la visión de Diego Manrique

Vuelvo a un tema que quedaba como colgado: ¿os acordáis de lo de Diego Manrique? Sí, me refiero a una de las voces más importantes -e históricas- que ha tenido Radio 3 desde el inicio. Seguro que sabes quién es (si es que aún no caes) si te digo que es el del "Ambigú". En julio de 2010 se lo cargaron de Radio 3, y ya le dediqué una entrada del blog. 

¿Qué es lo que ha ocurrido desde entonces? Nada, que Diego Manrique sigue sin programa y fuera (muy fuera, podríamos decir) de Radio 3. Y eso que era "el subdire". Resulta que en la revista Efe Eme concedió una entrevista hace nada, y me parecía interesante extraer trocitos de la entrevista y comentarlos muy brevemente... Además de hablar de "lo suyo" habla sobre Radio 3, sobre su modelo y sobre la radio musical en general. Pues este es un estracto de la entrevista en Efe Eme que realizaba Juan Puchades (J. P.):

J.P: A comienzos de julio del año pasado, caí en la cuenta de que Diego A. Manrique iba a cumplir años el 27 de ese mes. Se me ocurrió que merecía uno de esos textos que, de tanto en tanto, publicamos en EFE EME como homenaje a aquellos que siguen empeñados en hacer o difundir buena música. Preparé, con tiempo, aquel artículo, y en eso que empezaron a llegarme mensajes de que la cosa estaba jodida para él en Radio 3: el director de Radio Nacional había decidido cobrarse su cabeza… [...] el mismo día 27 se emitía el último “Ambigú”, como si el señor Benigno Moreno (el director de RNE que, sin vergüenza alguna, decidió acabar con todo un emblema de Radio 3, [...]), en un gesto con el que ratificar, por si quedaban dudas, su pésimo gusto y su nula elegancia, quisiera hacerle un regalo de cumpleaños envenenado. [...] el caso Manrique, acabó en los tribunales, donde Diego ganó; y Moreno recurrió. Así están las cosas un año después, [...] y para el señor Benigno Moreno: a pesar de que usted lo afirmara bajo juramento y ante una jueza, Diego A. Manrique no es el propietario de EFE EME; sí es un amigo y una inspiración, conceptos que quizá le resulten extraños, qué pena.

J. P.: Han pasado doce meses, ¿cómo ves lo sucedido entonces?

D. M.: Iba a decir que ya no me duele. Pero esto del aniversario me ha reabierto la herida. [...] No acepto que tantos supuestos amigos se callaran. Y luego, esas discográficas que se apresuraron a borrarme de sus listados…

J. P.:¿Cómo has llevado tu reincorporación a la vida sin tener que preparar todos los días “El Ambigú”? ¿Se te hizo duro?D. M.:Me ayudó [...] la respuesta de los oyentes, la solidaridad de bastantes compañeros, la fe de mis abogados. 

J. P.: Visto en perspectiva, ¿fue un error que aceptaras la dirección adjunta de Radio 3? ¿Puede que por ahí vinieran las razones del despido?

D. M. [...] Santiago González, el entonces director de RNE, me ofreció dirigir Radio 3. [...] no me veía en un despacho. [...] El momento era grave: Radio 3 se había quedado en cuadro tras el ERE y tenía que prepararse para afrontar su cuarta década con personal fresco y nuevos planteamientos. Así que me convencieron para que estuviera de director adjunto, al lado de Lara López. ¿Me equivoqué? Pues seguro que sí, pero no podía negarme. [...] RNE tiene una cúpula directiva hostil, como ocurrió cuando Benigno Moreno reemplazó a José Ángel Esteban como jefe de programas [ese fue el paso previo de Moreno antes de acceder a la dirección de RNE].

