martes, 30 de noviembre de 2021

rellena de rica anchoa

Hace un tiempo, con unos amigos, viendo en Youtube publicidades de cuando éramos pequeños,  cosa que os digo que es casi una droga mala, comentábamos que las sintonías, soniquetes y tonadas de las publicidades se nos metían más en la cabeza. Que ahora se usan muchas canciones de fondo y normalmente conocidas para acompañar a las marcas, pero que no se hacen canciones o jingles específicos... Como que ya nadie se va a quedar con la copla. 

No sé si ese comentario responde a la realidad o no, pero por lo general es cierto que ahora no me quedo con las publicidades igual que antiguamente. No sé. A ver si algún publicista me saca de la duda y me explica por qué. Salvo de esto, por supuesto, a Chicfy. Claro que sí, guapi

No sé si es que esto de las tonadas y cancioncillas era una cosa más bien heredada de los anuncios de radio. No sé si es que los anuncios de televisión es que están tan ideados para ser vistos que se olvidan de agujerearnos el cerebro a través de cantinelas. Y no me vengáis con historias, que la mitad de la publicidad en la televisión la escuchamos desde el cuarto de baño mientras meamos. Esto es así, y no me lo discutáis. 

A lo que iba... Que resulta que un día estábamos en un sitio, sacaron unas olivas, y la pregunta fue si eran con el hueso o estaban rellenas de rica anchoa. Una chica se puso a cantar en plan «na, na, na, na, na, na, ¡están rellenas de rica anchoa!» Obviamente, todos reconocimos que era La Española una aceituna como ninguna, y que estaba rellena de rica anchoa. Recordamos que todos nos acordábamos de la marca por el soniquete de la publicidad. Pero... ese soniquete no nació en la tele. Nació en la radio. 

Nos remontamos a los años 40 en la radio. Encontré el siguiente radiochip, que es publicidad de La Española, que venía etiquetada como de 1941 (o sea, 70 años ya), pero investigando en la página de esta fábrica, que es de Alcoy (en Alicante), resulta que la primera campaña data de 1949. Radicohip con anchoa:



Y no, no era exactamente el mismo soniquete. No, no lo es. Ni decían lo de la rica anchoa, ni las notas eran exactamente las mismas. Yo creo que no se pega tanto. Que si aperitivo, que si ensaladas... ¡Joder, dónde está lo de la puta anchoa! Es que hasta los de La Española en colgaron sus propios soniquetes, en plan oficial, y ni rastro de la anchoa y de las notas que resuenan en nuestras cabezas.



«Mi gran sabor» cantaba la original. ¡Que no, que no, que yo quiero la de después! Es en los años 60 (o quizá antes) cuando ya introdujeron lo de la anchoa, como Dios manda. Qué sabor ni qué sabor... ¡Quería el soniquete de la anchoa, joder! Mirad, la única manera es que la cantéis en vuestras cabezas con el instrumental por debajo. 



Así que bueno... Por un lado, y lo más importante de la entrada de hoy, es que si los de La Española me quieren enviar a casa olivas rellenas, yo no tengo inconveniente ninguno. Lo segundo era comprobar que estos soniquetes muchas veces no nacen para la televisión sino que siguen vivas desde la época en que sólo había radio. Y lo tercero es preguntar a los publicistas si es verdad o no que ahora los audios de los anuncios son una cosa secundaria, en el sentido de que no les importa tanto crear anuncios visuales como anuncios que se nos metan en el cerebro. 

lunes, 29 de noviembre de 2021

moldeando sintonías (18): Radiogaceta

Me dijo @DiexistaFM si no iba a meter en esta serie de entradas del blog a la nueva sintonía de «Radiogaceta de los Deportes». Y mira, sí. Ya he hablado hace mucho tiempo de la sintonía buena de este espacio, que es claramente la que usaba Gozalo

Es gracioso, porque por lo visto Gozalo no llamaba a esa sintonía por su nombre sino por el de la película: «Monjas a la Carrera». A su propia sintonía le llamaba así de manera habitual. Hace muchos años de Gozalo, hace muchos años de esos tiempos mozos, y hace muchos años que la audiencia del programa no es la misma. Ya os digo que no tengo muy claro si el demérito de que esto no sea lo que un día fue es cosa de los de la radio —que igual tendrán que ver, pero me inclino a pensar que no será lo principal— sino una cosa de horario y de usos y costumbres actuales. 

Muchas veces se recuperan sintonías (modificándolas) para decir o reivindicar un pasado, para darle la sensación al oyente de que eso que oye es precisamente eso que quería oír; que no quieren ser nada distinto, sino algo parecido a lo que tienen en su cabeza. Pasó también este año con el «Hora 25», que más o menos ha vuelto a lo antiguo. 

Sin embargo, en «Radiogaceta de los Deportes» ponen una cosa que recuerda a lo anterior, pero no ponen la sintonía directamente. Radiochip de las creyentes y algo practicantes a la carrera: 


Que recuerda, pero no termina de ser. Es algo mucho menos impactante, menos llamativo al oído... Es lo que digo de la ausencia de sintonías con personalidad. Desde hace muchos años, en la radio, cualquier sintonía que sea mínimamente impactante, con personalidad, fuertes... Eso está prohibido, o casi. Todas las sintonías son de eso que llaman en inglés easy-listening, de fondo, como si todo lo que sonase tuviera que ser como las músicas del programa de Bertín; algo que uno no sabe si lo ha dejado de escuchar al rato. ¿Sintonías de impacto, a lo Encarna? No. ¿Algo con chispún? Tampoco. Y esta sintonía viene a recordar a lo de antes... pero que no llame la atención. Todo muy hijo de su tiempo. Y blandito. Que no pase a la historia.

domingo, 28 de noviembre de 2021

Almudena y la radio

Almudena Grandes tenía miles de lectores, durante muchos años, y también ha formado parte de la radio. De hecho, ayer muchos oyentes la recordaban y decían que la escuchaban en la SER durante mucho tiempo por las mañanas y por las tardes en el programa de Gemma. 

Sin embargo, en este radiochip de urgencia (porque quién me iba a decir que el radiochip de hoy sería de Almudena Grandes) no va a ser de ella en la SER, sino en Onda Cero. El radiochip de hoy es muy molón: hace nada he hablado de los 31 años de Onda Cero, y hace un tiempo de Adriansens. Creo que ya veis por dónde voy a ir...

El radiochip de hoy es del verano de 1995. Almudena Grandes no tenía esa voz tan ronca, ni quizá reconoceréis tan fácilmente la voz de Adriansens, la de Sánchez Dragó... Y aquel día estaba al frente del programa Mª Carmen Juan, que ayer en Twitter tenía un muy sentido recuerdo para esta escritora. 

