lunes, 4 de noviembre de 2019

SER de izquierdas

Ya he tratado muchas veces el tema de las ideologías y las cadenas de radio. No es raro, porque es una cosa fundamental a la hora de elegir emisora de cabecera. Hemos situado a las emisoras mediante vuestras impresiones y también hemos relacionado qué se escucha y qué se vota gracias al CIS.

Es verdad, no hace falta gastarse el dinero en estas cosas para saber de qué pie se cojea en cada medio porque es más que evidente. Hay veces que hay emisoras que tienen programas que cojean de distinto pie, pero hasta eso se pilla fácil. 

Como todos sabemos, la SER ha sido tradicionalmente la radio de izquierdas, aunque es verdad que desde que se despertó una izquierda más radical en España, a la SER se le ha acusado de derechizarse y todo eso. ¿Se mueven más la radio o las personas? Eso siempre podremos discutirlo... 

En la SER siempre ha habido de todo. De hecho, en todas las emisoras hay de todo. Lo que pasa es que hay emisoras en que en una tertulia de 5 personas hay uno moderadito del otro lado y se transforma en una diana a la que disparar los tiros. Pones a uno de otra ideología y la tertulia se transforma mágicamente en plural. En la televisión hay veces en que invitan a media bancada de un lado, media bancada de otro —hasta aquí todo bien— y después sólo se deja exponer los argumentos a una parte. Hay muchas variaciones de tertulias... Y las de los medios más escorados a la derecha suelen ser tradicionalmente los reyes del pasar completamente incluso de posturear con poner a nadie de izquierdas. Suele haber contertulios de derechas, centro-derecha y muy de derechas. Pluralidad, claro. 

Sin embargo, pocas veces se defiende en la radio que no se dé cabida a una opción política o a un sector ideológico. Por ejemplo, nunca he escuchado que en la SER se diga: «bueno, como este es un medio de izquierdas, prohibiremos a la gente de derechas, que para escuchar cosas de derechas ya tienen otras emisoras». En realidad, es lo que hacen muchos medios mediante sus trucos de aparentar pluralidad, pero jamás se dice esto tan a las claras. 

Bueno, jamás, jamás... Un colaborador fijo de la SER, de esos que podríamos llamar más radicales de izquierda, sí planteó este tipo de cosas. En una entrevista con Gemma Nierga y Nativel Preciado, Eduardo Haro Tecglen vino a decirlo a las claras. El radiochip de hoy es un trozo de entrevista que tuvieron y que es de 2002. Escuchad con atención este radiochip Tecglen y comentamos: 


Yo en aquel momento no diré que tragaba con cualquier razonamiento, porque no era así, pero al tener menos elementos de juicio, no lo veía como ahora. Es que en aquel momento este señor me hizo pensar. Pasado el tiempo, cuando volví a escuchar esto, puse cara de pensativo. Ahora pienso que es una ida de olla tremenda. Os cuento: 

Gemma y Nativel le dijeron a Haro Tecglen que no tenían la misma impresión que él. ¡Menos mal! Porque según él, no estaba de moda decir que se era de izquierdas. Es cierto que en pleno aznarismo ilustrado lo que estaba más de moda era decir que se era de centro... O se era de izquierdas o se era de centro. Pero nunca jamás en España ha estado mal visto decir que se es de izquierdas. El falso victimismo éste de Haro Teclgen con esto de ser de izquierdas me deja flipado a día de hoy. 

Luego flipé más con su idea del dar a los pobres. No decía que había que repartir a los países pobres porque es una cuestión ideológica y de humanidad... sino más bien una cuestión pragmática: para que no se nos coman en el futuro. No sé. Mucha izquierda no veo ahí. 

Y luego, además, me puse a mirar la Wikipedia. Porque yo siempre escuchaba a Haro Tecglen en sus columnas en «La Ventana», siempre, siempre, después de los boletines de las 18 h. No creáis que me ponía a teorizar sobre ellas... Las escuchaba, pero tampoco me ponía a pensar demasiado. Y al reescuchar esto, me puse a bucear. Nunca me había parado a pensar en quién había sido Haro Tecglen. Un señor tan escorado ideológicamente —lo de la radicalidad no es cosa mía, sino que lo señalaban claramente Gemma y Nativel— ¿dónde había estado antes?

Entonces, flipé. Porque desde luego, en la dictadura no le faltó el trabajo. Redactor jefe, de periódicos, corresponsal de la agencia EFE, subdirector de Triunfo... O sea, que se supone que era más rojo que nadie, pero por eso de ganarse el pan escribió durante toda la dictadura en un montón de medios e incluso loando al fundador de la Falange. Se supone que hizo todo eso porque tenía que comer y que por dentro le quemaría cada una de las letras que escribía. No sé. No sé yo en tiempos de dictadura qué habría hecho yo, aunque desde luego, tengo claro que con ese tipo de actitudes uno come pero no colabora en cambiar ningún régimen dictatorial. Los periodistas antiguos del ala derecha, sin embargo, le apuntan como un tío que se apuntaba a aquello del sol que más calentaba. 

Para terminar, señalaré que cuando Gemma y Nativel le dijeron a Haro Tecglen que por supuesto que hay que tener en las tertulias gente de todo pelaje ideológico por aquello de contrastar ideas (casi en el minuto 8), les saltó que por qué entonces no tenían en las tertulias a gente de Herri Batasuna. Creo que la respuesta estaba clara, pero no en vez de responder, eligieron cambiar de tema.

Qué interesante la entrevista... Aunque escuchada años después, me parece que hubo un porcentaje de trilerismo bastante alto. 

7 comentarios:

  1. Haro Tecglen escribía muy bien. De su ideología me da pereza opinar: entre los que fueron franquistas y luego se hicieron rojos, y los hijos de franquistas (El Gran Wyoming, por ejemplo) que se han hecho los más rojísimos... Lo que está claro es que con Franco todo el mundo era franquista. Con la transición, pues algunos se quedaron en la derecha, y otros vieron que se abría un nuevo nicho de mercado izquierdista que también daría muchos réditos. La democracia suele ser más rentable que la dictadura porque aparenta más variedad, aunque al final todo el mundo sea socialdemócrata.

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  2. A la muerte de Antonio Herrero escribió un desafortunado artículo en el que venía a decir que no sentía su fallecimiento.

    Abogado Antema 3 de Radio

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    1. De hecho es lo que más recuerdo de él.

      (PD: Cebrián también venía del régimen...)

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  3. Haro Tecglen era un extremista de izquierdas, fuera de todo lugar, que escribía muy bien, pero en radio era un "empalague" total. Previsible ideologicamente, de verbo poco suelto y muy aburrido. Supongo que en la SER, lo tendría para cubrir el "nicho de mercado" de la extrema izquierda, pero como era y es casi residual lo quitaron relativamente pronto y así descansamos todos.

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  4. Yo lo recuerdo de sus columnas de El País, que colaban en la sección de televisión no sé a cuento de qué y, como decís que pasaba en la radio, era muy extremista.

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  5. EHT era, por encima de todo, un farsante oportunista que sin ningún escrúpulo escribía siempre a favor del poder (fuese Franco o Polanco, valga la redundancia).

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