que cabe poca discusión. 

1 comentario:

  1. Eso, de los medios públicos que van al son le dice el gobierno, me recuerda a la llegada del tripartito a la generalitat. También a la de quejas que tuvieron los cambios que hizo el PP en RTVE. Pego un trozo de un artículo de 'el país' del 4 de diciembre de 2007:


    Ferran: "Hay que arrancar la costra nacionalista de TV3 y Catalunya Ràdio"
    El diputado Joan Ferran sostiene que la cadena pública "prioriza, magnifica y retuerce la información en contra del Ejecutivo"

    El diputado del PSC en el Parlament Joan Ferran considera necesario "arrancar la costra nacionalista" de TV3 y Catalunya Radio para conseguir unas emisoras de la Generalitat neutrales y sin sesgo partidista, y afirma que estos medios son "despiadados" con el gobierno catalán.
    En una entrevista que publica hoy El Periódico de Catalunya, Ferran denuncia que TV3 es, entre otras cosas, una televisión que "prioriza, magnifica y retuerce la información en contra del Ejecutivo".
    Ante esta situación, que atribuye a la "fuerte inercia del cuarto de siglo que gobernó Jordi Pujol", el diputado socialista asegura que "hay que arrancar la costra nacionalista de las emisoras de la Generalitat".


    Y lo bien que le fue a RAC1 que quitaran la costra.
    Lo bonito que hubiera quedado que RTVE criticara a los gobiernos de Felipe, Aznar, Zapatero, o Rajoy (mientras estos gobernaban).

    ResponderEliminar