movida internacional

Si el otro día hablaba de lo de Decisión Radio, que supuraba eso mal rollo, ahora toca hablar de otra radio que era del mismo palo: Radio Internacional, también conocida como «la de los chinos» desde hace ya unos cuantos años. Me encontré por casualidad con un hilo de Twitter de un periodista llamado Alberto Cercós y que viene a relatar aproximadamente lo que ya me había comentado un amigo sobre esta emisora. Así que copio el hilo:

Juntando todo lo que contó en el hilo queda lo siguiente: «Llevo ya varios años viviendo a Madrid y en junio me surgió una oportunidad maravillosa: trabajar en una radio local de más de 70 años de historia. Estuve varias semanas haciendo formación. La idea era implementar el auto-control en la radio. Hasta ahí todo “bien”.

De la noche a la mañana se nos dijo (a una compañera y a mí) que debíamos empezar a hacer directos. Turnos de media jornada. De 6 a 10h. Un programa matinal mezclando radio-fórmula e información. Nos negamos porque no teníamos contrato. No había condiciones establecidas. Nada.

Una vez nos sentamos y firmamos, empezamos a emitir. Cabe apuntar que @RadioInter_es sufrió en marzo una especie de ERE y nosotros éramos los jóvenes elegidos para revitalizar la radio. Estuvimos junio y julio con nuestro programa. Con problemas, pero aprendiendo.

En agosto la radio se tomó vacaciones, y por ende nosotros también. Nos aseguraron que en septiembre empezaría la nueva parrilla. La de verdad. La que iba a durar, al menos, una temporada. Y así fue: en septiembre empezó el programa ‘Amanece, que ya es mucho’.

Durante todo el mes se han vivido momentos inverosímiles. Promesas que no se han cumplido. Situaciones irreales en una radio. Aún así, pese a la nefasta organización y falta de recursos, el equipo -joven y con ganas- resistía por amor a un ente superior: La radio.

Llegamos al viernes 30 de septiembre. Son las 23:27h. Vía WhatsApp se nos comunica que toda la redacción (5 persistías y 3 becarios; sí, ya había becarios) está despedida. Era algo que se podía prever por lo vivido durante el mes; pero no pensábamos que pasaría tan rápido.

El cese de la programación no fue ni por mala praxis, ni por mal ambiente, ni por programas malos, ni por falta de profesionalidad. Todo lo contrario. El equipo que me he encontrado en @RadioInter_es es de 10. Joven. Con ganas de crecer. Que ama la radio. Que seguirá luchando.

La excusa que nos transmiten es el COVID-19 y las dificultades económicas. Eso nos lo dice un empresario chino que acaba de comprar dos edificios: uno en el centro de Madrid y otro a las afueras. El chiste se cuenta solo. La situación es inverosímil. Pero estamos en la calle.

Ese 30 de septiembre, además del despido, se nos comunica que el lunes podemos ir a la emisora a recoger nuestras cosas y firmar la carta de rescisión. Asumen que es un despido improcedente, algo es algo. Nosotros nos negamos a firmar.

Durante el fin de semana empezamos a cancelar las colaboraciones, ya que desde el lunes nos dicen que no hay programación. Este lunes (3/10/22) por la noche, se ponen de nuevo en contacto con nosotros: el martes debemos volver al directo hasta el 18/10. Así, de repente.

Su jugada es clara: los 15 días de preaviso hacen acto de presencia. Algo que el 30/09 ¡¡no se había mencionado!! Improvisación total al ver que todos los redactores nos negábamos a firmar el despido. El objetivo es claro: no estamos conformes con la justificación.

Para colmo, nos dicen que durante los próximos días tenemos que cambiar nuestro horario y hacer un programa sobre inmobiliarias. Sí, sí, , no es fake. Se quieren aprovechar de nuestra situación al negarnos a firmar. Y ojo, están en su pleno derecho. Pero por ahí ya no pasamos.

Moralmente nos hemos negado. Hemos asumido que no cobraremos ni finiquito, ni los días de octubre, ni las vacaciones, etc. Nos da igual. No merece la pena y no queremos que nuestro nombre vuelva a salir en una radio que ha fallado a la ética personal y profesional.

La nueva era de @RadioInter_es ha durado tan solo un mes. La programación que estábamos instaurando cuajaba poco a poco entre los oyentes. Se notaba día a día. El crecimiento era muy palpable. ¡Incluso clientes estaban interesados en poner dinero para publicitarse!

En definitiva, el capricho de un empresario ha terminado con varios profesionales en la calle. Qué rabia que se trate así a nuestra profesión. Qué asco que se le tenga tan poco respeto a un medio tan maravilloso como la radio. Pero que quede claro: seguiremos.

Todo esto, os recuerdo, pasa un mes después de dar inicio a esa nueva parrilla. ¿No habían previsto en un mes determinados gastos? ¿Por qué siguieron adelante? ¿En un mes puede una situación pasar de blanco a negro de una manera tan radical? 

Se ha faltado a la palabra y a la ética profesional. Se ha jugado con nosotros de una manera nunca antes vista.

Creo que no nos lo merecíamos. Ninguno de los integrantes. Como he dicho ya varias veces estos días: él se lo pierde. El equipo humano era y es excepcional. Fin.❤️»

Claro, como es una radio que me queda muy lejos, yo no tenía ni idea de todo esto hasta que un amigo me puso sobre la pista. Y buscando, me pregunté quién es el que hacía las mañanas en esta radio, y vi que según su parrilla era aún Carlos Peñaloza. Y el radiochip de hoy es precisamente de Radio Inter, sin más, pero de 2015. Es un radiochip sobre la ausencia de Peñaloza en esa temporada, y los oyentes preguntaban dónde estaba: 

Y claro, que si Peñaloza, Gª Serrano, que si uno, que si otro, que si Inter, Internacional, Intereconomía, que si Decisión Radio, que si Radio Ya... Es que me pierdo. Todo me suena a lo mismo. Escuchad el mal rato o casi mal rato que estaba pasando el señor presentador hablando de la marcha de Peñaloza, escudándose en que no quería decir nada porque, según él, si el propio Peñaloza no quería decir nada... Pues eso. Y yo me pierdo. Van pasando los años y se mueven, se mueven... Es buenísimo el radiochip porque los oyentes, uno tras otro, empezaban a preguntar por él. ¿¿Pero tanta gente escucha estas radios?? Luego miraas el EGM de cada vez que este tipo de emisoras se han metido... y nada. Qué fieles tienen que ser.