J. P.: Allí no están acostumbrados a la figura del director adjunto, era algo inédito, ¿no?
D. M.: Sigo creyendo que las emisoras requieren un subdirector o supervisor de antena [...] Por la carga burocrática y el calendario de compromisos, un director o una directora no escucha, no puede escuchar, los programas. [Vaya, cuando yo digo que los jefes de la radio no la escuchan y que ahí radica el problema, veo que también opina igual alguien que entiende... Interesante reflexión...] Necesita alguien de confianza que lo haga y que tenga una visión de conjunto de lo que sale al aire. Para que no ocurran casos como el de Vetusta Morla. [...] [...] [...] Desde antes de que saliera su segundo álbum, están omnipresentes en la emisora:[...] El problema es que reduce una emisora pública a una radiofórmula al servicio de intereses comerciales. Ojo, no es el caso, repito, no es el caso, pero da esa impresión desde fuera. [...] pasa también con otros grupos y festivales. [...]

J. P.:¿No hubo ninguna salida, ninguna posibilidad de que siguieras con “El Ambigú”? 

D.M.: No. Era una trampa muy cabrona: [...] exigían que me quedara sin contrato durante varias semanas; así cortaban una relación laboral de veintitantos años. Luego, volvía contratado pero estaba a prueba las primeras semanas, durante las cuales ellos podían despedirme sin necesidad de alegar nada. 

J. P.: ¿Es normal que se trate así a un director adjunto? ¿No era, además de perverso, un tanto humillante la propuesta de tenerte con un contrato de prueba?

D.M.: A ver, ni siquiera cuando hay un cambio de ciclo político se castiga así a alguien que ocupaba un cargo. [...] No estaba en plantilla, no pertenezco a ningún sindicato o partido, hacía una labor de crítica de lo emitido a la que no estaban acostumbrados y además insistía para que se respetara el libro de estilo. Sobre todo, yo era locutor de música. No bromeo: muchos directivos creen que los programas musicales se improvisan, que no suponen ningún esfuerzo. Es triste: no sé si odian la música, pero sí desprecian a los musiqueros. [A ver si va a ser que la radio musical hecha por gente que entiende de música es un estorbo en Radio 3. Para hacer radiofórmulas de éxito ya están las otras, ¿no? Esto se supone que es un servicio público con gente que necesita un cierto tiempo en prepararse las cosas... aunque siempre, claro, con un mínimo de audiencia necesario.]

J. P.: Nadie habla claro de tu caso, pero sí se ha dejado entrever que te habías ganado a pulso el despido, que no eres un santo, que tú también tienes lo tuyo… ¿Qué opinas de esto?D.M.: Yo hablaba con todo el mundo… [...] no podía tomar decisiones: solo era un “consigliere”. También daba ideas: me acuerdo que yo insistía en que Radio 3 necesitaba un programa de deportes, [Toma castaña, a ver si la idea de Rock & Gol inicial no era nada descabellada...] pero Lara no lo veía. No soy nada deportivo pero pienso que, combinado con buena música, eso tendría posibilidades. Siempre surgirán fricciones al intentar dinamizar un colectivo como el de Radio 3, donde hay auténticas estrellas radiofónicas y no se practica la autocrítica. [...] Me temo que la tendencia [...] en RNE es a no menearlo, [...] y olvidar al oyente. 

J.P.: ¿En este tiempo nadie de la dirección de la casa se ha puesto en contacto contigo para tratar de tender algún puente? 

D. M.: Algo ha habido, [...] Aquello es como el Ejército: si te saltas el escalafón, estás jodido. [...] Puede que ocurra lo mismo que cuando me echó Fernando Argenta, en 1986: que vuelva a trabajar en TVE antes que en RNE. 

J. P.: ¿Sigues escuchando Radio 3? ¿Qué te parece la actual programación?  

D. M.: [...] lo que me preocupa es la disminución de recursos técnicos. Nunca habían pasado cosas como [...] cuando el equipo de “Carne cruda” se desplazó allí pero no pudo transmitir el festival Cultura Inquieta por falta de medios. [¡Ostras, me he quedado a cuadros con esto!] [....] Con el nuevo sistema informático, ocurren fallos inexplicables. [...]

J. P.: ¿Qué echas en falta en la emisora?
D. M.: Más potencia informativa. Más autonomía. Más conexión con la calle. Cuando ocurrió la entrada de la Guardia Civil en SGAE, parecía que aquello sucedía en otro país. Todas las emisoras informaban del asunto y la mayoría de los programas de Radio 3 callaba. Me enteré luego que Benigno y su séquito preferían que ni se mencionara a Teddy Bautista en Radio 3. [...]