Y ojo al tema de gabinete: los OVNI. ¿Mola o no mola? Ahora el gabinete se titularía algo así como: «¿De qué planeta viene Casado?» y cosas del estilo. Lo que sea, pero relacionado con la política del momento. Lo que tengo claro es que ahora no tratarían este tema, ni para pasar el rato. Radiochip OVNI:


El clima, señores... el clima. Y qué entretenido. Y sin Twitter ni internet. Sabiendo que lo que dijeran no iba a ser censurado o ridiculizado a cada momento. Era otro tiempo, sí. Sin embargo, si escucháis las intervenciones de los oyentes, se demuestra que no es necesario todo ello para que la gente juegue a las conspiraciones y demás, o para imaginar mucho. Es genial. Os recomiendo la escucha fuertemente pasada la media hora, y todo en general. 

sábado, 27 de noviembre de 2021

lo que subyace

El otro día tuiteó Íñigo Errejón un momento del programa de tardes de RNE. En él se hablaba de esto de las series de Netflix en catalán y todo eso. En la sección de humor, que llaman «poca broma», que suele estar compuesto por humoristas que son poco sospechosos de ser clasificados como de derechas (¿acaso los hay en las hornadas actuales?) hasta donde yo creo saber, se pusieran a bromear. Si os soy sincero, este radiochip que vamos a escuchar no es nada que me parezca demasiado divertido. Es de esos momentos en que los de la radio se ríen mucho y el oyente pone cara de vaca que ve pasar el tren. Radiochip del juego del calamar: 


No entiendo las risas, porque no tenía aquello gracia ninguna. Y esto es lo gordo: estoy seguro al 100 % de que se les hace difícil hacer humor en RNE sin poder herir a nada ni a nadie. Comentar la actualidad, intentar hacer humor y jamás faltar es una labor complicada. Lo divertido de todo esto es que seguro que no intentaban faltar, hicieron un humor bastante blanco... Y eso desemboca en no hacer ni pizca de gracia. Esas risas me parecen impostadísimas. 

Lo que pasa es que al final terminaron ofendiendo al personal. La gente en Twitter se quejó mucho, y se viralizó sobre todo en el circuito catalán. Además, que esto ocurra en RNE, con su e de España y todo, pues... claro... Eso no podía ser.

Así que emitieron una queja de un supuesto oyente. Oyendo la llamada... A ver... Es que me da la sensación de que eso no era ningún oyente, sino una grabación hecha sólo para poder pedir disculpas para que pudiera venir al caso. Porque a mí no me suena a oyente promedio, quiero decir... Que igual me equivoco, pero me da que está leyendo un escrito para la ocasión. Otro radiochip del calamar:


Pues eso, que RNE a tope con la pluralidad, el no ofender... Lo de siempre. Y recordando que Ràdio 4 fue la primera en catalán y todo eso. 

Lo peor de hacer humor en la radio pública es que normalmente todo tiene que ser blanco inmaculado. Esto implica que sea realmente complicado hacer nada. En la radio actual (y en todos los medios, en general) es difícil arriesgarse, porque se sabe que algo no va a gustar a alguien. La gente busca en internet y otras plataformas no sólo por la comodidad y por la variedad, sino también porque encuentran contenidos en los que se digan cosas. No digo que para decir cosas haya que ofender, pero sí digo que es muy difícil hacer humor sin entrar alguna vez en un terreno pantanoso. Y a donde voy es que esta gente seguro que tenía en mente no meterse en ningún terreno pantanoso, y no es que sacrifiquen en humor por no ofender, es que incluso no intentando ofender también están sacrificando el humor. 

En las redes incluso se metían con la forma de pedir perdón del programa. Yo creo que en su interior pedían degollar gente. Según muchos, subyace ese fascismo interiorizado que existe dependiendo del idioma materno. «Marca Ñ en manada», leía. O «a estos no les perseguirá la fiscalía». También un «puta Espanya», «Un comportament metament feixista al mes pur estil de Goebbels, no teniu perdò», por ejemplo. «Sois una panda de neandertales con micro». Bueno, había muchos comentarios más... Yo creo que caben dos opciones, y una de las opciones es eliminar el humor de la radio pública. A día de hoy, si tan permeable se es a las redes sociales, lo mejor es cerrar el chiringuito y dedicarse a la información y además con cuidado. No sé si gags como el que puse hace unos años, de finales de los años 90, sería emitible en RNE a día de hoy. Lo dudo muchísimo. 

viernes, 26 de noviembre de 2021

«la radio que yo esperaba»

Todas las radios cogen una cantinela para cantar su nombre. Bueno, todas o casi todas. La SER, la COPE, Radio Nacional... ¿Quién no ha cantado eso de Ra-dio-na-cio-nal... ¡¡de Es-pa-ñaaaa!! Casi todas las radios cantan su nombre: Catalunya Ràdio (con la letra de su canción), Cadena 100, Cadena Dial... Un soniquete característico que asociamos al nombre de esa marca. 

Ocurre que Onda Cero también, que hoy cumple 31 años. Sí. Pero... ¿Y si resulta que la sintonía de los 90 de Onda Cero tenía letra? Pues de esto me enteré el año pasado, cuando celebraron el 30 aniversario. Resulta que la sintonía de Onda Cero tenía hasta letra: «la radio que yo esperaba». Lo podéis escuchar en el radiochip ondaceril: 



Que si pasión, razón, ¿flores?, blanco y negro, voz y silencio, cercana, todo emoción... Una letra rara, sinceramente. Además hay cosas que no entiendo: ¿Ha llegado qué? Es que no lo entiendo. Y luego, otra pregunta, además de quién escribió esa letra: ¿Quién cantaba eso? Es un poco Nina, pero es que no tengo ni idea de qué voz desconocida es. 

También me llama la atención ese logo alargado que ponían en algunos sitios al inicio. No lo había visto jamás, igual que la canción de Onda Cero. Muchos descubrimientos en su 31 cumpleaños. 

jueves, 25 de noviembre de 2021

rivalidad sobrevenida

Hace muchos años se dio una cosa bastante curiosa: En los tiempos antiguos de internet, cuando no había Twitter ni nada, eran los propios programas los que abrían foros para que expresaran sus opiniones, dijeran cosas para las secciones... Lo típico. 

Ocurre que hace muchos años «La Jungla» no podía estar como estaba. Abellán tenía que hacer el programa de deportes de la COPE, «El Tirachinas», se tenía que hacer cargo de «La Jungla», y pensaron en un primer momento en que la solución acertada tenía que ser compartir el programa con Arús. Así, un rato del programa lo hacía Abellán y luego aparecía el equipo de Arús. 

Quien mucho abarca, poco aprieta. Resulta que además la COPE le encargó a Abellán el copresentar con Federico aquel programa llamado «Al Tran, Tran», cuyo nombre real tenía que haber sido «El Uno por el Otro», pero esto es opinión... 

Resulta que Abellán tenía un programa con personalidad propia. Resulta que Arús tenía un programa también con personalidad muy marcada, y se parecían entre poco y nada. Intentaron incluso que hubiera una especie de mezcla entre ambos. De hecho, compartían nombre de programa, «La Jungla», y tuvieron que pasar años hasta que por fin estuviera el equipo de Arús desligados y con el nombre de «Arús en la 100». 

Pero mientras, intentaron la cuadratura del círculo. Todo bajo el nombre antiguo, «La Jungla», que realmente tenía dos partes diferenciadas y que no se parecían en nada. Así que, al compartir nombre y el espacio en internet, los que participaban en el foro del programa transformaron aquello en una especie de campo de batalla (exagerando un poco) en el que unos iban con los de Abellán y otros con los de Arús. Así que, en antena, Arús tuvo que hacer este discurso de la rivalidad sobrevenida: 


En realidad, nunca me creí lo de que Abellán había pensado en Arús para ayudarle... Siempre pensé en la opción segunda: La de Casoliva ofreciendo ese hueco a Arús, ya que eran amigos y sabía que era un valor seguro para la cadena. Nunca me tragué lo de que Abellán estuviera interesado en que alguien hiciera su programa, sabiendo que le podía comer la tostada. 

