en enero de 2018...

No recordaba yo que enero del año pasado resultara tan picantón. Todo muy de sexo, sexualidad, tetas, revistas, de gente rancia... Todo muy mezclado. Aquel mes empecé hablando de «La Noche Más Loca», aquel programa nocturno que sonaba en Top Radio. Aquel radiochip iba de un chaval que alquilaba pelis porno sin tener los 18 años... ¡Qué narices! Rescato aquel radiochip loco:

Aquello siguió con el cierre de la Interviú. Algunas chicas de la radio han sido portada de esta revista. El que fue subdirector de la revista le estuvo contando a Alsina una mañana algunas historias muy jugosas sobre la revista. Y mejor: Podemos relacionar la Interviú, a García y al «Hora 25» de manera muy directa. Tremendo. 

Más tremendo fue lo de Luis del Val hablando de que con la cabalgata de los Reyes Magos los niños podrían aprender «a ser maricones». ¡Toma castaña! Aquello dio mucho de sí para reflexionar. Y... no, los niños no sé, pero la chavalería que escuchase Los 40 podría escuchar una entrevista al Niño Polla, así que podrán saber que uno se puede dedicar al porno. 

Y ya, en plan genérico, fuera del sexo y tal... Los Ondas de 1989 y 1990. En 1990 fue precisamente cuando le dieron uno a Luis del Val... ¡Qué cosas!, ¿no? Pero hubo tiempo para hablar también de publicidades ya contratadas que luego se meten genial, de voces imperfectas de la radio (o feas, directamente), de los locutores de musicales que se pregraban los turnos, y de qué pasa cuando los de un programa de radio ponen vídeos que no explican. Sí, parece loco esto que digo... pero ocurrió.