¿de dónde vienen? (1): SER

Empiezo una serie un poco bizarra, que más que ser una cosa exhaustiva sobre de dónde son los que conducen los espacios, pretende dar una idea de algo muy curioso, que es... el "toque" que se le quiere dar a las cadenas. A veces, muy meditadamente. A veces, por simple casualidad. A veces, porque el hambre se junta con las ganas de comer. A veces... bueno, las conclusiones las sacamos entre todos. 

Porque en la tele da más o menos igual la procedencia de un presentador o de un periodista. No es que sea una cosa poco importante, pero si Piqueras es de Albacete o si Jorge Javier es de Badalona es una cosa que bueno... que tampoco te lo paras a pensar. En la radio, sin embargo, es muy muy importante. 

Como en la radio los locutores terminan hablando de si han comido aquí o allí, de si nacieron en tal sitio... como en la radio los locutores terminan escogiendo sintonías para sus espacios que muchas veces son parte de su educación musical... Me explico: si Gemma Nierga habla del tráfico, empezará a hablar sobre que si en la Rambla tal, o de si tal sitio está al lado de tal otro. Si es Alsina, quizá hable del tráfico de Madrid. Es inevitable. Si es Toni Garrido, termina hablando de historias de Felanitx, y si es Federico, recordará batallitas de cuando estudió en Teruel... cosa que no pasa cuando un busto parlante de la tele habla. Lee y a correr. Por otra parte, las músicas y sintonías de un programa... cantan. Si te pones Herrera por las mañanas eso rezuma Andalucía hasta en los rincones. Si te pones a escuchar a Pepe Domingo Castaño, cualquier cosa gallega, ahí que la pone. 

Todo esto viene a que un amigo del blog, Álvaro, me comentó que en la tele se decía (cosa que ya había escuchado a Boris muchas veces en la radio) que un programa para que funcionara tenía que funcionar en Andalucía, Madrid y Cataluña. ¡Obvio! Son las tres comunidades más habitadas... Por eso en OT siempre había al menos una que siempre canta cosas andaluzas, una que es de no sé dónde... lo que todos sabemos. Así que eso, si lo aplicamos a la radio... chungo. No puedes poner a un locutor que sea de 5 sitios al mismo tiempo. 

Pues... tomando esa máxima de Andalucía, Madrid o Cataluña... Todos me dirán que es casualidad, pero... ¿y si no fuera casualidad que... ? Al lío: desde hace tiempo se dice que en la SER si no eres catalán, que no te dan un programa grande. Y hombre... desde luego que no es así, pero bueno... casi. Para comparar las emisoras (hoy, la SER) he pillado programas de mañana, tarde, informativo de noche y deportes nocturnos, y luego fines de semana y carruseles. El resultado es... este:

Que dan ganas de decir que hasta la de Madrid va y se llama Montserrat. Y luego, el de Brunete, que parece casi que ni pega. Desde fuera parece como si la SER estuviera muy muy empeñada en librarle la batalla a las emisoras catalanas, casi dando por hecho que el resto de España ya está lo sufiencientemente "bien" como para no preocuparse.

Esta entrada queda un poco conspiranoica... como si hubiera una idea maliciosa de fidelizar o contentar justo a un determinado tipo de público que se le resiste. Pero al gráfico me remito. Los programas grandes están dirigidos por catalanes. ¿Casualidad? Pues casualidad, no sé... 

No sabía si poner como radiochip algo sobre la SER en Cataluña (que suena distinto hasta en las promos y sintonías), no sabía si poner algún debate sobre Cataluña... pero mira, al final resulta que he encontrado el radiochip perfecto: en el programa de Montserrat Domínguez, una entrevista a Sardá (que estuvo antes que Gemma, y al igual que ella, catalán) en donde habla del libro que sacó llamado "Cataluña, España, y la Madre que las Parió". Radiochip catalánico:

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Sin embargo, además de todo esto, la SER lo tiene siempre más fácil en este tema porque es la que siempre ha tenido mayor "despliegue local", así que por mucho que el que te hable sea de no sé dónde, la presencia local de sus emisiones hace que igual escuches la voz cercana mucho más que en otras emisoras... también en fines de semana. Por eso creo que el adelgazar las radios locales de la SER es quitarle un poco su esencia y cercanía. O sea, un error. Y que conste que no es sólo una opinión mía.