el desierto vespertino de la COPE (5): Cristina

Es que da pereza escribir su segundo apellido. Cinco años de alemán y aún me da pereza escribir "Schlichting". Así que en el resto de la entrada pondré sólo Cristina López. Por cierto que Sclichting (última vez que lo escribo por hoy) es un pueblo de Silesia, cerca de Dinamarca, de poquito más de 200 habitantes.

Dato frikón puesto, pues vamos a lo de las tardes de la COPE. Dejamos la cosa en que por las tardes querían exprimir el limón hasta el máximo poniendo a Abellán y Federico como codirectores de un programa del que los dos terminaron pasando completamente porque además de mucho curro, eso no chutaba. La voz de Barrancas diciendo "fracaso absoluto" vendría bien ahora. Estábamos en diciembre de 2001...

Y en enero de 2002 pusieron a Cristina. No sé exactamente (quizá alguno sí) cómo fue eso de que le confiaran la tarde... Hombre, había sido contertulia en la SER (¡en el Hora 25! y sobre esto hay radiochip), en las mismas tardes de la COPE... y en el ABC se hacía hecho cargo del tema de religión. De hecho, en antena, en su primer día, reconoció lo nerviosa (asustada) que estaba porque nunca había dirigido un programa de radio. Escuchémoslo en el radiochip confesión:

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Para empezar, habría que comentar el microjingle que suena al principio del radiochip, pero lo dejo para otro día... Luego, comentar que en aquel tiempo tampoco estaba tan "mal visto" hablar del corazón, porque precisamente ese era un "punto de audiencia" en las antiguas tardes de Encarna, que es de donde sale toda esta serie de entradas. ¿Os dais cuen? ¡Denle trabajo a...! Algo de "encarnismo" sí que quería haber...

Bueno, y precisamente termina el radiochip dando paso a El Corte Inglés. Los dinericos, que dependen de la audiencia. ¿Y cuánta tuvo Cristina? Pues desde luego, nunca tuvo tanta como para "levantar al muerto" en la que se había convertido esa franja horaria, pero tampoco fue la lamentabilidad que hubo habido. Terminó el 2002 aún por debajo de los 200.000 oyentes, pero dejándole 2 añitos, en 2004 ya estaba cerca de los 300.000, que no era precisamente el éxito, pero ya no eran datos de 2ª división, y en 2005 ya empezó a superar esa cifra, aunque alguna vez se quedaba por debajo.

Nunca fueron datos como para tirar cohetes, y en parte le favorecía la situación de que la COPE estaba "de moda" entre una parte de la población (la antizetapera) y que todos los programas arrastraban audiencias filofederiquistas y demás... ¿Por qué nunca se la cargaban de la programación? Igual por tres cosas:

1. La audiencia. No era alta, pero no era tan lamentable como años atrás: de hecho, doblaba lo que hubo en los peores tiempos. Así que esta entrada debería llamarse en realidad "desierto con algún pequeño oasis en la COPE". Y esto está en relación con el punto 2:

2. Cristina cristiana. Bueno, y católica de "Comunión y Liberación". Esto parece que es una chorrez, pero estoy seguro de que no. Fijaos: en una radio católica, el presentador de las mañanas era ateo (Federico) y el de las noches (en la última época) era César Vidal (protestante), con lo que no estaba mal que una radio como ésa tuviera al menos un programa de los gordos a cargo de una "cristiana comprometida". Y creo que precisamente por eso no le podían exigir demasiada audiencia: a veces, ese tipo de radio está reñida con audiencias masivas. Ya hablé de eso el otro día, que me repito...  

3. Cristina, a pesar de que era "la novata"de las tardes, soltura no le faltaba (ni le sigue faltando ahora los fines de semana). Se le da bien la cosa, es obvio. Aunque yo por ejemplo no consiga conectar con ella (porque acordaos de secciones míticas con Aquilino Polaino) hay que reconocer que habla bien y que hila todo. Y eso que ha tenido momentos tensos en antena... igual un día recupero alguno que tenga por ahí.

Así que una vez acomodadísima en las tardes (aunque su voz sonó para "La Linterna", pero andaba liada con niños y todo eso) el año pasado le dijeron que hasta ahí. Y que si acaso, que le pasaban a los fines de semana. Cristina, según publicaron "sus amigos" de LD, se pilló un rebote tan gordo que cuentan que llamó a Rouco y todo para preguntar qué pasaba. Se fue a los fines de semana... y aquí acaba casi casi la historia del desierto vespertino de la COPE. El próximo capítulo es de radio reciente... Cuando salimos "del mini-oasis" de Cristina.