de audiencias de televisión

Ya que estaba con el tema de Broncano y Pablo Motos... Y hablando de este tipo de competencias en tiempo real, como en los viejos tiempos, que es una cosa que ya no es tan como antes, ya que no hay dos principales contrincantes, hablemos de audiencia de televisión en el programa de Pablo Motos. Pero en la radio y sobre televisión. 

Tuvieron en el «No Somos Nadie» a Eduardo Medinaveitia (que fue mandamás de Radio 3 en tiempos antiguos) y estuvieron hablando de ese tema del que la radio no se preocupa tanto: las audiencias mediante aparatito. Como la entrevista es de 2003, estamos hablando de una época en la que competían principalemente La 1, Antena 3 Televisión y TeleCinco. 

En el minuto 4 del radiochip podréis escuchar a Pablo Motos (ya que estamos yendo a cosas actuales) hablando de «Supervivientes», ese programa en el que ponían a sobrevivir a famosos de medio pelo. Y fijaos: hoy en día tenemos en todo lo alto el programa de Pablo Motos y también «Supervivientes», pero no están mirándose tanto con el rabillo del ojo: fijaos en que en la conversación hablan de un mal de la televisión de aquellos años (y no tanto de ahora) que es que competían con el mismo formato en distintas cadenas con mismas horas. 

Si os fijáis, sigue siendo la radio, sin este problema de audiencias, donde realmente sigue ocurriendo eso. Ahora la televisión es más variada en tipos de programas a la misma hora (quitando informativos, quizá) y es en la radio donde más o menos todo el mundo compite con lo mismo a la misma hora. 

Bueno, aquí va el radiochip medinaveitia:

Y después hablaban de una cosa que es común ya para televisión y radio: el abandono de lo infantil. Sí, diréis que en televisión ya existen canales temáticos, pero es cierto que en lo que es radio y televisión generalista el tema niños está completamente desaparecido. Como bien decía Medinaveitia, es un nicho claro. 

Al final hablaron de la larga vida que se le veía a la televisión... aunque había que hablar de la que se empezaba a pillar por cable: estaría la televisión de ricos (con acceso a canales de pago) y la de pobres, que es la de publicidad normal. Y que en ese momento se consumía una barbaridad de televisión. Hablaban del cambio brutal que suponía que en la humanidad nunca jamás algo había pasado de no existir a ser consumido hasta 10 horas al día. Pero... llegó internet y YouTube para romper la baraja.