La cuestión es que tuvieron que decir todo esto para que la cosa se calmara, ya que los foros... Bueno, en aquella época ya se sabe. Y si todo el mundo entraba ahí para opinar, se encontraban con un montón de cosas que seguro que no les gustaría leer a los del propio programa. Pero así eran los foros. Fijaos en que ese tipo de cosas desparecieron de todos los espacios de internet. Así que todo esto hoy es poco repetible: Heredar el nombre de un programa se da, heredar medio programa no tanto, y lo de los foros en internet... Pues hombre... No. Cosas de hace 20 años. 

miércoles, 24 de noviembre de 2021

quien estaba detrás

Anteayer muró Antonio Rúa. Yo no sabía quién era, pero Alsina comenzó su entrada de las 8 h de la mañana recordándole. El radiochip en cuestión es el que vais a escuchar a continuación, que es el radiochip tramoya: 

Ya que ayer hablaba de cultura, de actores y todo eso... Hace muchos años estuve discutiendo (en el sentido alemán del término) con un amigo sobre si eran más importantes los actores o los guionistas. Él era claro partidario de los actores, pareciéndose secundarios los guionistas. Yo era de la opinión contraria: lo importante era la historia y cómo se contaba. Es obvio que para que algo funcione bien, lo óptimo es que todo sea óptimo, claro. Pero soy muy de las cosas concretas, y me da igual el camarero, mientras que la comida me guste. Ya sé que es reducir la idea al mínimo, pero para que se entienda. 

Se habla muchísimo de Del Olmo y de tantas otras estrellas. Pero claro... Casi me da rabia que no sea ni muy conocido alguien que ha estado detrás de cosas tan importantes como las secciones míticas del programa «Protagonistas». Me flipa pensar que alguien que estaba tan a tope escribiendo líneas y líneas de intervenciones del programa estuviera tan en la sombra. Sé que es algo mucho más habitual de lo que pensamos, y sé que cuando vemos una serie, en lo último que nos fijamos es en quién ha escrito la historia. El común de los mortales nos fijamos mucho en los cantantes y los grupos y poco en el Max Martin de la vida. Me sabe malo no conocer estas cosas. Sí, me sabe mal no saber quién está realmente detrás de las cosas. Pero los consumidores normalmente somos eso mismo: consumidores. 

Tiendo a pensar que la gente que hace programas, escribe guiones de películas, libros, o que compone música, son reconocidos en sus sectores. Pero es inevitable que, cuando te enteras de la muerte de alguien que te cuentan que era tan importante, uno piense que esto de la fama es una cosa injusta. O igual es una cosa querida por él, que tampoco lo sé. La cuestión es que lo de la radio es una cosa muy artesanal... pero no siempre el vulgo nos enteramos o hacemos por enterarnos de quiénes forman parte de la movida del día a día. Es cierto que muchas veces los presentadores de los programas hacen muchos guiños a los guionistas que han ido escribiendo cosas del programa, y si eres oyente fiel de muchos de esos programas te coscas perfectamente de quiénes son. Pero no siempre es así. 

Sirva esta entrada del blog como esa típica estatua al soldado desconocido. Al menos, al soldado desconocido para muchos. Fijaos si la cosa es sufrida que ayer leí un tuit de Irene Vaquero, de RNE, en el que decía que Rúa le dijo hace años: «Niña, tienes que aprender que nos pagan por escribir. Si luego no no sale en antena te tiene que dar igual». Qué oficio. 

martes, 23 de noviembre de 2021

¿quién es la cultura?

Me voy a poner un poco pejiguero... Pero voy intentar argumentar mi opinión. El buen rollo termina justo en este instante. 

Hace poco, y tras muchísimos años en la SER, despidieron a Marta Gª, que era responsable actual de «La Hora Extra». Obviamente, todos los despidos son malas noticias, y más si se trata de gente que lleva muchos años... Esto no tiene mucho comentario. Pero bueno... han sido muchos los despidos últimamente, ya sea en la radio, ya sea en tantos y tantos sitios. Lo especial de este despido es que, según leí, muchas personas escribieron un texto en contra de su despido: escritores, actores, directores de cine, guionistas, periodistas... Casi 400 personas. Una pasada. 

Transcribo parte del texto: 

«[...] Desde el mundo de la cultura asistimos con pesar a la desaparición paulatina de los contenidos culturales en los medios generalistas. [Yo creo que no se han enterado bien... Lo que ha desaparecido no es el espacio «La Hora Extra» sino que han echado a la periodista que lo presentaba. El programa existía también antes (por ejemplo, con Ana Borderas) y, de momento, se sigue emitiendo].  Cada vez son menos los periodistas especializados en artes escénicas, literatura, cine, lírica o arte en las redacciones de periódicos, televisiones y radios. [Yo de esto no tengo datos]. Las secciones de cultura van menguando inexorablemente. [Yo diría que muy al contrario: la cantidad de medios, sitios en internet y espacios de todo tipo en los que se hace crítica de películas, series y espectáculos de todo tipo es abrumador]. Los análisis, las críticas y las reseñas en profundidad han sido sustituidas por titulares efectistas en busca del clickbait y cada vez es más habitual confundir la industria del espectáculo con la cultura».

Aquí hago un inciso. Quizá sea que soy de ciencias, pero cada día me flipa más la la identificación de la cultura, que es algo amplísimo y realmente vasto, con únicamente la gente que se dedica a espectáculos de previo pago. Se identifica cultura con actores y directores de cine, como si ellos fueran la cultura o peor: la única cultura existente. Si eres actor, eres la cultura: la cultura nace y muere en ti. Creo que eso que critican de confundir la industria del espectáculo con la cultura... Pues estoy completamente de acuerdo con ellos: lo que pasa es que precisamente son ellos los que cada día trabajan en esa identificación, día a día, sobre todo con la ayuda de los periodistas, que muchas veces gustan de formar parte del mundo del espectáculo. 

Por cierto, como digo, el programa se emitía hace muchos años, y se sigue emitiendo. Radiochip del programa del otro día, con Pepa Blanes: 


Entonces, no me está quedando claro... ¿Critican un despido como si se estuvieran cargando un programa? Sigo:

«Esta tendencia debilita la salud de nuestra democracia puesto que la cultura ayuda a fomentar el pensamiento crítico de la ciudadanía, da herramientas a las personas para cuestionarse el sistema en el que vivimos, nos hace menos dóciles. Sin periodistas culturales el eco de nuestro trabajo se apaga, necesitamos que los medios de comunicación funcionen como altavoz para dar a conocer nuestra labor y mantener vivo este pensamiento crítico».

O sea, echan a una periodista, se vende como si hubieran retirado el programa y lo flipante es que la consecuencia es que eso debilita a la democracia. ¡¡A la democracia!! ¡¡Pero estamos locos o qué!! Sin este programa, el pensamiento crítico de la ciudadanía muere claramente. El programa ahora lo lleva Pepa Blanes, que es una periodista especializada en agronomía y en el precio del arroz y el trigo. 

En serio, es tan pomposo todo que me deja alucinado. Sigo:

«Por ello, hemos recibido con consternación el despido de Marta García Miranda de la Cadena Ser, tras 22 años de experiencia en este medio. Con su programa La Hora Extra, que reunía a casi medio millón de oyentes según el último EGM, y sus informaciones en los diferentes boletines informativos de la cadena, Marta García Miranda es un referente del periodismo cultural español. Periodista combativa y luchadora, ha fomentado una parte de la cultura, más crítica y arriesgada, por la que pocos apostaban. La creación contemporánea está en deuda con su labor divulgativa. A lo largo de los últimos años, Marta García Miranda ha descubierto nuevas voces, ha dado espacio a los creadores más arriesgados y ha cuestionado la gestión cultural con nuevos enfoques. En definitiva, ha ejercido con brillantez su labor como periodista y ha ayudado a descubrir nuevos mundos a los oyentes gracias a su labor como prescriptora».

