ninguna política sin juguete

Sabéis que la noche de los Reyes Magos siempre es la noche en que Radio Barcelona emite el «Cap Nen Sense Joguina», que traducido es «Ningún Niño sin Juguete». Ya he hablado de este programa mágico alguna vez, pero ahora, como corren nuevos tiempos, se ha renombrado como «Cap Nena Sense Joguina». 

Sabéis la mecánica, ¿no? Porque la famosa urna del 1 de octubre no iba a ser regalada absolutamente a ningún niño... Que todo hay que decirlo. O sea, no va así el programa. 

Unos cuantos famosos donan algunos objetos para que sean subastados y esa pasta gansa que consiguen con el juego es la que se usa para comprar juguetes para los niños. Tradicionalmente, las botas de tal jugador de fútbol, la camiseta de tal otro jugador, la guitarra de tal cantante, un disco dedicado, un cuadro pintado por tal artista, la púa de tal guitarrista... Lo típico: cosas que molan tener y por las que la gente puja. Por una parte se llevan el objeto y por otra es dar dinero para los niños. 

Pero... Este año... 

A ver... Ya lo comenté antes de final de año: ¿En qué liga juega la SER en Cataluña? Os cuento... 

Imaginaos que es Nochebuena, Nochevieja o la noche de Reyes. Imaginaos que tenéis gente de todo tipo en la mesa. ¿Es el mejor momento para sacar temas políticos? Pues igual no. ¿Es una noche como la de ayer la mejor para ponerse a poner sobre la mesa cosas que dividen al personal? Diría yo que no. ¿Es una noche para hacer de todo menos cosas de política? Pues obviamente es así. 

La noche del «Cap Nen Sense Joguina» (perdón: «Cap Nena Sense Joguina») suele ser una noche en la que simplemente charlan con artistas, si va un político se habla de cosas completamente alejadas de su profesión, se pone la gente contentísima con lo que les toca, se hacen pujas y más pujas y hablan con los oyentes... Pero este año uno de los regalos los hacía la portavoz del gobierno catalán, Meritxell Budó. ¿Y qué daba para pujar en el programa? Pues una urna de las del 1 de octubre famoso, pero además de firmar la urna, dentro había una carta dedicada y todo envuelto en un lazo. 

Sí, va en serio. Eso sí, tampoco le gustaba el título del programa y lo tituló «Cap Infant Sense Joguina». Una vuelta de tuerca mucho más original. 

Por un lado, me parece un objeto poco procedente para una noche de Reyes. Una cosa es que Ada Colau mande un cartel, que tal otro político desee que pujen por un objeto suyo... Pero poner esto para pujar me parece una ida de olla bastante grande una noche así. ¿Estoy diciendo que no se puede? ¡Claro que se puede! Pero... ¿Es procedente? Yo diría que no es la ocasión. 

Por otro lado, la Budó puede intentar colar el regalo que quiera, puede ser lo cansina que quiera, y puede intentar colar mensajes políticos cuantos quiera. Puede estar haciendo política y emitiendo mensajes políticos y colar sus ideas políticas donde quiera y cuando quiera. Igual considera que su trabajo es precisamente hacer eso todo el rato. 

Sin embargo, igual desde la SER se podía haber dicho: «Oye, que esto es una noche de Reyes, igual es más procedente jugar a que sea objeto de deseo cualquier otra cosa». Es que me parece loco intentar poner esto la noche de Reyes y me parece loco que desde la SER hayan dicho: «Ah, guay, venga, pues eso». No sé. Daos cuenta que la gracia de esto es elevar la urna a «objeto de deseo por el que dejarse la pasta»... O sea, mostrar implícitamente un apoyo político. [Que me parece muy bien, pero me pregunto de nuevo: ¿A qué tipo de audiencia creen que se dirigen en la SER de Cataluña? Esto es de lo más interesante].

Además, aparte de lo político, es algo loco (¿digo loco o la palabra más adecuanda es cansino?) es que muchas veces la gente puja por la exclusividad del objeto: tal objeto que tal actor utilizó en tal serie, las zapatillas con las que tal jugador metió tal gol, la guitarra que empleó tal artista en tal concierto... Sin embargo, me han contado que urnas de éstas las puedes comprar en Barcelona en la tienda que las vende: en el barrio gótico de Barcelona está esta tienda y podéis comprar tantas urnas como queráis. En esa tienda tenéis de todo: mascarillas con símbolos independentistas, camisetas donde pone «Ho Tenim a Tocar», «Abraça'm fins que torni Puigdemont»... Lo que queráis. 

Al final, el objetivo es el que es: que todo el mundo hable de lo mismo de nuevo. Lo que pasa es que cuando el tema político invade absolutamente todo, ya no sé hasta qué punto esto es publicidad positiva. Y, sobre todo, me pregunto si desde la dirección de la SER en Cataluña tienen verdadera idea de cuál es el público que les escucha. Ya he dicho en alguna ocasión que llevan unos años intentándose enganchar a un tren que ya va lleno y que corre mejor y más rápido que ellos. 

El radiochip de hoy es de ayer, del «Cap Nena Sense Joguina». La urna se la quedaron por 250 euros. Escucharemos el rato en que estuvieron comentando las críticas por lo de la urna. Ha sido la primera vez que creo que este programa ha recibido alguna crítica negativa en la historia, creo yo. Pero oye... son felices con esto de la viralidad. Radiochip urno gracias a que me grabó el programa @DiexistaFM: 

En esa hora se subastó una camiseta y unos libros de Silvia Abril y Buenafuente (por 250 euros), unas zapatillas antiguas de Beth (130 euros), una camiseta y un palo del Barça de hockey (500 euros), un casco de policía de la serie «Antidisturbios» (que se quedó Mayka Navarro por 200 euros), unas botas de Rafinha (150 euros) y una camisa, una corbata y una baraja de cartas del mago Pop de un oyente desde Madrid por 320 euros. Dejaron para el final del programa un cómic de Makoki (que iba por 550 euros), la camiseta de Jennifer Hermoso (que iba también por 550 euros) y una guitarra hecha para Serrat que superaba ya de largo los 2000 euros. 

Me estoy volviendo antiguo, creo yo... Prefería cuando el programa se titulaba normal, el objetivo del programa era el que era, sin que hubiera trasfondos raros, el programa era más noticia por lo conseguido o por la puja que dejaba más dinero en vez de por el revuelo en Twitter y las repercusiones políticas en las redes... Pero se lo buscan. Otro rato hablamos del objeto de subasta de la consejera de salud del gobierno catalán... Unas mascarillas (y unos maravillosos pendientes amarillos). Un poco cutre. Vendo bolígrafo y regalo entrada para el concierto de Héroes del Silencio.

Ninguna política sin juguete.

Ya digo que sólo faltaba que no pudieran poner en la puja lo que les diera la gana. ¡Por supuesto! Pero creo que cada espacio tiene su sitio y cada sitio tiene su espacio. Y que sigo sin tener claro el tipo de audiencia que buscan. O si lo que quieren es transformarla.