Más allá de cómo el gobierno haya gestionado la crisis del coronavirus (y las semanas previas), en las tertulias de la radio se sigue dando información y opinión. Hasta aquí, todo normal. Cuando empieza a no ser normal es que casi se exija desde un partido en el gobierno que un medio de comunicación no pueda criticarles.
En la tertulia del «Hoy por Hoy» del viernes estuvieron hablando de la intervención de Pablo Iglesias y de su gestión.
Opinó la propia Àngels y los que estaban de contertulios ese día: Gonzalo Velasco, Berna González Harbour y Emilio Contreras. ¿Qué dijeron? Pues por resumir, las críticas fueron las siguientes:
- Que Pablo Iglesias no estaba dando ejemplo saltándose la cuarentena.
- Que el ego de Pablo Iglesias parecía estar por encima de la propia epidemia.
- Que no le correspondía quizá el tener el discurso con la carga política que hacía.
- Que quizá el problema no era tanto Pablo Iglesias como el propio partido.
- Que parecía que quería que la parte de Podemos tenía que quedar por encima y diferenciarse de la parte del PSOE pasase lo que pasase.
- Que Iglesias parecía atribuirse competencias que no tenía.
- Que en una situación de crisis parecía que las medallas que pudiera haber se las quería colgar sólo Podemos.
Básicamente, las críticas fueron esas. Nada del otro mundo. No vi insultos ni nada. Quiero decir que son críticas que nos pueden parecer bien, mal o regular... Pero en ningún momento me parecen cosas fuera de lugar, ni que no correspondan a una visión de la realidad desnortada o que quieran malmeter a cualquier precio.
Sin embargo, Echenique decía que Àngels era buena periodista pero.... Que es como decir que Àngels en realidad no estaba haciendo bien su trabajo, y que en caso de hacerlo bien es que el «aquelarre de
tertulianez cuñada» era algo impuesto por órdenes superiores, impuestas por una mano negra que hacía que ella no ejerciera correctamente su trabajo. Traducido: Toda crítica no sólo le parece injusta, sino que además es impropia.
Y luego, Monedero diciendo que Àngels «sembrando odio contra Pablo Iglesias». Y de paso, que da vergüenza ajena. Alucinando que estoy.
Así que el radiochip de hoy es de esa tertulia: el rato en que hablaron de todo esto. Mejor que los gorjeos del personal, el trozo en que hablaron de todo esto en la tertulia para que juzguéis por vosotros mismos. Radiochip del sembrar odio:
A veces me parece mentira que cada vez que se critica una acción de gobierno o de un partido o de un político sea respondido por la gente del partido de esta manera. Igual se podía entender al principio, hace años, porque la cosa estaba tierna y no estarían acostumbrados. Pero si criticar de una manera tranquila y sosegada les parece que es sembrar odio... Pues oye... ¿En realidad están pidiendo (o mejor dicho: exigiendo) a la SER que sea completamente acrítica con Podemos? ¿Es tuitear la nueva manera de presionar, en vez de levantar un teléfono para expresar desaprobación?
Por otro lado, me hace gracia lo que decía Echenique sobre las «órdenes de arriba». ¿Acaso hay algo más arriba que el propio gobierno del que forma parte?
Muchos, durante tantos años, hemos sido muy críticos y extremadamente pesados con la identificación de la SER con el PSOE y de la COPE con el PP. Visto lo visto, el único problema con lo sucedido es que se exige que en la SER no se pueda criticar a Podemos en ningún momento. No se han puesto a rebatir las críticas que he ido enumerando el inicio de la entrada de hoy: se han puesto simplemente a criticar a los periodistas y al medio. ¿Tenemos que suponer pues que las críticas eran acertadas?