Pues aquí... Pues no puedo decir nada. Consideran que lo ha hecho muy bien en su trabajo, rozando la excelencia, y están muy contentos con su trabajo. Por tanto, consideran o sería de su agrado que siguiera en el programa. Pues este párrafo es muy correcto y supongo que es lo que querían decir. Pero claro, igual pensaban que esto no era suficiente y querían adornarlo con ataques a la democracia. 

«Por todo ello, creemos que es un grave error prescindir de una persona de su talento y profesionalidad, que atesora una experiencia de más de dos décadas. Un medio progresista como la Cadena SER [bueno, en esto no todo el mundo está de acuerdo] no debería mandar el mensaje de que la cultura es algo prescindible. [Despedir a cualquier periodista de cultura no implica mandar un mensaje de que la cultura es algo prescindible. Es tan básico entender esto que no sé si son del mundo del espectáculo o del mundo del inventarse las cosas].  Sus oyentes se van a sentir huérfanos de estos contenidos y el sector cultural va a ir empequeñeciéndose más»[Repito: el programa existía antes de Marta Gª y sigue después, al menos de momento, y ahora lo está presentando Pepa Blanes, periodista especializada en deportes de pelota].

Y finalizan: «Así pues, les rogamos que reconsideren su drástica decisión. El brillante trabajo de Marta García Miranda en estas décadas lo merece. No dejen morir el periodismo cultural en su cadena. Si quieres unirte a esta carta de apoyo, por favor indica Nombre Apellido y Profesión y envíalo a: apoyomartagarciamiranda@gmail.com».

Que no dejen morir al periodismo cultural en su cadena... ¿Acaso el único momento en el que se habla de lo que ellos llaman cultura en la SER era su programa? Por otro lado, me da la sensación de que se han enterado hace 4 días, como quien dice, de que existía este programa. Los que durante algunos años, como yo, nos hemos tenido que levantar en fin de semana al punto de la mañana, nos hemos comido este programa con Eduardo Martín, Ana Borderas... 

Está genial que se solidaricen, que opinen que el programa lo hacía genial, que lo oían siempre, que digan que les parece injusto, que les parezca una profesional inigualable, que crean que lo hacía tan bien que deberían mantenerla... Todo eso es entendible y nadie tiene nada que decir a eso. Pero el rollo de que la cultura y la democracia poco menos que mueren con esta decisión, y ese rollo de autodefinirse como guardianes de la cultura... Todo eso denota que viven en un mundo loco en el que se piensan que los demás somos una especie de pánfilos; seres inferiores que, precisamente, adolecemos de sentido crítico. Empezaré siendo crítico con su loco texto. Alardean de tener mucha cultura (de serla, de hecho), pero sobre todo lo que demuestran grande es su ego desmesurado. 

Lo siento, pero no. No, no son son el Spring de Springfield. 

lunes, 22 de noviembre de 2021

filosofar en la radio

Que si me dicen que la foto no
es de Escohotado sino de Luis Cobos,
yo me lo creo sin problema ninguno.
Si tuviera que nombrar algunas de mis asignaturas favoritas de cuando iba al colegio, sin duda nombraría la filosofía. Me encantaba. Me pareció hasta corta. Pero para saber más... hay que leer mucho. Yo soy de los de leer poco o nada, pero soy de los de escuchar la radio. Lo poco que sé de los filósofos españoles es de las pocas entrevistas que salen en la radio. 

La mayoría de los españoles no nos enteramos de la movida filosófica, pero los oyentes de radio (al menos, muchos de los que poblamos este sitio) somos muy de sorprendernos con lo que suena en ella. Las entrevistas a tal político o tal famoso... Pues sorprende poco. Lo que mola de cuando entrevistan a filósofos es que sobre todo son fieles a su pensamiento, y siempre terminan diciendo cosas interesantes.

Lo bueno de los filósofos en la radio es que opinan como si no existieran redes sociales.

Lo primero es soltar su cosa, su pensamiento, y luego lo que piense el personal... Pues oye... Mira tú. Qué cosas. 

Así que siempre terminan siendo incómodos. Siempre. Siempre terminan diciendo cosas. Siempre. Sé que Escohotado (quien murió ayer, y por lo que va el radiochip de hoy) ha tenido una especie de última popularidad precisamente gracias a las redes. Son de las personas que han podido soltar sus pensamientos gracias precisamente a las nuevas tecnologías y, a su vez, los que menos permeables sean a ellas. 

Como yo escucho lo que escucho, para hablar de Escohotado me viene a la mente la entrevista que le hizo Julia Otero en 2016. Radiochip escohotado: 


Lo divertido de hablar con filósofos es que siempre terminan polemizando. En esta entrevista, Escohotado, con una habilidad pasmosa, logra polemizar con Julia por el tema de la llamada «discriminación positiva». Si en vez de Julia hubiera sido un señor con bigote y de derechas, el entrevistador hubiera terminado polemizando con él sobre lo que hubiera encontrado ese señor para polemizar... Y el filósofo en cuestión, encantado. Como diría Rafa Latorre, es su trabajo. 

Lo que me gusta de espacios así es que se pueda hablar de todo, y que se pueda estar de acuerdo, no, polemizar, enfadarse, no perder las formas y, sobre todo, que se toquen temas interesantes. Por eso muchas veces me interesan menos muchos programas de radio: en cuanto sé que no me van a aportar nada nuevo o cuando sé cómo va a ir un tema, esté de acuerdo o no, como no hay debate existente, pues adiós. Además, es divertido ver que, según he ido viendo, su posición sobre las drogas les hacia simpático para unos y su pensamiento político en los últimos años gustase justo a los otros. No sé. Tengo esa sensación. 

La filosofía casa bien con la radio. No es que pida espacios de filosofía extrema, ni programas donde se esté filosofando como tema del programa. Yo con escuchar cosas interesantes (como en los gabinetes más antiguos que en los actuales) o simplemente que respondan a un pensamiento libre de las ataduras del qué dirán, me vale, sean del tipo que sean. 

domingo, 21 de noviembre de 2021

en noviembre de 2020...

Noviembre empieza siempre con lo de los difuntos y tal... Y desde hace muchos años, como Franco es un tema de actualidad (al menos en Público siempre lo es), pues hablé de cuando murió, también de Maradona, y del auténtico Theo Vargas. Hablando de lo de Maradona... Recupero el radiochip que puse, que fue cuando García lo tuvo como primer invitado cuando llegó a la COPE. Radiochip peluso:


En realidad, lo más escuchado del blog no sólo en noviembre sino en todo el 2020 en el blog fue el tema de Cárdenas y la tal Laura, que no se llamaba Laura. Fue lo que más dio que hablar también en redes. Pero también fue muy comentado la oferta inesperada para hacerse con PRISA por parte de unos empresarios misteriosos... y detrás estaba Blas Herrero. La pregunta era si eso afectaría a su línea editorial. Daba igual, porque tenía pinta de que eso no iría a ningún lado... Pero hablé de estos temas, de si se pisaba el límite y de si salirse de ese marco sería interpretado como una deriva ideológica.  