J. P.: ¡Pero eso es puro franquismo! La lista negra para alguien que todavía no ha sido juzgado…

D. M.: [...] ahora son órdenes verbales, para que no conste por escrito. [...] Hasta entonces, la actitud de RTVE ante la SGAE era de un servilismo absoluto. Se obliga a los locutores a rellenar unas hojas Excel con los contenidos musicales de los programas: títulos, autores, duraciones, discográficas. Un coñazo [...] Si hubiera en España verdadero periodismo de investigación, sugeriría que ahí está el meollo a estudiar, [...]. 

J. P.: Si hoy te dijeran de volver a Radio 3 y al “Ambigú”, ¿regresarías? 

D. M.: ¡Claro! Pero tendrían que darme garantías de que no es una artimaña para luego quemarme en el patio de la Casa de la Radio. En serio: creo que pensaría en otro programa, diferente del “Ambigú”. 

J. P.: Mucha gente pensó que no te faltarían las ofertas desde la radio privada para que regresaras con un programa, pero han pasado los meses y no ha sido así, ¿por qué?

D. M.: ¡Hubo alguna oferta! [¿En dónde sería?] Querían que llevara toda la música en un programa de fin de semana pero suponía levantarme sábados y domingos hacia las seis de la mañana. [Joder, qué buen horario...] [...] De las radios privadas poco hay que esperar: solo les preocupa la batalla política y el deporte (y ambos asuntos se tratan de un modo parecido). [Toma ataque a la línea de flotación... y además es que encima le daría un 75% de razón.] La música es una excusa para llenar espacio. [¡Cierto!] Te llaman de emisoras “convencionales” para que hables de asuntos tipo Amy Winehouse o los 70 años de Dylan. Gratis, claro. Es tan descarado que ni siquiera tiene gracia.


Inciso: de eso va el radiochip de hoy. He buscado un radiochip "molón" que venga a cuento de todo esto. En el programa de Isaías Lafuente de hace veranos, en su labor de sustituto del "A Vivir..." en 2009, invitó para hablar de los 40 de Woodstock a dos pesos (que lo son) de la radio musical (ahora, que no sé si pagados o en "modo favorcillo"). Uno, Joaquín Guzmán, "el de la Gramola", y otro, Diego Manrique, "el del Ambigú". Ambos hacían radio musical y podían hablar más de un minuto seguido. Ambos fueron echados de sus radios. Ambos se han tenido que refugiar en otros medios. Ambos luchaban durante años seguidos por los Premios de la Música al mejor programa de radio... y sí, resulta que hay que hablar de Woodstock... y ¡venga! echando mano de los que saben. Radiochip desconsiderado:

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Y sigue la entrevista:


J. P.: ¿Sigues al tanto de la actualidad musical o has desconectado?

D. M.: [...] ando más al tanto de la actualidad. En Radio 3 [...] se está imponiendo la tendencia reduccionista: una noción de la realidad musical bastante empobrecedora, donde un nuevo disco de Russian Red es un acontecimiento de primer orden. [...]

J. P.: ¿Compartes esa percepción que tenemos algunos de que el indie ha derivado en una suerte de “mainstream”, con sus sellos que presionan, medios que lo apoyan, festivales específicos, ¡incluso sus propios “comebacks”!? 
D. M.: Cierto, pero si has vivido lo suficiente puedes recordar espejismos similares. [...] Los enterados se burlaban de Creedence Clearwater Revival: eran “comerciales”. Y la atención que se prestaba a un Marvin Gaye, a la música negra en general, era cero. Todo pasa pero queda lo valioso.  


Iba a poner sólo trocitos, pero al final casi la fusilo entera... y sólo he quitado algunas preguntas, así que pasaros por la entrevista entera de Juan Puchades. La verdad es que me parecía tan interesante que no sabía qué cortar.

Ah... me doy por enterado de que en la encuesta de "qué música de qué radio os gusta más", el "otras" se refiere sobre todo a Radio 3, y hacedme saber si es que no es así... Que sepáis que he puesto las 9 primeras del EGM más el "otras". Si no es Radio 3... también hacedlo saber, para cotillear un poco. Pero me juego a que...