ay, mama

Entre lo del Benidorm Fest, lo de la Rociíto y que la están machacando en TeleCinco a todas horas, que la gente en redes (sobre todo la enteradilla, sin segundas) y que el tema está a tope, no hacemos más que escuchar la canción de Rigoberta Bandini. 

La canción ahora está entre las 100 más escuchadas ahora en Spotify en España, está de moda... Esto no quiere decir que esta canción tenga por qué radiarse por obligación. Sí me parece raro que no suene en ninguna radio. 

Llevaba tiempo esperando hablar de alguna canción (la que fuera) que uno sepa que lo está empezando a petar para comentar esto de que las radios desde hace tiempo van con retraso; el hecho de que todas las canciones sean testadas previamente, el hecho de que tengan que pasar una especie de filtro loco para ser incorporadas a la lista de canciones que se pueden radiar, etc. hace que la radio musical a veces parece que esté a por uvas. 

La canción lo puede petar todo lo que se quiera, puede sonar en la televisión, puede estar entre las 100 más escuchadas... pero no la habréis escuchado aún ni en Los 40, ni en Hit FM, ni en ninguna. Sí, en ICat FM unas pocas veces, otras pocas ha sonado en la de Castilla-La Mancha... Pero... ¿En alguna emisora musical dentro de alguna fórmula? Olvidaos. No. 

Muchos de vosotros estaréis pensando en que estoy hablando de algo loco, que no sabéis a qué me refiero... Pero bueno, para poneros en canción, aquí va el radiochip Bandini, de cuando hablaron de la canción en el programa de las tardes de RNE, cuya presentadora también retransmite el festival... O sea, que si no llega a estar en el ajo, a lo mejor ni esto. 

Sería divertido que terminaran censurando la palabra «tetas» o algo así. Sabemos que la palabra «follar» sí, o al menos se evita. Posiblemente llevemos esto a Eurovisión y, si esto es así, os saldrá esto por las orejas.

Malo es cuando la vida va por un lado y la radio por otro. Sí, ya sé que igual diréis que estoy exagerando, que esto es un bluff... Pero tenía ganas de hablar de todas esas canciones de las que habla mucha gente y que obviamente una fórmula musical no incluye ni de broma. O se testa mil veces antes, o nada. De hecho, como me contó el otro día Axwell, este año en una cadena como Los 40, han vuelto a batir el récord de pocas entradas en lista. Ha sido el año con menos novedades en la lista, superando al 2020, que era época de pandemia, confinamiento y de cero discotequeo. 

Digamos que la radio musical en España (quitando las emisoras de oldies, que no entran en esta liga) en este momento creo que están instalados tan en el miedo de lo testado que no es que sean incapaces pero sí son completamente temerosos de poner algo que no sólo no esté testado, sino que no cuadre perfectamente en el tipo de música que se programa. Además, si se trata de una canción que no cuadre a la perfección con un determinado género... no se incluye. Y sí, para los artistas es muy importante que una canción salga en Los 40. Pero ya sabemos que lo que lo peta desde abajo ya no sale por las cadenas de novedades. Y, efectivamente, sé perfectamente que Los 40 no lo son. Lo que digo es que es raro que los fenómenos, aunque pequeños, no salgan absolutamente en la programación de ninguna, ninguna, ninguna cadena a nivel nacional. 

Esto de que la radio vaya con retraso es un cambio que por un lado es cómodo para las emisoras, es un hecho que les es rentable, y que precisamente hace que a largo plazo las sitúen en un segundo plano. Es la lucha por asegurar por el corto plazo por no arriesgar en un incierto medio plazo. No digo largo, porque no todo el mundo se queda de oyente de una radio en la que suenen novedades.

Por otro lado, y mucho más importante... ¿Dónde queda la capacidad de las radios de hacer famosas canciones? Ahora las radios necesitan que sean famosas para radiarlas. Antes la cosa solía ir al revés: algo que ellos creían que lo podía petar era promocionado aunque se la pegaran completamente. Estas cosas ya no ocurren.