Hablé de la audiencia de la radio a las 22 h y a medianoche. Pero más tiempo me entretuve con el tema éste de las redes sociales y demás... De modernidades que no lo son tanto. primero, sobre la aplicación de la SER, que sería muy moderna pero... en fin... También de eso de que se le decía que no al DAB, y si es un tema que nos la trae al pairo, de si nos la trae al pairo si tal locutor se tiñe o no, y de si nos la trae al pairo cosas que teóricamente eran guays y novedosas, cuando en realidad nos dejan fríos

sábado, 20 de noviembre de 2021

no despedirse

El otro día publicaban en El País que hoy ya no se emitiría el programa «Mundo Babel», que llevaba emitiéndose ya 20 años en Radio 3, y que, por lo visto, era el programa más escuchado de la emisora, por encima incluso del programa diario, el despertador de Carmona. 

Este programa sólo ha pasado una vez por el blog, porque, aunque lo descubrí tarde y parecerme muy molón, coincide (o coincidía) en horario con el Pino bueno. Hubo pocos comentarios en esa entrada, pero todos muy a favor del programa. 

Silvestre, a través de lo que decían en El País, decía que se lo comunicaron el lunes, en plan repentino, y desde la cadena, según se ve, aseguran que la cosa tiene que ver más bien con el plan de jubilaciones, y tirando. 

El último programa de «Mundo Babel» es el que vais a escuchar a continuación en este radiochip babel fish:


Y, como siempre en estos casos, el típico lamento de no poderse despedir de su audiencia. Me apetecía reflexionar sobre esto, sobre todo en los casos que, como este, llevaban ya 20 años en antena. 

Sabemos perfectamente que esto de no despedirse no es algo raro. Muchos programas terminan de manera abrupta y sin que esto se produzca. Suele ocurrir muchas veces en las cadenas comerciales, sobre todo si se teme que en pleno directo haya una especie de ajuste de cuentas, que se diga algo inapropiado, algo que tenga que ver con anunciantes... O simplemente por venganza o mal rollo. 

Que ocurra en la pública... eso es algo que me sorprende más. No sé cómo va el tema de las jubilaciones, obviamente, que me pilla muy lejos, pero supongo que no te dicen de un día para otro que te has jubilado. No sé. ¿Es algo que depende de RNE? En ese caso, peor, porque lo suyo sería avisar previamente para, al menos, hacer algo bonito o despedirse. ¿Es algo producto de las típicas venganzas y malos rollos, marca de Radio 3 y sus lucas? Pues no sé. Pero tengo claro que aquí algo ha fallado. 

Pero... más allá de lo que pase en la radio, en los despachos, en la dirección y con los malos rollos que muchos no controlamos pero que sabemos que existen... ¿No piensan en los oyentes? Sí, ya sé que aquí los oyentes no pintan nada, pero... A ver... A los oyentes, en general, nos gusta que si hemos seguido un programa, a no ser que sean causas mayores, que haya una despedida o algo. Más que nada, porque somos los oyentes de los programas los que creamos un vínculo con ellos. Imaginaos los que hayan escuchado este programa durante 20 años. ¿Qué menos que un programa en el que al menos se sientan reconfortados con un adiós? Sí, muchos oyentes somos así... Nos gusta que la gente a la que hemos escuchado años y años de nuestra vida se despida de nosotros por la misma vía con la que se dirigían a nosotros. 

Pienso en esos oyentes de «Mundo Babel» y de todos esos programas que se han esfumado sin que los oyentes tuvieran la oportunidad de que quien les hablara les dijera adiós. En una radio pública chirría, ¿no? Igual soy una especie de romántico raro. Pero qué menos. Aunque sea gratis. Total... 

viernes, 19 de noviembre de 2021

Franco aún no había muerto

No, nada de 20-N... Esta vez hay que hablar del 19-N. Porque eso de que Franco murió parece que fue una noticia sorpresa. 

Para los de mi generación, que somos nacidos tiempo después de la muerte de Franco, hemos visto en la televisión 800 veces eso de que Franco había muerto. Y en la radio, igual. Durante muchos años pensé que vale, que le habían operado y que murió días después pero... a ver... un poco contra pronóstico. Siempre había escuchado lo de que le habían tenido vivo artificialmente y cosas así, pero claro, tú eres un chaval y ves todas esas imágenes de gente que parece que no se lo esperaba... y te quedas con la idea de que todos pensaban que iba a salir de ahí. 

El radiochip de hoy es precisamente para todos aquellos que como yo no hemos vivido esa época, que hemos visto mil veces las imágenes con el famoso «Franco ha muerto» y nos quedaba la impresión de que era algo completamente inesperado, como quien se entera de que tal ha muerto en accidente de tráfico. 

Nos vamos al 19 de noviembre de 1975. El parte de RNE decía que... bueno... que la cosa estaba ya cerca. Radiochip de Franco se ha subido en un árbol:


Madre mía... que estaba a 34 °C. Y la fórmula del «equipo médico habitual», que ha llegado hasta nuestros días como coletilla. Y bueno, deja claro que el pronóstico era más que complicado, con lo que de sorpresa... poca. A los que vivieran aquello, o los que sean expertos en el tema, les hará gracia que muchos pensásemos que fue una cosa casi inesperada, pero lo que se ha repetido una y otra vez son reacciones de tristeza y sorpresa. Oyendo esto, ahora me queda más claro no. 

jueves, 18 de noviembre de 2021

noche de amor

El 18 de noviembre de 2011 ocurrió en Telecinco uno de los momentos que más veces se ha recordado. Es historia de la televisión moderna. Hace 10 años, en pleno «Sálvame Deluxe», Bárbara Rey contaba que sí, que ella y Chelo Gª Cortés, en los tiempos antiguos, habían tenido una noche de amor. Ese minutillo de televisión ha sido de las cosas que más veces hemos visto en televisión repetidas. De ahí a icono lésbico televisivo.

Para conmemorar esta fecha, he traído un momento de radio muy curioso. Es del «Parlar per Parlar» de cuando estaba Gemma Nierga sólo para Cataluña... Principios de los años 90. Una señora de 70 años llamó al programa porque tenía una curiosidad que necesitaba satisfacer: ¿cómo se lo montan dos mujeres? Claro, eran otros tiempos... Ahora sería tan fácil como ponerlo en internet y ver vídeos hasta desgastarse la pepitilla. Pero en aquel tiempo, la mujer eligió llamar a la radio. Esto es lo que preguntó en este radiochip de «tú y yo, Chelo». 


Siempre que pongo documentos antiguos del «Hablar por Hablar», siempre señalo lo mismo: Cómo era el programa antiguamente (divertido, pícaro, picantón, sentido... incluso un poco pánfilo y pacato) y cómo terminó derivando en hablar de cánceres, depresiones y estar medio moribundo. A ser un programa intenso y resabiado. 

La cuestión es que en aquella época, cuando las llamadas eran de guardias civiles que estaban juntos y no lo decían en público, o esta señora que llamaba para decir que quería saber cómo se lo hacían dos tías... Bueno... Igual ahora es que no nos llamaría nada la atención. 

Siempre se señala que el «Hablar por Hablar» no era un programa como el típico de las películas en que la de la radio pregunta e intenta dar consejos, sino que la presentadora simplemente escuchaba. Esto se repitió hasta la saciedad, yo creo, hasta el punto en que se lo debieron de terminar creyendo todos. Pero el  «Hablar por Hablar», yo creo, no triunfó por ser un formato distinto, ni por dejar escuchar a los oyentes o no darles consejos o por la habilidad para preguntar. El  «Hablar por Hablar» era esa risa del final de Gemma, que sin decir nada, era lo que hacía conectar con el oyente. 

miércoles, 17 de noviembre de 2021

sin declaraciones

Muchas veces me enseñan o pasan momentos de radio del pasado por lo que se contaba en aquella ocasión, por lo que se decía, por las músicas que ponían... Otras veces me pasan cosas que terminan llamándome la atención por la publicidad que ponen. Sí, en muchas ocasiones me pasan momentos de radio por unas razones, pero a mí me llaman la atención otras. 

Esta vez no es por lo que se dice sino por su ausencia. Me pasó @DiexistaFM un enlace a un canal de recuerdos de la radio de Tenerife. El momento de radio que me indicó fue el siguiente radiochip boletínrenesco, que es un boletín de RNE de 1989: 


Vamos a ver si acertáis por dónde voy... Vamos noticia por noticia... 

La plaza del pueblo de la primera noticia.
- La C. E. E. pedía un informe sobre una enfermedad bovina en Castilla y León. 
- Reunión de algunos ministros para ver qué plan tenían por el tema de la sequía. 
- Ganaderos cántabros que protestaban. 
- Aumentaban las tasas académicas de los estudios universitarios. 
- Que las elecciones gallegas no coincidirían con las generales. 
- Aznar preparaba con Fraga su designación como candidato del PP.
- Conferencia de paz de París.
- Moldavia relegaba el uso del ruso en la república. 

Bueno, ¿y...? 

Resulta que me he fijado en que a día de hoy, casi todas las noticias de las que se dan en los boletines son declaraciones de alguien. Me explico: no sé si es que antiguamente era muy costoso tener declaraciones del personal y tenerlas en antena y si hubieran podido las hubieran utilizado, pero es que me he dado cuenta de que actualmente muchos de los boletines informativos (y espacios informativos, en general) se hacen a base de cruces de declaraciones. Gente que dice una cosa, la opinión de la oposición, lo que ha dicho el otro, la otra que dice lo otro, la otra de más allá que dice que no sé qué...

Pero escuchando estas noticias, tan concretas y descriptivas, dan una sensación de paz increíble... Siendo que muchas de ellas son noticias de mal rollo. Pero he tomado conciencia de que muchas de las noticias que se dan ahora no son tanto noticias como un repaso a las declaraciones más llamativas de los políticos: mucho anuncio, mucha crítica... Y menos noticias concretas. No sé si es sólo una casualidad y que he pillado un informativo raro, si es que antaño simplemente no tenían acceso a tanto sonido y tanta declaración, o si  ahora el cruce de declaraciones y las polémicas, en ocasiones forzadas, están sustituyendo a las noticias concretas. 

Ya me diréis si tenéis la misma sensación o es cosa mía.

martes, 16 de noviembre de 2021

energía gratis

Se le ha dado mucho a Casado este fin de semana por decir una obviedad. Sí, me estoy refiriendo a lo de la energía solar. Tan obvio era lo que dijo, que todos los que han corrido a criticarle han hecho que siga con los ojos como platos. Más que nada, porque son cosas que se dan en la E. S. O. Es muy curioso que hayan salido a ridiculizarle en masa precisamente los periodistas con ideología abiertamente contraria, en una espiral de convencimiento sin base. Una bola de nieve en la que unos servían de parapeto de los otros. Como digo siempre, lo importante ahora en el periodismo no es dar informaciones con base, sino posicionarse muy fuertemente para ser referencia de un determinado pensamiento político.

Talegón también mostró su
sorpresa por las palabras de Casado.
Menos repercusión ha tenido el artículo de este fin de semana de Beatriz Talegón. Sí, ya sé que su relevancia política no es la misma ya que ahora mismo no es nadie importante en el panorama; pero toda esta gente no ha salido a ridiculizar que se hizo eco de un loco invento consistente en un generador de energía sin costes. Vamos, que ese señor no se conectaba a la red y tenía energía gratis. 

En bachillerato de ciencias, a la hora de hablar de termodinámica, se suele hablar de todos esos supuestos inventos en los que se saca energía de la nada, violando las leyes de la termodinámica. Se suele hablar de tal o cual móvil perpetuo, se suele hacer la típica pregunta de: «¿por qué no podemos hacer dos frigoríficos gigantes en los polos para evitar que se derritan?» y cosas del estilo. 

Tengo que decir que el periodismo actual es muy, muy, muy permeable a este tipo de inventos imposibles. Las asignaturas de ciencias con un mínimo de enjundia son optativas en el sistema educativo... 

Sí, se vende una revolución loca, la cuadratura del círculo... En La Vanguardia, donde se hicieron eco de este supuesto invento también; desde hace años cuela casi cualquier invento imposible. Son visitas, así que... Se publica, que la ciencia no levanta el teléfono. Se añade además ese componente ideológico en el que las malvadas compañías eléctricas están empeñadas en silenciar todos estos inventos. Que nadie se entere de que estas cosas son posibles. Talegón nos traía la historia de ese extremeño que era tan bueno que donaba el producto de dos décadas de trabajo a la humanidad. ¡Donaba su patente! Qué persona tan bondadosa. El vídeo donde lo explicaba no tenía desperdicio. 

Queridos periodistas y políticos, queridos todos: 

NO SE PUEDE VIOLAR LOS PRINCIPIOS DE LA TERMODINÁMICA.

Ya está. No se puede. Mensaje para los políticos: las leyes de la termodinámica no se pueden votar.

Mensaje para los tertulianos de las radios y periodistas: Las leyes de la termodinámica no son opinables, aunque el que las enuncie no sea de tu cuerda. 

Por eso no tiene sentido que desde un determinado partido o ideología política la gente se alinee en contra de unas declaraciones que son obvias. Además, jugar a que podemos saltarnos esas leyes y que poco menos que las eléctricas son las que imponen estas leyes científicas es del todo ridículo. 

Ella, también a lo suyo.
Cualquier estudiante de bachillerato de ciencias sabe que esto es muy loco y que no puede ser. Pero cuela en los medios de comunicación. ¿¿Se libra la radio de esto?? Pues, obviamente, no. Menos mal que las radios y televisiones importantes no se han hecho aún eco (que yo sepa), pero aquí tenemos un extracto del programa de la pública extremeña «El Sol Sale por el Oeste». «El invento de un extremeño que quiere donar para los más necesitados». Energía eléctrica gratis. Radiochip de violar la termodinámica sin despeinarse: 


El hombre dice que no es un móvil perpetuo, pero vamos, que genera más electricidad que la que gasta. Genial. 

Y quiere regalarle esta patente a los más pobres: a los de la pobreza energética. ¿No es bonito? Lo bueno es que teniendo «los planos y los esquemas», lo puede hacer hasta su vecino con el que no se habla. Vamos, que Talegón está a tope con este inventazo tan ideológicamente sin fisuras. Acaban de resolver el problema de la energía mundial y vosotros ahí, engañados por Endesa e Iberdrola. ¡Panolis! 

Ojo a lo que comenta el señor en el minuto 9 del radiochip: que este señor en 2004 pagó 11 días de arresto domiciliario por meterse con unos ingenieros en un centro de transformación en Zafra. Eso, y 120 euros por darle una bofetada a un técnico. 

Este señor es un visionario, Talegón es su valedora, La Vanguardia se hace eco de esto, que es «la energía del futuro», y los de la radio le dicen que lo mejor es que haga un generador grande, que es la mejor venganza contra esa gente de las eléctricas. Pero sólo para los pobres. Y siempre, basándose en cosas de Nikola Tesla

Me encantaba la gente que respondía en Twitter a este notición del que se hacía eco Beatriz Talegón: que si este señor seguro que le mataban para que no se les acabara el chiringo a las eléctricas, que si Tesla ya inventó algo parecido pero que no le dejaron... Y lo mejor es que este señor también se subió al carro de las pulseritas magnéticas en los 90, según leí. 

Normal que Talegón esté a tope con este señor y se eche la mano a la cara y muestre su estupor en Twitter por las palabras de Casado. ¡A quién se le ocurre! 

lunes, 15 de noviembre de 2021

lo más y lo menos: noviembre de 2011

Vamos a echar la vista atrás en el blog 10 años y mirar qué es lo que más se escuchó (y lo que menos) en noviembre de 2011 en el canal de ivoox donde dejo los radiochips.

Lo más escuchado:
 ¡Ey...! ¡Navidul! Entra la publicidad del Navidul en el  «Tiempo de Juego» de la COPE mientras Juanma Castaño hacía el canelo. 

No tiene mucho más, pero la verdad es que al principio lo escuchaba y me reía, porque quedaba súper patillero y molón. Radiochip jamonero:


¡Ibiza! ¡Pachá! 

Lo menos escuchado: De cuando Jesús Cintora era aún Jesús Ángel Cintora. Un boletín en el que conectaban desde varios puntos en una huelga general. Ahí estaba de reportero. Radiochip de Jesús Ángel: 


Que era así como se le nombraba en la radio cuando estaba en los informativos de la SER en Aragón, en Radio Zaragoza. Pero con los años perdió el Ángel. Qué poético. 

domingo, 14 de noviembre de 2021

como la carta de ajuste

El radiochip de hoy, por supuesto, tenía que ir sobre Radio Barcelona. Y ojo, porque es bastante especial... Que digo yo que tenía que ser como una especie de carta de ajuste a lo radiofónico. No le veo demasiado el sentido, porque en la radio no hay que ajustar el color ni el contraste... Sólo poner la ruleta en donde toca. 

Pero vamos a un inicio de programación de Radio Barcelona de no sé qué año. No sé si me pasó Cesc este radiochip hace un porrillo de años o qué. Pero me parece muy curioso. Es alucinante pensar simplemente en que una emisión así sonara en la antena. El tono, la repetición del jingle, esa invitación para que el oyente permaneciera a la escucha... Entonces, en FM, pero en el 93,9. Aquí va el radiochip de ajuste: 



Que tiene que ser hace muchísimo (a principios de los 80 quizás) por la frecuencia, porque se habla en español... Y por la música que suena. ¿Alguno sabría identificar el año exactamente? Esta frecuencia después sería Los 40, obviamente. Si veis la imagen, también aparece la frecuencia antigua de Radio Barcelona... Antes de que fuera la diabólica de 666 kHz. 

Estas cosas me flipan porque eso de que se publiciten también 24 horas de emisión... Es que no me cabe en la cabeza esas épocas en que en la radio no se emitía todo el día. Igual que no me cabe en la cabeza que en televisión hubiera una hora en la que todo acababa, esa carta de ajuste antes de empezar a emitir... Es algo que, a pesar de saber que ha existido y haberlo visto con mis ojos, me parece que lo ha vivido otra persona. 

sábado, 13 de noviembre de 2021

entrevistando en inglés

El radiochip de hoy se emitió a través de Radio 3 el 13 de noviembre de 1991. Es decir: hace 30 años, los oyentes de Radio 3, del programa «Diálogos 3», de Ramón Trecet, tuvieron el placer de escuchar una entrevista en inglés. 

Bueno... en realidad es una cosa rara, porque en la radio, desde hace muchos años, o se graba la cosa en inglés y se traduce encima después, o... vamos, que no se hace. Rara vez un locutor, por mucho inglés que sepa, se pone delante de toda su audiencia. Quizá Trecet lo hacía habitualmente, pero a mí me sorprende muchísimo en pleno 2021. 

Pero... ¿A quién entrevistaba Trecet en inglés? A Enya. Escucharéis la voz de la gran Eithne Ni Bhraonain hablando de su música. Ahora tiene 60 años, pero en el momento de este radiochip contaba sólo 30 añitos: los suficientes para pasar a la historia con su matraca. Radicohip 13t: 

Desde luego, su tono de voz está en consonancia con su música. Porque si os lo habéis puesto, quizá estéis ya sedados. Pero bueno... En esa entrevista le preguntaba Trecet a Enya sobre la relación que tenía con el resto de músicos irlandeses. ¿Tenía ella alguna relación con quien fuera? Pues ya lo podéis escuchar: Ni de coña. Que se la pelaba sobremanera lo que pensaran o dijeran el resto de sus compañeros: No he encontrado una manera más tranquila en mi vida de decir que te la sopla completamente todo lo que pudieran decirle sus colegas. 

Podríamos decir que esta mujer era especial. Podríamos decir que era rara de cojones, también. Que los tres que hacían el disco se lo habían compuesto todo ellos, y que pasaban del resto. Le preguntaba Trecet qué era el éxito para ella, y ella decía que era que la gente escuchara su música. Especial, rara y sosa.

La tía hizo una versión de «Noche de Paz» en gaélico. Reto a Guillem Caballé a que lo ponga en navidades en antena. Le reto muy fuerte. Porque yo creo que Los 40 Classic tiene que incluir algo así en su programación dentro de un mes y pico. 

Existe un asteroide al que le pusieron su nombre. 

viernes, 12 de noviembre de 2021

¡memo!: «las edades en Andalucía»

Pues como he estado mirando estos meses las edades de los que oyen las radios más escuchadas, y como resulta que en noviembre de hace 5 años hice eso mismo para Andalucía, toca ver si ha cambiado mucho la cosa en este lustro. 

En la entrada de hace 5 años puse el siguiente gráfico: 


La SER era la clara vencedora, y Canal Sur Radio tenía un tirón muy parecido al de Onda Cero. Como siempre, RNE tenía más audiencia cuanta más edad. 

Y, 5 años más tarde... Vaya, esta vez sí que hay algún cambio. 


Además de que ha aparecido una nueva columna, que es la de mayores de 75 años (al final), vemos que ahora es la COPE la más escuchada en Andalucía (quiero decir... durante la temporada pasada). Eso sí... empatada técnicamente con la SER. La COPE gana claramente en el rango de edad de 45 a 55 años, y por poco en los mayores de 75, pero en el resto de edades gana la SER. 

Ahora Onda Cero está claramente por delante, aunque aún a distancia de las otras dos, pero superando a Canal Sur Radio, que tiene un perfil de audiencia menos envejecido que muchas de las otras públicas de España. Y, después de RNE, he añadido ahí a esRadio, que es la menos escuchada con diferencia, pero que no es insignificante como antiguamente. 

Hace 5 años puse un radiochip de Canal Sur Radio que ya no está colgado, así que tenía que buscar algo nuevo... Aquel radiochip iba de Canal Sur Radio desde Barcelona. Y ahora voy a poner otro radiochip de 2016 en el que hablaban de la Sagrada Familia. Radiochip sagrado: 


Este radiochip pertenece al programa «La Noche más Hermosa». Pues... Hasta aquí las curiosidades. Esta vez estaba curioso porque sí había cambios, aunque no locos tampoco. 

jueves, 11 de noviembre de 2021

no se te puede pasar

Como casi siempre, para el 11 de noviembre, que es once del once, va una entrada de uno de los anunciantes que tradicionalmente se han dejado más pasta en la radio: la ONCE. 

Resulta que revisando archivos antiguos me encontré un anuncio de hará unos 20 años, de Gomaespuma, que a día de hoy casi puedo recitar de memoria. Estoy seguro de que muchos de vosotros, si tenéis más de 30 años, también. Para los de menos de 30, que lo escuchen... que no puede ser que no conozcan cómo eran este tipo de anuncios. Radiochip undécimo por favor:


Es casi la versión corta del clásico del taxista. Bueno, del radio-teléfono taxi. Pero es que he escuchado tantas veces este anuncio que al escucharlo tenía que subirlo al blog. El radiochip de hoy es un auténtico clásico de la publicidad y de ese estilo de publicidad. 

miércoles, 10 de noviembre de 2021

su radio de izquierdas

El tema de hoy es de una cosa que ocurrió anteayer. La radio actual es radio con leones: existen políticos a los que si no les gusta lo que escuchan, echan a los de la radio al veredicto del público, no sin indicar previamente a ese público qué es lo que tiene que opinar. 

Según el postureo popular, según los manuales del buen radiofonista y de los exquisitos periodistas; según los criterios teóricos y el reglamento de la pluralidad y demás, en las radios debería haber distintas opiniones, distintos tonos, distintos puntos de vista... 

Bueno, desde hace bastante tiempo, ya sabemos todos que los periodistas posturean mucho con esto y que los políticos... esos no digamos. Es más: el postureo de la pulcritud del político con respecto a los medios de comunicación suele ser inversamente proporcional a la tendencia a señalar con el dedo lo que no le gusta. 

La SER es la radio más escuchada, y, aunque metan a gente de todo pelaje, está claramente significada con la izquierda (desde hace muchos años de manera clara y sin mentir al oyente diciendo que son imparciales). ¿Hasta aquí he dicho algo loco o que no supierais el 99,5 % de los que leéis el blog? No. 

Antiguamente, parecía que significarse políticamente o mostrar tan a las claras la filiación política (aunque fuera vox populi) era algo que no quedaba bien. Actualmente sabemos que lo que parece dar mayor rédito es significarse y que quede bien claro para todo el mundo para dónde tiras. El objetivo es convertirse en el medio de cabecera del bando que sea. Luego hablan de polarización, pero es un juego al que juegan todos los medios que creen (con razón) que esto es lo que lo está petando. 

Así que no sé si es tan importante dar buena información, exclusivas, investigaciones, primicias o reportajes de fondo y elaborados como simplemente el estar significados políticamente: ser el faro principal o la referencia o cabecera de cada uno de los consumidores. 

El otro día estuvieron hablando en el «Hoy por Hoy» de la sanidad. Obviamente, ya nos sabemos cómo se trata el tema de antemano: a la sanidad pública hay que apoyarla, que todos los fondos que tengan son pocos, que viva la sanidad pública, que hay que defenderla de las privatizaciones (siendo que día sí y día también nos hablan de que ya está privatizada) etc. Bueno, cosas típicas sin entrar en detalles, no sea que entonces haya algo de lo que discutir. [Como la reforma laboral o la ley trans, que todos están 100 % de acuerdo hasta que hay que redactar cosas e ir a lo concreto, y entonces es cuando se dan cuenta de que cada uno piensa distinto]. 


Total, que en la tertulia estuvieron hablando de la sanidad... Y ¡pumba! Tuit de Echenique. El radiochip de hoy es de la tertulia de Àngels, que, como en tiempos de Iñaki, le llaman de nuevo «el abierto». Id al minuto 32... 


Lo interesante no es qué se opina, lo interesante no es lo que se diga en la SER, ni los de la tertulia, ni lo que opine Àngels... Lo interesante del tema en un primer momento es que Echenique les echa a los leones porque da por hecho que en la SER tiene que haber una única opinión y que esa opinión tiene que ser exactamente la suya, porque si en esa radio no se dice exactamente lo mismo que dice él, a esa radio hay que tirarle de las orejas. En tiempo real, algunos políticos a golpe de tuit van explicando cuál es la opinión que se debe tener en ese medio. La única, además. 

Hasta aquí no dejaría de ser algo curioso, y me diréis que Echenique puede hacer o dejar de hacer lo que le dé la gana y que puede opinar en tiempo real exactamente lo que le salga de ahí. ¡Y tenéis toda la razón!

Entonces.... ¿Dónde está lo comentable del radiochip de hoy? ¿El fin de todo esto? Porque ya digo que Echenique está en todo su derecho de intentar opinar e influir, e incluso está en su derecho tirarles a los de la radio a los leones. 

Lo comentable es la reacción de los de la radio. En primer lugar, la permeabilidad a este tuit. Como decía, lo interesante para la SER no es dar una tertulia plural, no es dar muchas opiniones, no es informar de forma clara y concisa para el oyente... Lo interesante es estar identificados, y lo que dice Echenique afecta frontalmente a esa percepción por parte de mucha parte de su audiencia, que son votantes de Podemos. 

Muchas veces, la gente en Twitter y sobre todo los políticos, juegan un comodín: critican locamente, de manera que sin dar muchos detalles ni entrar en materia, consiguen seguir en la pureza del pensamiento (moralmente superior) a costa de quien sea, en este caso de esta radio. Esto es muy actual: cuando alguien no defiende a ultranza una determinada opción hasta las últimas consecuencias, dejas espacio libre para que alguien que quiere buscar una determinado hueco o quiere relevancia acuse. La persona acusada queda como vendido (a la sanidad privada en este caso), y como no existen los matices... Ahora resulta que Antón Losada, que es el ejemplo típico que siempre pongo en el blog para hablar de alguien cuya opinión conocemos antes de que hable, pues... ahora resulta que también es un vendido de la derecha y del neoliberalismo. ¡Es genial! 

Quizá la espita que desató todo fue lo que escucháis en el minuto 39 en voz de Guardans: «los Echeniques que no están en el gobierno, pero lo presionan». Total, que termina Losada metido en un saco del que intenta salir, y termina pareciendo que todos los que opinan en la SER tienen que opinar lo mismo que se dice en Podemos por obligación. Porque si no, no es «tu radio de izquierdas». 

Lo loco es que terminan respondiendo a Echenique desde la cuenta del programa y desde la propia radio. Es como si existiera cierto miedo a todos esos tuiteros... En algún momento, las radios (no sólo la SER) se desligará de tanto miedo a lo que se diga en redes sociales, porque obviamente es una muy pequeña representación de la gente. 

Como decía Losada, si se tienen argumentos, que se pongan encima de la mesa. Àngels loaba a sus tres analistas y decía que los tres apoyaban a la salud pública... ¡como si fuera obligación de los tres hacer esa defensa! Obviamente, es un tema que en España tiene máximo consenso. Por eso mismo, jugar a decir que desde la SER se hace un discurso a favor de privatizar toda la sanidad a saco... Pues mira... No. Es que ni Vox siquiera, al menos públicamente. 

Y es normal que tengan miedo de no ser percibidos como la radio de izquierdas (y que con eso juegue Echenique) porque con un simple tuit, ya tienen a gente opinando (aunque no hayan escuchado nada) y diciendo que ya no son sus oyentes. «La gente de izquierda hace mucho que no os escuchamos» es un tuit cualquiera y que tiene mucho de pose. Es una manera de ir de puro e inmaculado. Pero para mí el trasfondo es otro: en la radio se tiene miedo de no ser percibidos en las posiciones en las que creen que tienen que ser percibidos. Están obsesionados con estar significados todo el tiempo. Y esto creo que es un problema.